En las últimas décadas la historiografía-literaria cojedeña
ha suscitado un gran interés en el ámbito sociocultural venezolano. Ésta ha
sido catalogada como una de las más fieles a su propio devenir, ya que sigue
las peculiares rutas de lo que hoy se denominan “literaturas regionales”
(Medina López, 2002). Ella, sin lugar a dudas, nos muestra una visión muy
particular de asumir la tradición, de interpretarla y, lo que es más
importante aun: presenta una perspectiva diferente de afrontar el destino del
hombre desde múltiples y complejas visiones, además de incorporar a la
literatura nacional un rico caudal de registros lingüísticos-literarios que
la enriquecen con una indiscutible autenticidad y frescor.
Una manera de amalgamar y presentar al público
lector esas voces polifónicas, que emanan de diferentes autores y textos
cojedeños, es darlas a conocer a través de las seis ediciones antológicas
que fueron presentadas durante el mes de noviembre de 2004, en la ciudad de
San Carlos, en Cojedes (Venezuela).
Iniciaremos
esta reseña con Relatos de la otredad: antología de la narrativa
fantasmal cojedeña (Unellez; San Carlos, 2004; ISBN 980-2481-41-6; 100
p.), la cual contiene cuentos premiados de Juvenal Hernández, José Leonardo
Ospino, Héctor Cardozo, Ramón Hernández, Francisco Javier Frías, Eduardo
Mariño, Luis Enrique Frías, Julio Rafael Silva Sánchez y William Ramírez,
quienes son autores de los textos ganadores o merecedores de menciones de
honor en el Concurso Nacional de Cuentos y Relatos: Misterios y Fantasmas
Clásicos de la Llanura (1998-2002) “Ramón Villegas Izquiel”, según
dictaminó el prestigioso jurado que tuvo a su cargo las cuatro ediciones de
este certamen, docentes de la Universidad de Carabobo; Universidad Central de
Venezuela; Universidad Rómulo Gallegos; Universidad Nacional Abierta y la
Universidad Nacional Experimental de los Llanos Ezequiel Zamora (Unellez),
casa de estudios superiores que edita este volumen a través de su
Coordinación de Investigación.
Encontramos además relatos, leyendas y corridos
de la tradición oral cojedeña de Carlos Aranguren, Epifanio Arroyo, Carmen
Sequera, Anni Raquel Pérez Infante, Javier Merchán, Carlos Muñoz y José
Lobatón. En la lectura de estos textos se evidencian registros con
tonalidades terroríficas, humor negro y de evocaciones familiares, ente otras
variables, que los narradores incluidos asocian con los misterios espectrales
de su geografía. La introducción, selección, notas de los autores y
glosario fueron realizadas por Duglas Moreno e Isaías Medina López; el
lienzo que ilustra la portada estuvo a cargo del artista plástico Amílcar
Alejo.
Por
su parte, el Fondo Editorial Teatro de Venezuela, con apoyo del Conac,
promueve sus más recientes títulos. El primero se denomina: Antología de
la dramaturgia cojedeña del siglo XXI (Fondo Editorial Teatro de
Venezuela; San Carlos, 2004; ISBN 980-0776-78-11; 172 p.), en ella se compilan
obras completas de José Daniel Suárez, Isaías Medina López, Juan Suárez
Hermoso, Ramón Hernández y Héctor Alonso Ochoa López. Los textos forman
parte de los archivos del Centro de Investigaciones Sociales para el Teatro
“Hilario Malpica Castrillo”, ente adscrito a la Escuela Regional de Teatro
del Estado Cojedes.
Sobre las peculiaridades estéticas de estos
discursos del género dramático se puede observar la constante referencia a
los mitos del llano. Lo anterior le confiere a cada obra la posibilidad de
brindarle al lector-espectador una mirada introspectiva del mundo cotidiano de
los habitantes de estas tierras; cosmos que no está representado desde una
perspectiva onírica ni es producto de melancólicas evocaciones o de un falso
desarraigo; por el contrario, cada pieza obedece a la comunión del autor con
su propio devenir existencial.
Como dato significativo, es necesario acotar que
en su totalidad las obras se escribieron en el siglo XXI, de allí su título
y valor histórico.
El
segundo título, Antología de la dramaturgia infantil y juvenil, volumen I
(Fondo Editorial Teatro de Venezuela; San Carlos, 2004; ISBN 980-12-0879-1; 88
p.), abarca trabajos de Ulrike Sánchez, Rosmer Carolina Rincón, María
Eugenia González, Sandra Salcedo, Mirayma Carrizales y Gina María Andrades.
Se pueden apreciar un conjunto de piezas artísticas tanto para la
ejecución actoral, como para ser representados mediante la manipulación de
títeres. Todas ellas alternan, junto a su esfuerzo estético, la clara
intención de educar mientras procuran el entretenimiento de la audiencia.
Es interesante destacar, para quienes pretendan
escenificar los guiones, que en esta edición localizarán una serie de
apuntes intercalados con el desarrollo de cada pieza, cuyo diseño tiene la
clara intención de facilitar los complejos procesos técnicos de la puesta en
escena o, en el mejor de los casos, la escritura de nuevas versiones, con el
obvio respeto hacia los derechos de autor.
Para
los investigadores, catedráticos, historiadores, estudiosos y teatreros de
oficio se oferta la Antología de la dramaturgia del teatro
experimental de Venezuela, tomo I (Fondo Editorial Teatro de Venezuela;
San Carlos, 2004; ISBN 980-12-0880-5; 110 p.), comprende las polémicas
propuestas de Miguel Torrence, Ramón Lameda, Alfredo Fuenmayor y Julio
Jáuregui, dramaturgos quienes, según expertos en la materia; escandalizaron
el lenguaje teatral venezolano de los años sesenta y setenta del pasado
siglo. Estas piezas, nunca antes publicadas, sorprenden al lector cuando hace
su esfuerzo por reconstruir los “fragmentos” de las distintas escenas en
las que personajes y acciones se encuentran perdidos en las trampas de la
memoria.
Sin lugar a dudas, Experimento número uno
y Los sueños de Afrodita fueron y siguen siendo posturas escénicas
que retan al espectador, al crítico teatral y a todo aquél involucrado en el
montaje. La compilación de las obras, así como el prólogo-estudio y las
fichas de los autores es una realización de José Daniel Suárez Hermoso.
Así
como el teatro es parte de la ficción-cotidiana de esta llamada
posmodernidad, la poesía también lo es y tiene su espacio en el Fondo
Editorial Teatro de Venezuela con dos colecciones de textos poéticos, en
donde cada poeta deja plasmado un gran número de imágenes que buscan
proyectarse hacia un mundo que espera ser descubierto a través de la lectura
de las siguientes obras: Antología de Evangelisto Hermoso; poética oral
religiosa (Fondo Editorial Teatro de Venezuela; San Carlos, 2004; ISBN
980-7629-38-1; 116 p.), aporta un conjunto de numerosas e interesantes
muestras de la tradición oral no estudiada con anterioridad. Así mismo,
agrupa cantos de velorio y de parrandas navideñas forjados, desde siglos
atrás, en tierras llaneras y en pueblos de Carabobo y Aragua. Los poemas se
trascribieron de los cuadernos poéticos de Hermoso y se ubican entre los
años 1936 y 1951.
El prólogo de la publicación, escrito por el
investigador y profesor universitario Isaías Medina López, constituye un
documento valioso que viene a enriquecer el contexto de la investigación
etnográfica y el de los estudiosos e intérpretes de la poesía oral
venezolana.
Finalmente,
nos encontramos con la Antología poética de nuevo tramo: los
poetas en el teatro (Fondo Editorial Teatro de Venezuela; San Carlos,
2004; ISBN 980-200-030-2; 106 p.), que congrega poemas, publicados e
inéditos, pertenecientes a Mileybi Hernández, Héctor Alonso Ochoa López,
Sarita Medina, Onías Sánchez Barrios, Antonio Miranda, Juan Suárez Hermoso,
Francisco Javier Frías Vilera, Isaías Medina López y José Daniel Suárez,
quienes conforman el grupo literario “Nuevo Tramo”, considerado como el
más antiguo de Venezuela; y que con veinticinco años de actividad artística
ininterrumpida mantienen un trabajo editorial, bibliográfico y hemerográfico
digno de antologizar. Por otro lado, es meritorio resaltar que la mayoría de
sus miembros fusiona de manera armoniosa sus producciones poéticas y
teatrales.
La selección y prólogo de Luis Enrique Frías,
junto con las notas biográficas de los autores, introducen al lector en el
devenir retrospectivo de un cuerpo literario culminado en el año 2004 y que
se remonta hasta los orígenes del grupo: el 7 de agosto de 1979. Los textos
de la muestra se escogieron de los treinta y tres poemarios en los que estos
poetas cojedeños despliegan su labor creativa.
Las referidas antologías, según el criterio de
selección de cada prologuista, evidencian el interés por dar a conocer un
conjunto de producciones escritas que intentan perpetuarse en el tiempo, a
través de un diálogo imperecedero entre el lector y las voces surgidas de
cada palabra, de cada testimonio que emerge como una muestra representativa de
esta, también, posmoderna cultura llanera.