El desarrollo de las herramientas para la creación de sitios
sofisticados ha redundado, en el campo de la difusión de literatura en la red,
en la proliferación de sistemas de autopublicación, sitios en los que
cualquier usuario puede mostrar al mundo sus obras sin necesidad de pasar por
filtros ni tener conocimientos de diseño.
Tal es el caso de La Página de los Cuentos, sitio
creado en 1998 y que actualmente mantiene en línea más de sesenta mil textos,
entre los cuales abunda el cuento pero no es el único género pues, según se
explica en la página inicial, “entendemos que la literatura es un mundo que
no merece trabas ni barreras. Quienes quieran compartir con nosotros además de
cuentos otros géneros literarios como narraciones, ensayos, poesías, haikus,
están cordialmente invitados a hacerlo”.
El sitio es presentado con la definición que Julio
Cortázar hizo alguna vez del cuento: “Un cuento es un relato en el que lo que
interesa es una cierta tensión, una cierta capacidad de atrapar al lector y
llevarlo de una manera que podemos calificar casi de fatal hacia una
desembocadura, hacia un final”.
Los autores son clasificados en dos categorías: los
cuenteros invitados, sección dedicada a los autores consagrados —y en
la que puede leerse material de Benedetti, Borges, Bioy Casares y el mismo
Cortázar— y cuenteros locales, donde se engloba a todos los usuarios
de la comunidad. A su vez, éstos se subclasifican en cronopios y famas:
los primeros son los nuevos usuarios, de menos de sesenta días, y sus textos
son revisados por un moderador antes de ser publicados.
Para participar sólo se requiere proceder a
registrarse —el registro es gratuito—, tras lo cual el usuario dispondrá de
un panel de control para publicar sus textos, modificar su biografía o ejercer
la administración de su cuenta. Otras secciones incluyen un tablón de anuncios
sobre los progresos del sitio, un foro de discusión sobre temas literarios, una
galería fotográfica, una sala de chat y un directorio de enlaces.
Creada por el chileno Giancarlo Girardi, La Página
de los Cuentos tiene bien acendrado el concepto de comunidad literaria. De
hecho, la moderación de todas sus secciones ha sido distribuida entre diversos
miembros, que ofrecen voluntariamente su trabajo y se convierten generalmente en
guías de otros usuarios. Así mismo, los usuarios que ascienden al nivel de famas
tienen, según las normas del sitio, la responsabilidad de ayudar a quienes
vienen llegando.