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Historiador cubano Rafael Rojas
recibe premio Anagrama

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El historiador cubano Rafael Rojas (Santa Clara, 1965), exiliado en México desde 1991, recibió este 28 de marzo el premio Anagrama de ensayo por Tumbas sin sosiego; revolución, disidencia y exilio del intelectual cubano, un vasto estudio sobre la enconada disputa que mantienen desde hace décadas los dos bandos de la intelectualidad isleña, dividida entre la diáspora y los leales al régimen de Fidel Castro.

Como finalista del importante galardón quedó Vidas adosadas; el miedo a los semejantes en la sociedad contemporánea, del doctor en filosofía Pere Saborit (Manlleu, Barcelona, 1961). En esta 34ª edición del premio, dotado con 6.000 euros, Anagrama recibió 71 manuscritos.

Rojas recibió “con alegría y emoción” la buena noticia del premio. Explicó que su ensayo ofrece una historia de la intelectualidad cubana desde mediados del siglo XX hasta la actualidad. “Me propuse reconstruir el mapa literario de autores, publicaciones y debates bibliográficos del legado cultural cubano”, afirmó.

En la obra están presentes tanto los escritores que optaron por el exilio, como los que permanecen en la isla, mantengan o no una actitud crítica ante el régimen castrista. “Buena parte del ensayo recorre el impacto de la Revolución en la vida intelectual cubana. Hasta entonces, convivían en la isla tres discursos: el liberal, el católico y el comunista. La política cultural de Castro acabó con esta convivencia, porque se propuso comenzar de cero”, dijo.

Las semblanzas de los escritores Manuel Moreno Fraginals, Cintio Vitier, Roberto Fernández Retamar, Heberto Padilla, Jesús Díaz, Guillermo Cabrera Infante y Raúl Rivero le sirven al ensayista para reconstruir un relato bibliográfico roto por la disputa histórica entre exiliados y revolucionarios.

“Es un enfrentamiento que sigue en pie, aunque se ha trasladado a la esfera simbólica. Tras la muerte de los grandes creadores, como Cabrera Infante, Carpentier o Lezama, se vive una sensación de cementerio, un concepto que tomo de Elías Canetti. Es muy necesaria la reconstrucción a partir de la memoria”, explicó Rojas.

Por su parte, Saborit apuntó que en su ensayo analiza el trauma creado en la sociedad contemporánea por el fin de “las verdades con mayúsculas”, entre las que citó a Dios y la Historia. “Su déscredito provoca inquietud”, añadió.

Fuente: El País