Letras
Voz que anochece —alusiones—

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Primera parte
¿anochece en toda vida humana; o sólo en mí anochece?

1

piedad hostil estrella entre serpientes
¿vas a responderme con mis mismas preguntas?

 

2

como si nada de esto supieses socorrida
Gioconda

 

3

liberabas allá para enjaular acá
mutilabas esto para sanar aquello
renacías mañana para morir ayer

 

4

desequilibradotas
proverbiales las fantasías de la equilibrista

 

5

entonces nada nos enlaza
a duelos o a dichas de nuestras palabras —inscriptas en la jerga de la voz que
anochece— si es que decimos por nada si es que juramos por la que no dice nada

 

6

cerrada en la ficción de su propia fragancia: noche de los manzanos
no obstante
inaudible
la melodía desliza su flamante piel entre las inminencias de los frutos

 

7

la inminencia
las inminencias que miden la historia de la depredación
la aventura siniestra
la vida de rodillas ante la vida y la muerte
de la que devenimos a contratiempo

 

8

ojo frío punto ciego martillazo reflex
qué ha de decirse o dejar de decirse cuando se es el estúpido que soltó a los
pájaros

 

Segunda parte
(vajra-varahi)

1

la puta prescripta (hace un rato al cruzarte en la esquina te mostró los dientes)
insidiosamente estimulada puesta al tanto se desviste de todo menos de su
mirada santa perdida
baja ondulando a deslizarse sobre tus rodillas

 

2

vos boca de oro sibila fumás y tosés y articulás para mí leche para mí miel la
cantata podrida del mar de fondo —el hombre que te escucha que apenas si te
mira si te miró si te vio nunca

 

3

ni en el sol ni en la sombra
la cuerda de tus palabras se aprieta en mi garganta en mis palabras tus palabras
de loca tus primeras palabras que serán las últimas

 

4

tristemente siente el peso de su poder sobre ella
como ante la sumisión de un perro
es un instante que no va a tener fin pero es un instante

 

5

tu instante en la cordura cuánto costó cuanto llegó a valer —una sonrisa célebre
ahora en la hora de la penumbra
ni cómo ni por qué el ocaso de tu sonrisa se vierte en otros sueños
otros ocasos
puros

 

6

otros vinos tan dulces tan envenenables

 

7

la piel ya no me necesitaba no me reconocía no me rescataba pero sí en sueños
profundos precarios la sonrisa

 

8

enjoyada
amiga
la intención abstrusa de la noche configura diamantes
perfumada
huele a diamantes
enmascarada
comienza a lubricarse a la temperatura de los diamantes.

 

9

vine a desayunar con vos yoguini era todo lo que una lealtad le debía a la otra
en esta vieja vida.

 

Tercera parte

porque no es posible olvidar cómo —anoche—
me miraste cuando me mostrabas el corazón pudoroso de
tu manzana
Patricia Damiano

1

Diste con el sueño del soñador que sueña el trueno apagado del tren que está
llegando a Coghlan.

 

2

Cifras no desveladas vidas
—de las que te fuiste por esa puerta—

 

3

Se queda unos momentos a
respirar
aquí desde que viene
al mundo

 

4

¿Qué puede importarles la llovizna tibia de junio que ahora humedece sus
cigarrillos?

 

5

Ahora llegué
te llevo
desde siempre
—llena de diamantes
desde
este hoy que había

 

6

la mujercita se prendó
del juez
el juez también la amó
la juzgaba la amaba

 

7

El rostro opaco de mis antepasados en el espejo —si me diste su rostro
dame la paz también la paz amarillenta de aquellas fotos

 

8

no mariposa
de divertido vuelo sino la salamandra
la dura salamandra recién hoy supiste
que eras que habías sido

 

9

Era puerto seguro
recién
el brillo de unos ojos

 

10

Respira por los dos
—dato
de un aire oscuro o agua de ahogos
habla
no dice nada

 

11

Viene con la sal del mar
viene en la noche de la sal
de la tierra
—sal del mar y sal de la tierra
si ella se desalase la salarías
serías el quien

 

12

Sueños ligeros pasos
respiratorios
una
casa en la música en la luz espesa
entonces
iba a decirlo
devadasi: entonces
—y el puñal en la mente y el áspid
entre las recobradas flores de la sonrisa—

 

13

tendrías que escucharlo
tendrías que estar escuchándolo hay
que decirlo —horriblemente— así
aún y para siempre
en libertad en ese ruido que
dijimos no dice

 

14

(nos salve nos deshaga
la ríspida
sirena en su hit
impecable)

 

15

quién te habría arrimado a la
luz
de estos ojos pobre luz turbia
lámpara
aunque si es
que habrá un sol
para los obstinados
para los borrachos
de obstinación...

 

16

si llegás ahora mismo te leo unos textos los textos decían otra vez lo que dijo la
que no dice nada