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Instituto Cervantes dotó biblioteca en Shanghai

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La directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel, entregó el pasado miércoles 14 de noviembre, en Shanghái (China) y ante los Príncipes de Asturias, la primera dotación de fondos —con un total de 4.000 libros— a la nueva Biblioteca Miguel de Cervantes en esa ciudad. El importe de este legado supera los 80.000 euros, abonados íntegramente por el Instituto Cervantes.

Don Felipe y doña Letizia han presidido el acto de apertura de la biblioteca, adscrita al Consulado de España (Sección Cultural) en la mayor ciudad china, con 13 millones de habitantes y considerada la capital económica del país. La biblioteca, de 125 metros cuadrados, dispone además de equipamiento informático cedido también por el Instituto Cervantes.

El Príncipe de Asturias afirmó que esta inauguración evidencia “la relación de amistad y cooperación cada vez más profunda que liga a nuestros dos países” y que la biblioteca Miguel de Cervantes “propicia el mayor acercamiento entre dos pueblos tradicionalmente muy alejados el uno del otro”. Igualmente ha agradecido a las autoridades chinas “su interés y respaldo para que la lengua y cultura españolas puedan difundirse, como medio para fomentar la cercanía entre nuestros pueblos”.

En opinión de la directora del Cervantes, la nueva biblioteca será un lugar para el diálogo de culturas, para la comprensión y para el intercambio de valores culturales y cívicos. Caffarel considera que los pueblos español y chino, pese a estar separados por miles de kilómetros, sienten simpatía recíproca y un interés de primer orden por sus historias y tradiciones.

Los fondos aportados por el Instituto a la biblioteca Miguel de Cervantes contienen una amplia selección de narrativa contemporánea en castellano, así como en las tres lenguas cooficiales en España, y numerosos libros de lengua y literatura española e hispanoamericana. El legado fundacional contiene, asimismo, ediciones críticas de los grandes clásicos en español y volúmenes de poesía de autores españoles e hispanoamericanos vinculados a la literatura oriental, como Octavio Paz.

También cuenta con un apartado de literatura femenina que abarca desde la Edad Media hasta nuestros días; diccionarios, enciclopedias y guías de viajes, así como numerosos DVD de cine en español y CD de música en todos sus géneros: clásica, flamenco, cantautores, jazz y pop.

Además de la colección bibliográfica, el Cervantes ha adquirido para Shanghái una serie de grabados originales de artistas como Antonio Saura, Rafael Canogar, Juan Genovés o Lucio Muñoz.

La biblioteca está ubicada en el barrio de la “Concesión Francesa”, antiguo enclave colonial de la ciudad, en el que conviven edificios de carácter europeo y otros típicamente orientales. Es el barrio de la cultura por excelencia, donde se encuentra, por ejemplo, la Casa de los Artistas, el Instituto de Artes Dramáticas y numerosas galerías, cines y cafés.

Antes del acto, Caffarel se reunió con destacados hispanistas chinos, con los que se ha analizado la situación del español en la ciudad y cómo reforzar la colaboración entre el Cervantes y las 14 universidades que hay en Shanghái, entre las que destaca la Universidad de Estudios Internacionales, con la cual el Instituto Cervantes ha firmado un acuerdo de colaboración para crear un centro que impulse el estudio del español.

En la zona de Shanghái y Nanking se detecta un rápido aumento de la oferta de cursos: al menos cuatro universidades privadas e institutos han abierto la especialidad de español en los últimos años. El español se enseña actualmente en China como licenciatura en 40 centros universitarios públicos y privados, frente a las 11 universidades en las que se enseñaba hace apenas cinco años.

La demanda de español crece año tras año y actualmente, por cada estudiante universitario matriculado en la asignatura de español hay otros 60 aspirantes que desean inscribirse y que se quedan sin hacerlo, debido principalmente a la falta de profesores.

Fuente: Instituto Cervantes