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Murió el intelectual español Fernando Borlán Rodríguez
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Fernando Borlán Rodríguez, poeta, escritor, catedrático jubilado de literatura, ex profesor del IES Brianda de Mendoza y, ante todo, un librepensador de profundo espíritu crítico y hombre de reflexión, falleció en Guadalajara (España) este domingo 20 de enero, según informaron fuentes allegadas al autor.

Borlán padecía una grave enfermedad que en los últimos años había ido deteriorando su salud. Recientemente fue objeto de un multitudinario homenaje en el Brianda de Mendoza, y su discípulo y más estrecho colaborador, Carlos Alba, junto a la familia, editó un volumen con sus obras completas.

Alcarreño de adopción, Borlán Rodríguez nació en Galleguillos de Campos (León) el 18 de agosto de 1932. De joven ingresó en un seminario, y llegó a consagrarse al servicio de la Iglesia, pero en los años 50 rompió con lo religioso y orientó su pensamiento hacia una profunda carga política de izquierdas, oscilante por momentos entre la socialdemocracia y los postulados libertarios. Durante la transición militó en el extinto PSP de Tierno Galván.

Durante el curso 1952-1953 trabaja en el reformatorio vallisoletano “Arzobispo Gandásegui”. Al año siguiente se translada a trabajar al colegio El Salvador. En ese curso funda con Julio Jiménez, en el colegio mayor de la Santa Cruz, un Aula de Oratoria, a la cual asistió el poeta Francisco Pino. Colaboraba también con la emisora de radio EAJ47, de Valladolid, enviando poemas al programa Versos al viento.

En enero de 1954 debe cumplir el servicio militar, por lo que es trasladado a Colmenar Viejo. Al acabar el campamento le destinan al Cuartel del Conde Duque para dar clase a los cabos. Licenciado del servicio militar comienza a trabajar en el diario El Alcázar y pocos meses después colabora con Diez Minutos. A la vez prepara las oposiciones a agente judicial, las cuales aprueba y es destinado a Luarca.

El 25 de agosto de 1961 se casa con Lydia Pazos e inicia estudios de filosofía y letras en la Universidad de Oviedo. En 1966 se traslada con su familia a Ferrol, donde sigue trabajando como agente judicial e imparte clases en el colegio Montefaro. Trabaja como profesor de francés en el Instituto Concepción Arenal y establece lazos con el grupo de teatro de ex alumnos denominado Teatro Estudio, al que pertenecen figuras clave en desarrollo del teatro gallego como Eduardo Alonso y Luma Fernández.

En 1972 crea el cine club Hexágono en el Instituto Esteban Manuel Villegas de Nájera, en La Rioja. Poco antes de la muerte de Franco, se traslada a San Lorenzo de El Escorial, donde es destinado como secretario al Instituto Juan de Herrera. En estos meses publica su primer poemario, Por la noche y en medio de la calle, y se dedica a recorrer las emisoras de Madrid recitando sus poemas. Es así como contacta con Rafael Montesinos, Octavio Uña, Manuel Hidalgo, Claudio Rodríguez, Rafael Morales o Luis Rosales.

En 1978 se incorpora al Instituto Eijo y Garay en Madrid, donde conoce a Ángela Bautista y Rosalía Vallejo, con quienes funda la revista La cuadratura del círculo. En 1980 se muda a Las Rozas, donde tiene como alumno a Benjamín Prado, y en donde frecuenta el Rincón del Arte y la Asociación Prometeo de Poesía.

Tras su llegada en 1982 a Guadalajara, donde se establecerá de forma definitiva hasta su jubilación, se afilia al grupo literario Enjambre y junto con Alfredo Villaverde realiza una selección de poesía castellana editada bajo el título Y nació la trova en Castilla. En 1985 publica su segundo poemario, Cántico carnal. Funda con Mariluz Adama y Francisco Núñez el grupo GENS, que mezcla poesía, imagen y sonido, e impulsa la creación de una radio en el instituto en el que trabaja.

En 1990 crea con Alfredo Villaverde y Francisco Núñez la colección “El Semáforo Verde”, en donde publica su siguiente poemario Taberna de humo y sueño. “La taberna” será también el título de la columna de opinión con la que colaborará en el periódico local El Decano.

Regresa a la actividad teatral en 1992, al coincidir en su instituto con María Pedroviejo y Carlos Alba. Al año siguiente en Sahagún presenta Clásicos por la calle, un espectáculo lírico, y escribe su tercer poemario, Zálata. En 1996, en la revista literaria Barataria, surge su último poemario, Derrota de los ídolos.

En 1998 escribe su primera novela, El arcón de la Argamasilla. El año pasado, Carlos Alba impulsa la publicación de una edición de toda su poesía, bajo el título Poesías completas.

Fuentes: El DecanoWikipedia