~~~~~~~~~~~~~~~ Año VIII Cagua, Venezuela Nº 122 ~~~~~~~~~~~ ======================================= ~~~~~~~~~~~ LETRALIA, Tierra de Letras ~~~~~~~~~~~ http://www.letralia.com ~~~~~~~~~~~ ======================================= ~~~~~~~~~~~ 28 de marzo de 2005 ~~~~~~~~~~~ ~~~~~~~~~~~ LETRALIA, Tierra de Letras, es ~~~~~~~~~~~ la revista de los escritores ~~~~~~~~~~~ hispanoamericanos en Internet. ~~~~~~~~~~~ Usted puede enviarnos sus ~~~~~~~~~~~ comentarios, críticas o material ~~~~~~~~~~~ literario a info@letralia.com ~~~~~~~~~~~ ~ * ~~~~~~~~~~~ ~~~ JORGE GOMEZ JIMENEZ - Editor ~~~~~~~~~~~ ~~~~~ Depósito Legal: pp199602AR26 ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ === Sumario =============================================================== | "De los 'vienes' y los males de una sociedad", Jorge | Editorial Gómez Jiménez. | | Red artística. / Viejo premiado. / Voces del Perú. / | Breves Venezolana en ejecución. / Tres décadas de talleres. / | Sudacas al borde. / Poesía en Comodoro. / Dos poemarios. | / Tango en Caracas. / Creación literaria. / Poesía | visual. / Veinte años de Peña. / 24 horas de poesía. | | Publican en Francia la novela más exitosa de Isaac | Noticias Goldemberg. / Denuncian irregularidad en otro premio del | grupo Planeta. / Editorial española publica novela de | Alfredo Armas Alfonso. / Fernando Báez ahora cuenta cómo | destruyeron Irak. / Andrés González Castro gana el | premio Miguel Hernández. / Adolfo Castañón ingresó a la | Academia Mexicana de la Lengua. / Juan Gelman obtiene el | premio Pablo Neruda. / Juan Villoro visita Mérida y | Caracas. / Verne le gana a Rulfo y a Cervantes. / | Francisco Ayala celebra su 99º cumpleaños publicando | nuevo libro. / Monte Ávila presentó la Biblioteca Básica | de Autores Venezolanos. / Murió el arqueólogo boliviano | Carlos Ponce Sanginés. / Borges sufría complejo de | Edipo. / Un "hidalgo" pasea a transeúntes de Barcelona | por caminos del Quijote. / Publican primera antología | poética completa de José Emilio Pacheco. / Premio Joan | Crexells recupera la dotación económica. / Organizadores | del premio Loewe no quieren polémicas este año. / José | Antonio Millán publica Perdón imposible, libro sobre | puntuación. / Sergio Ramírez presenta una novela e | inaugura un encuentro. / Falleció la pintora venezolana | Mercedes Pardo. / Seminario en Lima analiza la narrativa | de Borges. / Julio Verne protagoniza nueva película | venezolana. / Promotores y gestores culturales se | reunirán en Guadalajara. / Un congreso recordará la | figura de Juan Valera. / Festival de Bogotá dedicará | homenaje a Harold Alvarado Tenorio. / Hemingway recibirá | visitas en museo de La Habana. / Publican novela inédita | e inconclusa de Alejandro Dumas. | | Proyecto Patrimonio: escritores y poetas en español | Literatura http://www.letras.s5.com | en Internet | "Alberto Arvelo Torrealba o Cómo literaturizar el | Artículos y llano", Carlos Yusti. / "No me pueden quitar el | reportajes pensamiento", Víctor Corcoba Herrero. / "Marisela Norte: | la poeta voyeur del MTA que recorre el mundo. Desde el | este de Los Angeles a todas partes, sin vehículo y sin | computador", María Eugenia Sáez. / "Un cumpleaños como | ninguno", Miriam Ventura. / "Ciudades y la Cátedra | Rectoral Alexis de Tocqueville", Domingo Alfonso Bacalao | (hijo). / "Héctor Torres, editor de Ficcionbreve.org: Un | sitio sin calidad es un hermoso cascarón vacío", | entrevista por Jorge Gómez Jiménez. | | "Reflexiones desde la crónica. El caso específico de | Sala de ensayo Prosa Sadia como camino de reflexión identitaria", | Marcela Caetano Popoff. / "Deutsches Requiem o Borges y | su pasión por el Laberinto", Osiris Vallejo. / "La | traición iniciática de Silvio Astier", Mario Amengual. | | "Bizitzamendi", Rafael Pérez Ortolá. / "El beso", | Letras Verónica Delgadillo Vargas. / Tres poemas de Rubén de | Leo. / "Al cerrar los ojos", Alexánder La Rosa. / Cuatro | poemas de Paula Winkler. / Seis relatos de Emanuel S. H. | Marín. / "La muerte es muy útil", Isusko Larrinaga. / | "Los Miró", Gricel Ávila Ortega. / Tres poemas de Oscar | Portela. / "Noticias de la niebla" (extractos), Triunfo | Arciniegas. / Poemas de Lina Zerón. / "Si, sí, sí", | Abelardo Barceló Amorós. / "Poesía repartida" | (extractos), René Dayre Abella. / "Las cenizas del | recuerdo", Camilo Pequeño Silva. / "El poeta en el | hotel", Juan Ensuncho Bárcena. / Tres cuentos de Noelia | Rodríguez. / | | Buscando a Nelson Álvarez Licona. | El buzón | Francisco Ayala. | Post Scriptum | =========================================================================== Premio Unicornio 1997 como Evento Cultural del Año http://www.geocities.com/SoHo/8753 =========================================================================== Premio "La Página del Mes" de Internet de México el 3 de mayo de 1998 http://www.internet.com.mx =========================================================================== Premio "Web Destacada del Mes" de MegaSitio en diciembre de 1998 http://www.megasitio.com =========================================================================== Premio Katiuska de El Mundo Diferente de Katiuska, en enero de 1999 http://www.redchilena.cl =========================================================================== Premio Key Site Award, de Fortress Design, en mayo de 1999 http://www.fortressdesign.com =========================================================================== Premio a la Excelencia, de Exodus Ltd., en mayo de 1999 http://www.exodusltd.com =========================================================================== Premio Mejor Página de Poesía, de La Blinda Rosada, en julio de 1999 http://blindarosada.org.ar =========================================================================== Segundo lugar en los premios Lo Mejor de Punto Com, diciembre de 2004 http://www.lomejorde.com =========================================================================== Para suscribirse a Letralia, envíe un mensaje vacío a: letralia-subscribe@gruposyahoo.com Para desuscribirse, envíe un mensaje vacío a: letralia-unsubscribe@gruposyahoo.com También puede formalizar su suscripción o su desuscripción en un formulario visible en nuestro sitio en el Web: http://www.letralia.com/servicios/listas.htm Ediciones anteriores: http://www.letralia.com/servicios/archivo.htm =========================== CONCURSOS LITERARIOS ========================== Reciba anuncios de concursos literarios y artísticos en general suscribiéndose a nuestro exclusivo servicio gratuito. Todo lo que tiene que hacer es enviar un mensaje vacío a: letralia-concursos-subscribe@gruposyahoo.com O, si lo prefiere, visite nuestra sección de concursos en el Web: http://www.letralia.com/agenda/concursos === Editorial De los "vienes" y los males de una sociedad ============ Aunque fue introducido en agosto pasado, el anteproyecto de Ley del Derecho del Autor y la Autora y Derechos Conexos recién ahora levanta polémicas, pues fue apenas hace unos días que se aprobó en primera discusión en la Asamblea Nacional de Venezuela. Y las críticas inciden, ciertamente, sobre aspectos más importantes que la simple acotación de que, en su exposición de motivos, el anteproyecto reza textualmente: "La sociedad tiene derecho a disfrutar los 'vienes' culturales que se producen en su seno". Los dos puntos que más han preocupado a los entes involucrados son harto conocidos, pero conviene -para el registro- volver aquí sobre ellos. El primero es la creación de una Comisión Nacional de Derechos del Autor y la Autora que regulará todo lo concerniente al tema. Aunque al principio se establece que "El autor o la autora de una obra del ingenio tiene, por el solo hecho de su creación, los derechos de orden moral y patrimonial determinados en esta Ley sobre dicha obra" (artículo 6), y que "Se considera creada la obra, independientemente de su divulgación o publicación, por el solo hecho de plasmar en soporte material el pensamiento del autor o la autora, aunque la obra sea inconclusa" (artículo 7), artículos subsiguientes hacen hincapié en que la efectividad de tales derechos depende del registro de la obra por ante esa comisión. Lo explica claramente el artículo 9: "Dicho registro es indispensable para su validez". Esto no hace otra cosa que añadir un toque de burocracia al tema del derecho de autor. Si bien actualmente se considera, como se explica en el artículo 6, que un autor tiene derechos sobre su obra desde el mismo momento en que la crea, el carácter de indispensable que se le da al registro representará un problema para no pocos creadores. En las condiciones actuales, registrar una obra cuesta más de 200.000 bolívares, como puede verse en http://www.sapi.gov.ve/web/index.php?option= com_content&task=view&id=15&Itemid=56. No es un requisito indispensable en lo que respecta a la literatura, si atendemos a lo que difunde el Centro Nacional del Libro como requisitos para tramitar un ISBN en http://www.cenal.gov.ve/modules.php?name=Content&pa=showpage&pid=66. De volverse indispensable, aunque aún no se ha establecido el monto del trámite, agregará costos en tiempo y dinero para quien produzca una obra y desee garantizar sus derechos sobre la misma. Los críticos del anteproyecto han manifestado su preocupación, además, sobre la mencionada comisión, pues no se deja clara la relación de condicionamientos que la presencia de funcionarios gubernamentales podría crear en él. Por ejemplo: recientemente fue aprobado un conjunto de reformas al Código Penal venezolano en el que se establece que una ofensa al presidente de la República podría causarle la prisión al que la profiera, pero se deja un amplio margen de discrecionalidad a lo que puede considerarse una ofensa. Si en el proceso de registro de una obra, un burócrata especialmente sensible detecta una supuesta ofensa al presidente, ¿se procederá al registro o se enviará al creador directamente a la cárcel? En otro pasaje del anteproyecto, el Estado se reserva la potestad de adquirir una obra cuando considera que ésta podría ser del beneficio colectivo. "El Estado venezolano, por medio de las autoridades correspondientes, podrá adquirir, previo pago de indemnización al autor, aquellas obras que, por su carácter, deban destinarse al beneficio colectivo, tanto las destinadas a información acerca de salud pública, como textos escolares, ilustraciones, mapas, obras artísticas y musicales, para facilitar el acceso a las mismas, a toda la población. Una vez adquiridas estas obras, la divulgación, por cualquier medio, de las mismas, estará sujeta a la supervisión del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. Para garantizar la gratuidad de la enseñanza garantizada en el Artículo 102 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, se prohíbe la venta de dichas obras" (artículo 5). Con toda razón este artículo ha sido el blanco de la mayoría de las suspicacias, pues permitiría a un gobernante limitar el acceso a una obra por el simple procedimiento de declararla "de beneficio colectivo". Y, aunque en el párrafo siguiente se especifica que el mencionado ministerio "deberá defender los derechos morales de las obras a que se refiere este artículo, sin perjuicio del derecho moral irrenunciable que tiene todo autor o autora sobre su obra", es lógico pensar que, una vez adquirida una obra -y, por tanto, apartada de su libre difusión-, el Estado venezolano podría retrasar indefinidamente su divulgación y siempre, siempre habrá la excusa del insuficiente presupuesto, excusa que tanto conocemos en Venezuela. La Cámara Venezolana del Libro (Cavelibro, http://www.cavelibro.org) ha agregado otro aspecto preocupante. Entrevistada por Ana María Hernández para el diario El Universal, la escritora Blanca Strepponi -vicepresidenta de Cavelibro- explica que el anteproyecto contiene una violación de los tratados internacionales en cuanto a la exigencia de reciprocidad. Se refiere Strepponi a que, en el primer artículo, se habla de la protección a "las obras de autores extranjeros que sean realizadas, publicadas y registradas en el territorio de la República y las obras realizadas en territorio extranjero siempre y cuando haya reciprocidad". Añade la escritora que "gracias al principio del trato nacional y de protección automática -es decir, lo que hasta el momento funciona-, un autor, un artista, intérprete o ejecutante venezolano hoy en día está protegido automáticamente, es decir, sin formalidad alguna, en los 158 países signatarios de (el convenio de) Berna", y en 312 países de otros convenios similares, "de la misma forma en que cada uno de estos países protege a sus autores nacionales. Volver al principio de la reciprocidad que operaba en el siglo XIX con el sistema de tratados bilaterales, como lo plantea el anteproyecto, significa un retroceso y una dificultad operativa en el cada vez más dinámico mercado de obras y productos intelectuales". Al margen: justo es decir que la copia que puede obtenerse en el sitio de la Asamblea Nacional (http://www.asambleanacional.gov.ve/ns2/leyes.asp?id=640) corrige el error al que hacemos referencia en el título y el primer párrafo de esta nota. Sin embargo, la copia que fue enviada a los entes relacionados -Sacven, Sapi y otros- mantiene invariablemente el error, cuya presencia es en realidad insignificante cuando se analizan los males a los que sus aspectos de fondo podrían conducirnos como sociedad, y sobre los cuales consideramos urgente desarrollar un profundo debate desde el sector en el que incide más directamente este anteproyecto: el de los creadores. Jorge Gómez Jiménez, editor http://www.letralia.com/jgomez === ¿Le interesa estar informado sobre concursos? ========================= Reciba por correo electrónico los anuncios vigentes de concursos literarios y artísticos en general suscribiéndose a nuestra lista de distribución. Todo lo qu tiene que hacer es enviar un mensaje vacío a letralia-concursos-subscribe@gruposyahoo.com, o visitar nuestra cartelera de concursos en http://www.letralia.com/agenda/concursos Si desea enviarnos las bases de un concurso, escríbanos a info@letralia.com ||||||||||||||||||||||||||||||| BREVES |||||||||||||||||||||||||||||| Red artística. El Ministro de Estado de Venezuela para la Cultura adelanta la creación de una red de tiendas para la comercialización nacional e internacional de objetos y obras de arte venezolanos. Actualmente se realiza el registro de los artistas que aspiren a participar, y la evaluación y selección de los objetos y las obras en función de su calidad artística, valor simbólico, creativo y cultural. Los interesados pueden comunicarse con Yamila Grioni, en la Coordinación de Arte, a los teléfonos 0212 4811604 (ext. 606, 607, 608 y 329, Sala Estratégica) y 0412 9938657. arteartesania@yahoo.com Viejo premiado. El poeta uruguayo-canadiense Virgilio Pellegrini Alaggia (Montevideo, 1943) ha sido declarado ganador del I Concurso Internacional de Poesía "Paseo en Verso", organizado por el Grupo Editorial Pasos en la Azotea, por su poema "El viejo". Pellegrini es ciudadano canadiense desde 1976. El premio de los lectores, otorgado por votación a través de la página del grupo, recayó sobre el poeta nicaragüense Julio Francisco Cáliz Avellán por "Herencia". En su primera edición, este concurso recibió 1.423 poemas de autores de 37 países, entre los que destacaron Argentina, España, México, Colombia, Chile, EUA, Perú y Cuba. http://www.pasosenlaazotea.com Voces del Perú. La revista bilingüe Literal, Voces Latinoamericanas, ha dedicado su segundo número a escritores y artistas del Perú radicados en diversas partes del mundo y está ilustrado con imágenes de la nación suramericana. En la sección de literatura figuran poemas de Isaac Goldemberg y Miguel Ángel Zapata, así como entrevistas con los poetas y ensayos acerca de su poesía. Además aparece un artículo dedicado a Jorge Eduardo Eielson. En la sección de arte se incluyen fotografías de Fernando Castro y un ensayo de su autoría. Asimismo, esta edición contiene colaboraciones de Carmen Boullosa, C. M. Mayo, David Medina Portillo, Debra Andrist, Miguel Ildefonso, Griselle Paz Davis, Claudia Posadas, Benito Pastoriza Iyodo, Guadalupe Gómez del Campo y una entrevista con Nicolás Kanellos, director de Arte Público Press. http://www.literalmagazine.com Venezolana en ejecución. La joven compositora venezolana Yoly Rojas Ramírez (Caracas, 1978) ha pasado a la segunda fase de la Segunda Convocatoria de Composición de Matiz Rangel Editores, dedicada a música para piano solo, soprano y piano, y/o soprano sola por compositores latinoamericanos, por su obra Apok Paru para piano. En esta segunda fase, Rojas hará la ejecución pública de la pieza en un evento que será documentado en formato audiovisual para formar parte del archivo de la editora. Rojas Ramírez comparte honores con los colombianos Ricardo Gallo, Johann Hasler y Fabián Quiroga, el cubano-estadounidense Orlando Jacinto García, el mexicano Aurés Kabir Moussong García y el chileno-australiano Andrián Pertout. http://www.societyofcomposers.org/user/juanpablocarreno.html Tres décadas de talleres. Los reputados talleres literarios del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos, en Caracas, están cumpliendo este año tres décadas de trabajo constante. Por ello, este miércoles 30 a las 7 de la noche se inaugurará en el Hall de la institución, en Altamira, la exposición homenaje a los maestros y autores que han pasado por estos talleres. En el acto, que contará con el escritor Luis Alberto Crespo como orador de orden, se presentarán los libros Voces nuevas -que recogen textos de quienes han tomado los talleres- correspondientes a los períodos 2000-01, 2001-02 y 2003-04. http://www.celarg.org.ve Sudacas al borde. La editorial y galería Eloísa Cartonera, de Buenos Aires, presentará este jueves 31, a las 8:30 de la noche, los seis libros ganadores de su I Concurso Narrativa Sudaca Border. Los autores galardonados son Gonzalo Alfonsín, Leandro Avalos Blacha, Dante Castiglione, Marcelo Guerrieri, Toya Jackson y Pedro Nalda Querol, la mayoría de ellos inéditos. En el certamen participaron en total unas 150 obras enviadas desde todas partes de América, que fueron revisadas por un jurado integrado por Ricardo Piglia, Pablo Schanton, Damián Ríos, Fabián Casas, Alejandro Lingenti, Julián González y Sunilda Villasanti Cañete. Centro Cultural Fray Mocho Presidente J. Perón 3644, Buenos Aires (Argentina) Poesía en Comodoro. Entre el 1 y el 3 de abril se realizará en Comodoro Rivadavia, Chubut (Argentina) el I Encuentro Nacional de Jóvenes Poetas en la Patagonia. Habrá charlas, rondas de lectura, presentación de libros y debates, además de la participación especial de Diana Bellessi, Jorge Boccanera y Karina Maccio. La organización se hará cargo del alojamiento y la comida, con cupos limitados, para los participantes menores de 35 años, y la cuota de inscripción es de (al menos) un libro de poesía. Los libros que se colecten serán donados a la Biblioteca Municipal. soledavies@speedy.com Dos poemarios. Este viernes 1 de abril a las 6 de la tarde serán presentados en la Librería Lectorum, de Nueva York, los poemarios Mujer u hombre u hombre o mujer, de Clemente Soto Vélez, y Hungry Dust / Polvo hambriento, de Graciany Miranda Archilla, ambos puertorriqueños. La presentación estará a cargo de la profesora Virginia Santos, del Hunter College, y del poeta y crítico David Cortés. Participará además el escritor Jack Agüero y otros poetas. La publicación de estos libros conmemora el centenario de Soto Vélez y el 75º aniversario del atalayismo. Librería Lectorum; 137 Oeste de la Calle 14, entre 6ª y 7ª avenidas Telf.: 212 7410220 Tango en Caracas. Entre el 2 y el 30 de abril la agrupación Tango Caracas, caracterizada por integrar la danza, el teatro y el ballet en sus propuestas, ofrecerá clases de tango impartidas por los bailarines Frank Zambrano y Yore Rivas en la Sala A, piso 6, de la Casa de Rómulo Gallegos, en Altamira, Caracas (Venezuela). Las sesiones serán los sábados de 2 a 3:30 de la tarde. El taller tiene cuatro niveles, cada uno de los cuales tiene un costo de Bs. 70.000 por persona. http://www.celarg.org.ve Creación literaria. El Centro de Estudios Literarios Antonio Cornejo Polar dictará un taller de creación literaria que, en ocho sesiones, se iniciará este martes 5 de abril en horario de 7 a 9 de la noche, y estará a cargo de Carmen Ollé. Se admitirá hasta 20 alumnos por curso. El taller pretende promover una lectura reflexivo-crítica de los textos literarios, motivar habilidades creativas y proporcionar destrezas técnicas en el trabajo literario. Los precios varían entre 120 y 180 nuevos soles. celacp@wayna.rcp.net.pe Poesía visual. Entre el 11 y el 17 de abril se realizará en Fraga, Huesca (España), una muestra de poesía visual como parte de las celebraciones del Día Internacional de la Poesía. Los interesados deberán enviar sus creaciones antes del 7 de abril, en formato .JPG o .AVI, a ilhara@wanadoo.es o, si su tamaño sobrepasa 1 Mb, al apartado de correos 1553 de Zaragoza. En ambos casos deberán enviarse acompañadas del lema "Convocatoria Poesía Visual" y una ficha con el nombre del autor, ciudad y país de origen, título y técnica empleada, dirección postal, correo electrónico y, de tenerla, página web. La muestra participará posteriormente en Arteria (Feria de Arte Contemporáneo de Monzón). Se entregará un certificado de participación y las obras serán expuestas en el sitio de Ángela Ibáñez, organizadora del certamen. Posteriormente se realizará un catálogo en CD. http://www.10lineas.com/angelaibanez Veinte años de Peña. Organizada por la Sociedad Internacional de Escritores y la Galería Rio II, el viernes 22 de abril a las 7 de la noche se realizará la puesta en circulación de las Obras Poéticas (1984-2004) del poeta y escritor dominicano José Alejandro Peña. El libro será presentado por el poeta y escritor Eduardo Lantigua. Es preciso reservar cupo en el sitio del autor. http://www.josealejandropena.com/invitacion.htm 24 horas de poesía. Entre el 23 y el 24 de abril se realizará en Terrazas de Quebrada Seca, en la población de El Consejo, Aragua (Venezuela), el evento "Decir poesía, Say poesy, Dire poésie", un maratón cultural de 24 horas para expresar el significado de poesía a través de todas las manifestaciones artísticas. Habrá talleres libres en literatura, dibujo, títeres, pintura, cerámica, danzas y otras disciplinas, además de presentaciones artísticas, exposiciones y una muestra de comidas tradicionales. Los interesados pueden asistir con carpas para pernoctar en el ambiente natural que se ha dispuesto para la actividad. Se agradece contribuir (al menos) con el aporte sugerido de Bs. 1.000 por persona para la construcción del Espacio Cultural "Los Joroperos". Además se realizará una muestra internacional de cartas postales con el significado de poesía que puede combinar diversas disciplinas artísticas. Telfs.: 58 244 3321260, 3320917, 58 414 4924734 y 58 416 3465767. ¿Quiere publicar una nota en este espacio? Envíenosla por correo electrónico a breves@letralia.com. |||||||||||||||||||||||||||||| NOTICIAS ||||||||||||||||||||||||||||| *** Publican en Francia la novela más exitosa de Isaac Goldemberg Hace más de veinte años, Isaac Goldemberg publicó en Estados Unidos la novela La vida a plazos de don Jacobo Lerner. En 2001, Alfaguara publicó El nombre del padre, una recreación de aquella novela, y cuya traducción al francés acaba de ser publicada por Editions du Rocher como La Vie à crédit de don Jacobo Lerner. La novela es la más exitosa de Goldemberg y aparece esta vez como parte de la serie "Anatolia" de la casa editorial francesa, en la que figuran varios premios Nobel como Nobel Derek Walcott, V.S. Naipaul, Tony Morrison y Joseph Brodsky, y autores de la talla de Jorge Luis Borges, D.H. Lawrence, Joseph Roth, W.H. Auden, Ossip Mandelstam, Gertrude Stein, Ernesto Sábato, Fernando Pessoa y Karl Popper. El nombre del padre ya ha sido publicada en Italia por La Giuntina (2003) y en España por Sefarad Editores (2004), con elogiosos comentarios de Mario Vargas Llosa y Alfredo Bryce Echenique, y fue seleccionada recientemente por el National Yiddish Book Center de Estados Unidos como una de las 100 obras más importantes de la literatura judía de los últimos 150 años. De acuerdo con el crítico peruano Ricardo González Vigil, "El nombre del padre marca la madurez artística de su autor: profundiza en la psicología de los personajes, desarrolla episodios apenas mencionados en La vida a plazos… y, sobre todo, sin perder el tono irónico, asume con mayor complejidad la herencia cultural judía y sus nexos conflictivos con el antisemitismo". Poeta, dramaturgo y novelista, Isaac Goldemberg nació en Perú en 1945 y reside en Nueva York desde 1964. Entre sus obras destacan Los cementerios reales, Crónicas del exilio, El amor y los sueños, Tiempo al tiempo, La vida al contado, Hotel Amérikka, Cuerpo del amor, Hombre de paso/Just Passing Through y Las cuentas y los inventarios. *** Denuncian irregularidad en otro premio del grupo Planeta La revista digital Red Literaria (http://www.red-literaria.com) se ha hecho eco, en un artículo de Alejandro Lainez, de la denuncia publicada por Juan Antonio Giménez en el diario español Información, de Alicante, según la cual la novela El penúltimo sueño, con que la escritora colombiana Ángela Becerra ganara recientemente el premio Azorín -dotado con 67.000 euros y auspiciado por Planeta y la Diputación de Alicante-, habría infringido las bases del certamen. Según el artículo, la novela de Becerra, que se impuso a otra finalista por apenas un voto, ya estaba contratada de antemano con la editorial colombiana Villegas Editores. Las bases del premio Azorín establecen que las obras participantes no deben tener compromisos editoriales previos al momento de presentarse en el certamen. La editorial de Bogotá lanzará El penúltimo sueño el próximo 29 de abril. Giménez asegura que los cuatro votos obtenidos por la novela de Becerra "correspondieron a los jurados designados por la editorial, mientras que los tres apoyos a la obra finalista fueron de las voces alicantinas". La Diputación de Alicante corre con los honorarios de los jueces de este concurso -1.800 euros para cada uno- aunque, según Giménez, tal emolumento es en vano pues la mayoría impuesta por Planeta garantiza a este grupo editorial el control de la decisión. Planeta se ha defendido de las acusaciones aduciendo que, aunque tiene los derechos de la novela para todo el mundo, en Colombia tales derechos están reservados a Villegas Editores, sello que se habría puesto en contacto con Becerra "al día siguiente o dos días después, y le pidió publicar la novela en Colombia". Sin embargo, y siempre según Giménez, la misma noche que se supo el veredicto la editorial colombiana había confirmado a la agencia EFE el lanzamiento de la obra durante la Feria Internacional del Libro de Bogotá, en abril. Antonia Kerrigan, agente literaria de Becerra, habría confirmado al diario alicantino que "efectivamente existía ese compromiso previo con la editorial Villegas Editores, antes de que se fallara el prestigioso premio. Más tarde, la agente se retractó en un comunicado, empleando las mismas palabras que usara Planeta en el suyo". Giménez añade en su artículo que "en los últimos dos años se ha roto la tradición de que estuviera en el jurado el ganador de la anterior edición. En 2004, en lugar de Javier García-Sánchez, fue nombrada María de la Pau Janer, que había resultado finalista del Premio Planeta dos años antes. En la edición de este año, que se falló el pasado jueves día 3, el alicantino Manuel Mira Candel fue suplido por Eugenia Rico, que se había alzado con el Premio Azorín en 2002 y que un año antes de obtener el galardón ya había publicado su primera novela con Planeta". No es la primera vez que Planeta se ve involucrada en un escándalo de este tipo. El más reciente es el relacionado con la novela Plata quemada, del argentino Ricardo Piglia, que obtuvo el premio Planeta-Argentina 1997 a pesar de que se encontraba comprometida contractualmente con Espasa-Calpe -sello del Grupo Planeta- desde junio de 1994, tal como lo ha revelado un fallo de la Cámara Civil el pasado 28 de febrero. Piglia y Planeta deberán indemnizar al escritor demandante, Gustavo Nielsen, tal como lo explicáramos en Letralia 121 (http://www.letralia.com/121/0228piglia.htm). *** Editorial española publica novela de Alfredo Armas Alfonso Este resto de llanto que me queda, novela escrita por el venezolano Alfredo Armas Alfonso en 1985, acaba de ser publicada por el sello Thule, de Barcelona (España) como parte de su colección La Vida Breve, dedicada a novelas de corta extensión. La novela fue presentada en Caracas el martes 8 de marzo en la Librería El Buscón, del Trasnocho Cultural del Paseo Las Mercedes, por el crítico Rafael Castillo Zapata, quien analiza actualmente, y por encargo de la fundación que lleva el nombre del escritor, las tres versiones de esta obra dejadas por Armas Alfonso. Este resto de llanto que me queda es una novela de amor, autobiográfica, en la que Armas Alfonzo -Sixto, en la novela- comparte la trama con Josefina Arredondo, la protagonista nunca olvidada. Alfredo Armas Alfonso nació en Clarines, en el Bajo Unare del oriente venezolano, el 6 de agosto de 1921. Uno de los escritores venezolanos más prolíficos del siglo XX y precursor de lo que luego se llamaría "realismo mágico", se inició muy tempranamente como periodista. Ya en 1943, a los 22 años, era corresponsal de El Nacional para el oriente de Venezuela y fue columnista de ese diario hasta 1990, año de su fallecimiento. Por más de una década se desempeñó como director de las revistas El Farol y Nosotros, de la Creole Petroleum Corporation, a las que renunció en 1963 para crear la Dirección de Cultura de la Universidad de Oriente. Su obra narrativa está contenida en 25 libros, publicados entre 1949 y 1990. La Biblioteca Ayacucho editó, en 1993, el volumen antológico El osario de Dios y otros textos. Durante su vida sólo llegó a ver dos obras suyas editadas en el exterior: Los lamederos del diablo, cuentos, Tumminelli, Roma, 1956; y Cuentos, antología editada por Casa de las Américas, La Habana, 1976. Algunos de sus cuentos están traducidos al ruso, al checo, al francés, al italiano y al inglés. Tras su muerte, sus hijos, creadores de la Fundación Alfredo Armas Alfonzo, se han dado a la tarea de clasificar los numerosos papeles del escritor, de publicar su obra en una hermosa colección y de difundirla en el extranjero, afán éste que se ha visto recompensado con la inclusión de sus relatos en antologías publicadas en España y Argentina. Thule Ediciones (http://www.thuleediciones.com) apuesta a la narrativa breve. Su director José Díaz explica que, al igual que la Isla de la que el sello ha tomado su nombre (donde el mar dejó de ser navegable pues se convirtió en hielo) pretende, también, ser una isla en el mundo editorial: la isla del microrrelato, de la novela corta, en definitiva de la microficción, considerándola la literatura del futuro. La editorial inició su incursión en el microrrelato con la colección de libros impermeables, lanzada el verano pasado, convirtiendo al libro en el compañero inseparable del lector vacacionista, a la orilla del mar o de la piscina entre otros paisajes, con los títulos Todo tiempo futuro fue peor del argentino Raúl Brasca y Con tinta sangre del chileno Juan Armando Epple. La Feria del Libro en Guadalajara, en noviembre pasado, fue el escenario para que los libros impermeables probaran sus virtudes en tierra americana, con dos nuevos títulos, Andanada, de Luis Britto García, y Del aire al aire, de Rogelio Guedea. Además de la Colección Micromundos, ofrece su catálogo la Colección Trampantojo dedicada al libro ilustrado, con tres títulos ya editados. La colección La Vida Breve es el tercer brazo al que apuesta Thule, para seguir ganando lectores en España, con autores mayoritariamente latinoamericanos, pues reconocen el capital literario que representan éstos en el acontecer mundial. *** Fernando Báez ahora cuenta cómo destruyeron Irak Recordado por su reciente éxito Historia universal de la destrucción de libros, que ya ha sido traducido a doce idiomas, el escritor e investigador venezolano Fernando Báez acaba de publicar La destrucción cultural de Irak, en el que explica cómo el patrimonio cultural e histórico de esa nación resultó devastado por la guerra. El libro, que contiene un prólogo del lingüista y crítico estadounidense Noam Chomsky, fue presentado el 9 de marzo en la Torre Corp Banca, en Caracas, y la edición para Venezuela ha sido acometida en conjunto por Alfadil y Octaedro-Flor del Viento. Báez, profesor e investigador nacido en Guayana y Premio Internacional de Ensayo Vintila Horia, formó parte de una misión internacional para evaluar los daños causados a las riquezas de Irak, que forman parte del patrimonio de la humanidad ya que allí nació la escritura y la civilización occidental. Cuando llegó a Bagdad, ya declarado el fin de la guerra, descubrió que la postguerra era más violenta aún pues las fuerzas de ocupación norteamericanas y europeas se dedicaron al saqueo y la destrucción de muchos tesoros irrecuperables, como las tablillas de arcilla de la civilización sumeria que contenían los primeros registros escritos de la humanidad. "En nombre de la civilización occidental, Estados Unidos está arrasando la cuna de la civilización", ha denunciado Báez. "No recuerdo semejante barbaridad desde tiempos de los mongoles. En Bagdad fueron quemados más de un millón de libros y 10 millones de documentos. Hoy en día Irak no tiene manera de conocer su pasado". Según Báez, los traficantes de obras de arte han saqueado alrededor de 15 mil objetos valiosos pertenecientes a Irak y a la vez a la humanidad. El investigador denuncia que muchas veces esos traficantes han actuado en complicidad con las fuerzas extranjeras de ocupación. "¿Se imaginan qué pasaría si un día el Museo del Louvre amaneciera vacío?", se pregunta. "En Irak comenzó la civilización porque allí empezó la historia. Los inventores del libro electrónico volvieron a los orígenes de la civilización para arrasarla", afirmó el escritor venezolano, quien agrega que muchas veces tal saqueo y destrucción fueron ejecutados de manera premeditada y planificada, como una banda de jóvenes provistos de bombas de fósforo que saqueó y destruyó documentos seleccionados de la Universidad de Bagdad. Afortunadamente ha habido personal de bibliotecas que contribuyó a salvar parte del patrimonio, pero de todos modos el daño infligido hasta ahora es irreversible. El ejército estadounidense ha cancelado toda investigación, el Pentágono se ha negado a admitir la magnitud del desastre y existe una total impunidad para los autores de tales atrocidades. "¿Quiénes son los responsables de la destrucción cultural de Irak?", se pregunta Báez. "La mayor parte de la culpa se la atribuyo a la administración actual de Estados Unidos, que desestimó todas las advertencias hechas y violó la Convención de La Haya de 1954 al no proteger los centros culturales y estimular, a través de una propaganda de odio, los saqueos". Estados Unidos también incurrió en los delitos de crímenes contra el patrimonio cultural expuestos en el Protocolo de 1999. "Tal vez por eso la administración de George W. Bush ha solicitado inmunidad para oficiales y soldados ante posibles juicios en los tribunales penales internacionales. Tal vez por eso también decidió reingresar a la Unesco y envió a su esposa a negociar cargos ejecutivos dentro de esta organización, despedir a los asesores más incómodos y silenciar toda crítica", denunció Báez. De igual modo, el escritor acusó al régimen de Saddam Hussein: "La infame presencia del partido Baaz en los centros culturales provocó que miles de manifestantes los atacasen al identificarlos con el despotismo de Saddam Hussein. En el caso de los directivos de los museos, su anuencia con el partido los llevó a permitir que se instalasen depósitos de municiones y francotiradores en puntos estratégicos, lo que puso en riesgo el patrimonio cultural". Báez admitió que ha recibido insultos y amenazas por haber formulado estas denuncias. "No soy político, soy un experto en libros y ninguna biblioteca estará a salvo mientras Irak sea un campo de batalla", finalizó. *** Andrés González Castro gana el premio Miguel Hernández El escritor español Andrés González Castro, residente en Martorell (Barcelona), obtuvo el Premio Nacional de Poesía Miguel Hernández en la edición de este año con la obra Maniobras diversivas, según informaron el 9 de marzo, en un comunicado, fuentes de la fundación hernandiana, organizadora del certamen. De 30 años de edad, González Castro recibió, como dotación del premio, 3.000 euros y la publicación de la obra a cargo del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert. El ganador es profesor de Secundaria y ha publicado poemas en las revistas Turia, El Reloj de Arena, El Ciervo y otras, así como numerosos artículos en el semanario L'Informador, de Martorell. Así mismo, ha traducido el poemario "Contra els poetes", de Ferran Anell, publicado por la Editorial L'Esguard de Barcelona en 2003. También tiene publicados los libros Curriculum vitae, en 2002, Premio Arte Joven de Creación Latina, Obra nueva, editado en Granada por Arabuleida en 2004, y Retablo de Nueva York (Universidad de Sevilla, 2005). El jurado, presidido por José Luis Ferris en su condición de miembro del Patronato de la Fundación, calificó la obra ganadora como un texto "escrito desde el asombro por la vida" y caracterizado por "el aliento amoroso y un matiz social, acompañado de un perfecto conocimiento del oficio de poeta" y con "un gran sentido del ritmo". *** Adolfo Castañón ingresó a la Academia Mexicana de la Lengua Este 10 de marzo se produjo el ingreso del escritor Adolfo Castañón a la Academia Mexicana de la Lengua, donde pasa a ocupar la silla número dos de la entidad, fundada en 1870 a instancias de la Real Academia Española. El discurso de ingreso de Castañón tuvo como tema una de sus mayores obsesiones como ensayista, crítico y editor: la vida y obra de Alfonso Reyes, a quien se refirió como "el mejor escritor mexicano en prosa y verso de la primera mitad del siglo XX". Luego de hacer un extenso y aleccionador recorrido por la bibliografía del autor de Visión de Anáhuac, Castañón invitó a releerlo a fondo y anunció la próxima publicación del diario inédito del polígrafo regiomontano, así como la edición de sus "escritos mexicanos" en una antología "como la que él mismo soñó a lo largo de su vida". Los más inmediatos antecesores de Castañón en la silla número dos de la Academia fueron Francisco Monterde y Héctor Azar. Ambos también evocados por Castañón, quien dedicó su discurso a otro regiomontano ilustre, Gabriel Zaid, físicamente ausente de la ceremonia. La disertación del nuevo académico enfatizó los valores y la dimensión universal de Alfonso Reyes: "El poeta y crítico que sentó las bases de un canon moderno de la prosa y del verso para las letras mexicanas e hispanoamericanas; el poeta infatigable que supo hacer de la escritura al pie de la letra una oración incesante; el poeta que supo transmutar sus dolores individuales en una religión a la vez personal y nacional, a la par nacional y regional". Ante una concurrencia emocionada y atenta, el autor de El jardín de los eunucos abundó en su elogio del "Reyes casual que siempre andaba jugando a la gran prosa, del hombre que tendió puentes a través de las hojas de su correspondencia, en un sistema de vasos comunicantes, creando así una suerte de hidrografía subterránea del orden cultural iberoamericano". Por todo lo que fue y aportó Reyes, "poeta proteico en verso y en prosa", Castañón sostuvo que "bien vale la pena una relectura a fondo de su obra; bien valen las rediciones y las reimpresiones, las copiosas antologías; vale y hace valer el instrumental editor que las tecnologías modernas ponen a nuestra disposición y darle una cuidadosísima relectura a lo ya transcrito y publicado; vale la recomposición editorial de sus textos de teoría literaria". José Luis Martínez respondió el discurso y dio la bienvenida a Castañón, "un crítico que ama la literatura y que busca en ella nuevas amistades". Recordó cuando conoció a Castañón, en 1976: "Entonces él tenía 24 años, casi la mitad de los 53 que hoy tiene, y no había publicado ningún libro. Ahora que comienza a ser académico cuenta ya con 33 libros, más de uno por año, es escritor famoso y amigo muy apreciado del señor viejo que soy y que le da la bienvenida a esta Academia Mexicana de la Lengua". Al referirse a la bibliografía del nuevo académico, Martínez enumeró los libros de Castañón y los dividió en siete grupos: ensayos varios, Alfonso Reyes, crítica literaria, versos, Montaigne, viajes y cocina. Los estudios formales de Castañón "se reducen a la preparatoria y a la licenciatura en letras españolas, pasante sin grado. Es, como su servidor, autodidacta". Sin embargo, con sus 30 años de trabajo en el Fondo de Cultura Económica, casa de la que ahora es gerente editorial, "se ha ganado con creces su doctorado en letras". *** Juan Gelman obtiene el premio Pablo Neruda El poeta argentino Juan Gelman fue galardonado con el Premio Iberoamericano de Poesía "Pablo Neruda", que se instauró el año pasado en el marco del centenario del Premio Nobel chileno y que entrega el Gobierno de Chile, según se pudo conocer el pasado 12 de marzo tras el anuncio hecho por el ministro de Cultura, José Weinstein, durante una ceremonia en la Casa Museo La Chascona, la morada de Neruda en Santiago. Gelman obtuvo el galardón por decisión unánime del jurado, que presidió el ministro Weinstein e integraron los escritores José Miguel Oviedo, de Perú; Mempo Giardinelli, de Argentina, y Hernán Loyola, de Chile. "El gran vínculo de su obra con la cultura popular y el carácter original, riguroso y conciso de su creación" fueron las razones fundamentales que argumentó el jurado para otorgar el premio al autor de obras como Bajo la lluvia ajena y Anunciaciones. El premio, dotado de 30.000 dólares, una medalla y un diploma, le será entregado a Gelman el próximo 12 de julio, cuando se cumplirán 101 años del nacimiento, en la sureña localidad de Parral, de Neftalí Reyes Basoalto (1904-1973), conocido posteriormente como el poeta Pablo Neruda, ganador del premio Nobel de Literatura en 1971. El galardón, que se entrega cada año, busca según sus bases distinguir la trayectoria de un autor cuya obra se considera un aporte notable al diálogo cultural y artístico de la región. En su primera versión recayó en el escritor mexicano José Emilio Pacheco. Gelman, que fue notificado telefónicamente por el ministro chileno de Cultura de la obtención del galardón, manifestó su sorpresa y agradecimiento por el reconocimiento y expresó su admiración por la obra de Neruda. *** Juan Villoro visita Mérida y Caracas El pasado domingo 13 de marzo el escritor mexicano Juan Villoro, ganador del premio Herralde 2004 por su novela El testigo, participó en el foro "La ciudad postapolíptica. La crónica aérea", que sobre el género de la crónica organizaron la revista Plátanoverde y la Fundación para la Cultura Urbana. En la actividad, que se realizó en la sala de la Cinemateca Nacional, ubicada en la Galería de Arte Nacional de Caracas, en el marco de la exposición Caracas Cenital organizada por la fundación, Villoro estuvo acompañado por los ponentes venezolanos Boris Muñoz, William Niño y Tulio Hernández (moderador). Villoro había presentado previamente El testigo en la Bienal Mariano Picón Salas, en Mérida, ciudad a la que visita por tercera vez y en cuya bienal ya había estado en su primera edición, en 1991. "Ahí he conocido a algunos de los más estimulantes escritores del idioma antes de que sean conocidos por el gran público", explicó el autor en entrevista con Ana María Hernández en el diario caraqueño El Universal. Villoro dijo haber conocido, en aquella primera edición de la bienal merideña, a autores venezolanos de la talla de Oswaldo Trejo, Salvador Garmendia, José Balza, Juan Sánchez Peláez, Juan Nuño, Luis Britto García, Victoria de Stefano y Eugenio Montejo, entre otros. Acotó en la misma entrevista que los libros que mayor éxito le han granjeado han sido los que ha escrito para niños de 10 a 13 años. "De modo que quizá ese sea mi horizonte intelectual más fecundo, lo cual me llena de gusto porque se trata de lectores sumamente exigentes, que no leen por esnobisno ni por moda y que te cambian por el Nintendo si no los satisfaces. En cuanto a la competencia con otros medios, creo que los niños de hoy pueden jugar con plastilina, computadoras y leer libros; se trata de opciones creativas muy distintas. Hay menos propaganda para los libros, pero una vez contraído el hábito descubres que nada se le parece". Sobre el tema de la piratería explicó que, aunque las fotocopias, la edición ilegal y la consulta no remunerada de libros en las bibliotecas lesionan los derechos de autor, "en la situación actual, para miles de latinoamericanos, el acceso a los libros sólo es posible si no los compran. Buena parte del trabajo que hago es gratuito precisamente por eso. No se puede someter la cultura en América Latina a las leyes del mercado. Sólo cuando los libros están al alcance de todos eso será posible". *** Verne le gana a Rulfo y a Cervantes Con un total de 3.317 de votos sobre los 7.774 votos recibidos, Julio Verne es el autor que ganó las votaciones para ser leído el próximo sábado 23 de abril, Día Mundial del Libro, en la jornada "Confabulados con la lectura", que organizan la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, la Secretaría de Cultura y el Ayuntamiento de Guadalajara. Las votaciones se realizaron del 7 al 14 de marzo, en 34 puntos de la ciudad, por medio de las páginas electrónicas de la FIL, la SC y el Ayuntamiento de Guadalajara, Pulso Informativo, y a través de diversos medios de comunicación, entre los que se contaron los diarios El Informador, Público, Radio Universidad y Promomedios. Quienes participaron eligieron a Verne a partir de una terna de la que también formaban parte Juan Rulfo, quien obtuvo 2.883 votos, y Miguel de Cervantes, que alcanzó 1.490. Hubo 84 votos nulos. A partir de los resultados de esta votación comenzarán los preparativos para la lectura en voz alta de la obra Viaje al centro de la Tierra, de Julio Verne, la cual se realizará durante doce horas continuas y enmarcará la celebración el Día Mundial del Libro, el próximo sábado 23 de abril. En esta lectura, que se llevará a cabo en la Plaza de Armas de las 10 de la mañana a las 10 de la noche, está invitada a participar toda la población, que podrá inscribirse hasta el 11 de abril en el sitio de la FIL (http://www.fil.com.mx) o llamando al teléfono 33 38100331. Algunos medios de comunicación también recibirán inscripciones de sus lectores u oyentes. Alrededor de la actividad se realizará una feria en la que las librerías locales y diversas editoriales venderán títulos de narrativa y poesía al público asistente. Asimismo, se hará una campaña de difusión de la obra de Verne y se repetirá, como desde hace tres años, el regalo de una rosa, obsequiada por el Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (Cucba), para todos aquellos que compren un libro el 23 de abril, de acuerdo con la tradición catalana del día de San Jordi. El Día Mundial del Libro es una celebración creada por la Unesco en 1995, que en la actualidad se festeja en más de ochenta países. Esta es la cuarta ocasión en que la FIL organiza esta lectura; las ediciones anteriores fueron dedicadas a Juan José Arreola, Julio Cortázar y Pablo Neruda. Julio Verne, el escritor francés que es reconocido como el padre fundador de la literatura de ciencia ficción, nació el 8 de febrero de 1828, en Nantes. Tuvo una fascinación por la ciencia y los inventos del siglo XIX, documentó sus aventuras y predijo muchos de los logros científicos del siglo XX: escribió sobre cohetes espaciales, submarinos, helicópteros, aire acondicionado, misiles dirigidos e imágenes en movimiento, mucho tiempo antes de que éstos fueran realidad. Verne es autor de más de ochenta libros, que han sido traducidos a 112 idiomas. Entre los más conocidos se encuentran: Viaje al centro de la Tierra (1864), De la Tierra a la luna (1865), Veinte mil leguas de viaje submarino (1870), La isla misteriosa (1875), Miguel Strogoff (1876) y La vuelta al mundo en ochenta días (1873). Murió el 24 de marzo de 1905. *** Francisco Ayala celebra su 99º cumpleaños publicando nuevo libro El escritor español Francisco Ayala, premio Cervantes 1991, comenzó la celebración de su 99º cumpleaños, el pasado 16 de marzo, presentando en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, durante un acto celebrado en su homenaje, su libro La invención del Quijote, un volumen en donde explora la obra de Cervantes desde múltiples aspectos. "Las grandes obras de la literatura son como un ser vivo que se transforma con cada nueva lectura", aseguró el autor, que admitió sentirse "muy satisfecho" de esta obra "que me representa en la instrucción de mis 99 años", declaró. Recordó además su larga relación con el Quijote, que comenzó cuando tan sólo era un niño y "manoseaba" las páginas de aquella "ejemplar aventura" y luego repetía a sus mayores el "inapropiado" vocabulario de sus páginas. Estas primeras lecturas de las aventuras del ingenioso hidalgo se convirtieron en una constante en su vida y una lección interminable, que se ha renovado con el paso del tiempo. "Siempre lo he seguido leyendo y con el paso de los años, ha ido variando mi percepción de la obra", confesó este granadino, quien también ha obtenido el Premio Nacional de Narrativa y el Premio de las Letras Andaluzas. El libro, que surgió a petición de su "amigo" Cesar Antonio Molina, director del Instituto Cervantes, para celebrar el próximo mes de abril la inauguración de la biblioteca que lleva su nombre en Suecia, es una compilación de sus artículos y de los textos que ha ido creando en relación a la obra de Cervantes desde 1940 hasta 1995. Comienza con un prólogo de Víctor García de la Concha, un prólogo del autor y una conversación entre ambos en la que Ayala asegura que el Quijote "puede alumbrar todavía nuevas sendas" y sobre todo, "enseñarnos a reconsiderar la realidad problemáticamente". El volumen también incluye un epílogo con el discurso que pronunció Ayala cuando recibió el Premio Cervantes en 1992 y el discurso que leyó en el III Congreso Internacional de la Lengua Española celebrado en noviembre de 2004 en Argentina. Sobre su longevidad, dijo que estar vivo, en su caso, es insolente. "Con esta edad es una insolencia por mi parte estar en el mundo. De modo que perdonen y muchas gracias por consentirlo y aceptarlo y darme su cariño". Ayala dijo que su febril actividad le hace sentirse joven. "Sólo la muerte nos debe detener. Pero con todos mis respetos, creo que no es bueno que nos detengamos, porque si lo hacemos no avanzamos. Lo normal es detenerse cuando uno alcanza una determinada edad, pero yo he seguido haciendo lo de siempre: creación literaria". *** Monte Ávila presentó la Biblioteca Básica de Autores Venezolanos El jueves 17 de marzo fue presentada oficialmente, en la terraza del teatro Teresa Carreño, la Biblioteca Básica de Autores Venezolanos, una recopilación preparada por el sello Monte Ávila Editores. La presentación estuvo a cargo de Carlos Noguera, presidente de la editorial, Luis Britto García, presidente de la junta directiva, y Héctor Soto, viceministro de Cultura para el Desarrollo Humano. El gobierno venezolano ha previsto que esta iniciativa editorial, dirigida especialmente a jóvenes, llegue en primera instancia a los planteles educativos públicos y privados de Venezuela, como parte de una campaña por la lectura que se ha venido desarrollando en los últimos meses sobre la premisa de que el libro es un bien cultural y, como tal, su acceso debe ser democrático. Los libros incluidos en la colección, que han sido impresos en ediciones masivas, están dirigidos principalmente a jóvenes con edades comprendidas entre 12 y 18 años, según explicó el presidente de la editorial, Carlos Noguera. La colección tendrá inicialmente cuarenta títulos canónicos de la literatura venezolana contemporánea, divididos en cuatro series: la Serie Verde, de narrativa; la Serie Roja, de poesía; la Serie Azul, de prosa ensayística y documental, y la Serie Durazno, de dramaturgia. Monte Ávila Editores imprimió 35 mil ejemplares de cada uno de los primeros 40 títulos de la colección, de los cuales 25 mil serán distribuidos gratuitamente por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, en las escuelas básicas y diversificadas de todo el país. El resto del tiraje será vendido en las librerías y ferias itinerantes al accesible precio de cinco mil bolívares. Noguera agregó que la iniciativa pretende rescatar la antigua Biblioteca Popular Venezolana, que fue concebida inicialmente por Mariano Picón Salas y que fue ejecutada por el Departamento de Publicaciones del Ministerio de Educación en la década de 1960. Los primeros títulos presentados fueron La tienda de muñecos, de Julio Garmendia; Las memorias de Mamá Blanca, de Teresa de la Parra; Inventamos o erramos, de Simón Rodríguez; Un regalo para Julia y otros relatos, de Francisco Massiani; El inquieto Anacobero y otros relatos, de Salvador Garmendia; La mujer de espaldas y otros relatos, de José Balza; Antología poética, de Vicente Gerbasi; Antología poética, de Ramón Palomares; El cocodrilo rojo / Mascarada, de Eduardo Liendo; Buenas y malas palabras. Una selección, de Ángel Rosenblat; Compañero de viaje y otros relatos, de Orlando Araujo; Diarios de mi vida, de Rufino Blanco Fombona; Al sur del Equanil, de Renato Rodríguez; Nueva antología, de Víctor Valera Mora; Poesía selecta, de Gustavo Pereira; La ciudad de los techos rojos. Una selección, de Enrique Bernardo Núñez; Antología poética, de José Antonio Ramos Sucre; Ana Isabel, una niña decente, de Antonia Palacios; Mensaje sin destino, de Mario Briceño-Iragorry; Antología poética, de Pálmenes Yarza; La noche es una estación, de Sáel Ibáñez, y Días de espantos, de Carlos Sandoval (compilador). Tras los primeros cuarenta títulos se publicarán Antología poética, de Ana Enriqueta Terán; Invencionero, de Denzil Romero; La mano junto al muro y El falso cuaderno de Narciso Espejo, de Guillermo Meneses; Páginas escogidas, de Simón Bolívar; Diarios, de Francisco de Miranda; Compañero de viaje, de Orlando Araujo; Libro de las artes y los oficios, de Aníbal Nazoa; No es tiempo para rosas rojas, de Antonieta Madrid; El duelo de Florentino y el Diablo y otros poemas, de Alberto Arvelo Torrealba; El libro que no se ha escrito, de Jesús Semprún; La luna no es pan de horno, de Laura Antillano, y Ángel perdido en la ciudad hostil, de Rodolfo Santana, entre otros. En la presentación de la colección, amenizada por el saxofonista Domingo Hernández, estuvieron presentes los poetas Elizabet Schön, Leonardo Padrón, Luis Alberto Crespo, Francisco Pérez Perdomo, William Osuna y Ana María Del Ré; los narradores Eduardo Liendo y Sael Ibáñez; el dramaturgo Rodolfo Santana; los ensayistas Luis Barrera Linares y Natividad Barroso; el presidente de Cavelibro, Iván Diéguez; la directora general de editorial Planeta, María Elena Rodríguez, y el presidente del Teatro Teresa Carreño, José Luis Pacheco, entre otros. *** Murió el arqueólogo boliviano Carlos Ponce Sanginés El arqueólogo boliviano Carlos Ponce Sanginés, impulsor de la investigación de la cultura tiwanaku (tiahuanaco), falleció a la edad de 79 años el pasado viernes 18 de marzo, informó una de sus dos hijas. El investigador murió en su residencia de Sopocachi, barrio de La Paz, a causa de un cáncer con el que luchaba desde hacía cuatro años. La muerte le llegó apenas unas horas después de que el gobierno le concediera el Cóndor de los Andes en grado de Comendador, la máxima distinción boliviana, que recibiera de manos del canciller interino, Jorge Gumucio. Anteriormente había recibido otras distinciones, entre las que destaca el Premio Nacional de Cultura (1977), por su vasta labor que reflejó en más de cincuenta libros. El destacado arqueólogo boliviano promovió la declaratoria de las ruinas de Iskanwaya (La Paz) como monumento nacional e impulsó la investigación de la cultura tiwanaku, que se desarrolló entre los siglos VIII y XII. Además de escribir medio centenar de libros relacionados con sus investigaciones de la cultura tiahuanacota, Ponce Sanginés fundó el Centro de Investigaciones Arqueológicas Tiwanaku (Ciat) y el Instituto Nacional de Arqueología (Inar). La enfermedad de Ponce Sanginés apareció casi inmediatamente después de concluir la última investigación sobre la cultura tiwanacota, en la que el arqueólogo identificó a los 49 jefes de Estado de ese imperio y descubrió los retratos de algunos de ellos en vasos de cerámica. Nacido en mayo de 1925 en La Paz, Ponce Sanginés se tituló en la Universidad Mayor de San Andrés, de la misma ciudad, y luego realizó estudios de especialización en la Universidad de Córdoba (Argentina). Impulsor del Museo Nacional de Arqueología, fue también ministro de Asuntos Campesinos en 1964. A lo largo de su vida publicó más de cincuenta títulos, entre los que destacan Arqueología boliviana (1957), Tunupa y Ekako (1969), Catalogación del patrimonio arqueológico de Bolivia (1974), Tiwanaku: espacio, tiempo y cultura (1981) y Tiwanaku. 200 años de investigaciones arqueológicas (1999). Además del Cóndor de los Andes que recibió en su lecho de muerte, se había hecho merecedor del Premio Nacional de Cultura (1977), el Pergamino al Mérito de la Alcaldía de Tiwanaku (1989), la Condecoración del Puma de Oro (1986), la Condecoración Medalla de Oro (1978), la distinción Hijo Predilecto de Samaipata (1974) y la Condecoración Pedro Domingo Murillo (1971). *** Borges sufría complejo de Edipo El investigador argentino Alejandro Vaccaro, biógrafo de Jorge Luis Borges, estuvo en Madrid a mediados de este mes para presentar ante los medios españoles su libro El señor Borges, que recoge quince años de conversaciones con Epifanía Uveda de Robledo, la criada del genial escritor durante treinta y cinco años y que es más conocida como "Fanny". Vaccaro insiste en que, a pesar de abordar temas de la vida privada de Borges, el libro no accede a territorios escabrosos. "Es Borges en pijama, pero no en ropa interior", afirmó. Sobre Fanny, el investigador dijo que "es una mujer iletrada, humilde, sencilla y honesta" que "vive con poco, de lo que le dan los amigos de Borges, pero no le guarda rencor a Kodama", haciendo referencia a la alteración en el testamento de Borges, ordenada según Vaccaro por Kodama, para excluir a Fanny de la herencia. "Kodama vive ahora con mucha plata, tiene un piso en París, otro en Buenos Aires y otro en Ginebra, y viaja por todo el mundo en primera clase", denuncia Vaccaro. Sobre el premio Nobel, el libro revela que, pese a que Borges solía declarar a los periodistas que no merecía el galardón, íntimamente lo deseaba. "La última vez que, por supuesto, tampoco le dieron el premio Nobel, se juntaron un montón de periodistas pensando que ese año sí se lo iban a dar. Hacían guardia durante todo el día y entonces, cuando llegó la noticia, empezaron a decir que no, que no se lo habían dado y el señor se puso muy mal. Él pensaba que sí, porque sentía que él se merecía ese premio... Pero había uno que mandaba más en esa parte del mundo y dijo: 'Mientras yo viva, Borges no va a ser el premio Nobel'. El señor se ponía muy triste". El libro abunda en descripciones de la relación entre Borges y las mujeres que le rodeaban, y sugiere que el autor de El Aleph sufría complejo de Edipo: muerta su madre, Leonor Rita Acevedo, Borges seguía hablándole a los pies de su cama vacía. " 'Madre, ya estoy de vuelta, hoy fuimos a cenar con Silvina y Adolfito, comí tal cosa, estoy bien'. Y así hasta el último día que estuvo en Buenos Aires", explica Fanny. "Porque ésa era una costumbre que él tenía de toda la vida. Cuando volvía tarde la señora estaba en la cama y él se paraba en la puerta y le contaba todo. Después iba a su habitación, se ponía el pijama y estiraba la mano, ¿para qué? Para que yo le diera caramelos, le ponía dos caramelos, todas las noches, y un pañuelo arriba de la almohada mojado con colonia. Para mí era como un bebé". Según el libro, doña Leonor habría alertado sobre lo que consideraba las verdaderas intenciones de María Kodama respecto a su hijo. "Un día María se quedó después que se fueron todos y se puso a charlar con doña Leonor. La madre del señor Borges se daba cuenta de todo cuanto acontecía a su alrededor. Entonces le preguntó: '¿Usted está enamorada de Georgie?'. Kodama, tal vez un poco sorprendida por la pregunta, le contestó que no, que ella estaba enamorada de la literatura de Borges pero no del hombre. Cuando María Kodama se fue, doña Leonor dijo en voz alta, pero como hablando para sí misma: 'Esa piel amarilla se va a quedar con todo' ". Según Vaccaro, Borges "necesitaba mujeres dominantes", de ahí que se divorciara de su primera mujer y encontrara en su amante Viviana Aguilar a la mujer intelectual perfecta para él. De María Kodama, Vaccaro cuenta, según le relató Fanny, que nunca llegó a vivir con ella y consideró "inverosímil" que fuera el amor lo que les uniera. "Borges tuvo siempre relaciones amorosas no correspondidas", precisó. Revela también aspectos extraños de la personalidad del escritor. "En una ocasión vinieron a verlo unas mujeres, que tenían una entrevista con él (...). El señor se divirtió mucho con ellas y estaba muy alegre. Cuando ellas se fueron vino la pregunta de rigor: "Fanny, cómo eran estas mujeres que me vinieron a ver?'. 'Eran negritas, tenían la piel de color negro'. La cara del señor se fue transformando de a poco y se enojó mucho conmigo, por no haberle avisado, antes de que entraran, de que las alegres chicas que lo habían entretenido durante casi toda la tarde eran de piel negra. Eran actitudes extrañas, casi incompresibles para mí". Vaccaro, presidente de la Asociación Borgeseana de Buenos Aires, defiende su libro. "Se trata de un libro serio que hace una clara línea divisoria entre las intimidades y la vida cotidiana del literato. (...) Es un libro sobre la cotidianidad del hombre que creó algunas de las mejores páginas de la literatura en español", afirmó. Fanny había reticente en otras ocasiones a hablar de su "señor" pero con Vaccaro hubo una especial sintonía. "Fanny tuvo más de 100 propuestas suculentas para hablar de Borges y no lo hizo. Siempre las rechazó. En mí encontró otra voz diferente para dar sentido a sus palabras", matizó Vaccaro, quien contrastó todas las palabras de Fanny pese a saber que ella "nunca miente". "Fanny es una mujer simple, humilde, que tuvo la dicha de cruzarse con la familia Borges y le dedicó lo mejor de sus años. No creo que nunca supiera la importancia que tuvo Borges", agregó Vaccaro, quien afirma tener aún muchas cosas que contar sobre el genio argentino, por lo que ya anunció la publicación próxima de sus novelas El manuscrito Borges y Leonor Acevedo pide la palabra. *** Un "hidalgo" pasea a transeúntes de Barcelona por caminos del Quijote "Un hidalgo en Barcelona" es el nombre del itinerario literario que desde el 19 de marzo se realiza semanalmente en la Ciudad Condal y que pretende acercar a los paseantes a aquellos lugares en los que se desarrolla parte de la aventura de Don Quijote de la Mancha. Esta iniciativa se lleva a cabo durante todos los sábados hasta el 29 de octubre. El grupo de paseantes va acompañado de un personaje obsesionado con el pasado, Onofre Lleó, que va recordando a los presentes las aventuras de Don Quijote y su escudero Sancho Panza. Una educadora acompaña también al grupo y contextualiza cada espacio con el momento histórico y la obra literaria. Este itinerario, que tiene una duración de tres horas, se suma al iniciado el 29 de enero por "La Barcelona de Carvalho", que finalizará el próximo 25 de junio. "Un hidalgo en Barcelona" llevará a los paseantes desde la calle de la Llibreteria hasta las Drassanes, pasando por la Plaça del Pi o el antiguo Hospital de la Santa Creu. *** Publican primera antología poética completa de José Emilio Pacheco La fábula del tiempo es el título que tiene la primera antología poética completa del escritor mexicano José Emilio Pacheco, y que próximamente será puesta en circulación bajo el sello de Ediciones Era. El libro recoge cuatro décadas de la poesía de Pacheco y ha sido compilado por Jorge Fernández Granados. Con una gran variedad de voces y de formas poéticas -del epigrama y el haikú al versículo y el poema extenso- aparecen en esta antología "la tragedia, la violencia y la fugacidad, al lado del fulgor de la hermosura y la celebración del hecho incomparable de estar vivos". La antología ha sido preparada por encargo de la editorial y no se limita a la mera colección de textos, sino que añade "una visión conjunta y vigorosa de los 12 libros -de Los elementos de la noche y El reposo del fuego a La arena errante y Siglo pasado, sin excluir No me preguntes cómo pasa el tiempo ni El silencio de la luna, todos publicados por Era en volúmenes individuales- que forman una obra viva en cuyo centro late el paso del tiempo en su doble e inseparable aspecto de constructor y destructor". A su vez, el antologista asume: "Es fallida toda intención de resumir a un autor. En el mejor de los casos, confío en que esta selección conservará el perfil justo y los momentos más nítidos de un carácter. A realzar ese carácter o espíritu de lo escrito es a lo que se encamina, con humildad, esta discutible cirugía". Fernández Granados recomienda leer de primera mano al autor sometido a una antología, pues "por bien hecha que esté, no rebasará nunca el mero umbral, la invitación a su obra". Hace notar también que "el ajuste, pertinente y riguroso, que José Emilio Pacheco hace de sus poemas escritos desde la juventud es un proceso continuo con el paso de las ediciones. Piezas ya clásicas de la poesía del siglo XX mexicano se ven sometidas a una revisión que las afina; e incluso, en algunos casos, a una extrema metamorfosis". El diario mexicano La Jornada publicó, el 20 de marzo pasado, cinco poemas (http://www.jornada.unam.mx/2005/mar05/050320/a03n1cul.php) de La fábula del tiempo, como adelanto exclusivo. *** Premio Joan Crexells recupera la dotación económica El Ateneu Barcelonès anunció el pasado 21 de marzo que el Premio Joan Crexells de Novela Catalana recuperará en la próxima edición la dotación económica para el ganador, un hecho que no se producía desde sus primeras convocatorias, antes de la Guerra Civil. El ganador del XXXIV Premio Joan Crexells recibirá 6.000 euros y el compromiso del Ateneu de incluir en su programación diversas actividades de difusión y estudio de la obra. Con estas acciones, el Ateneu quiere contribuir a recuperar el estudio de autores contemporáneos en catalán. Pueden optar al premio todas aquellas novelas escritas en catalán que hayan sido editadas en 2004. El jurado de esta edición está compuesto por Albert Balcells, Josep Faulí, Mariàngela Cerdà, Anton M. Espadaler y Manuel Ollé. El premio se fallará el próximo 12 de abril en la sede del Ateneu Barcelonès en un acto que contará con la actuación del músico y compositor Carles Santos, cuyo programa se mantendrá en secreto por deseo del artista. El Joan Crexells, que se instauró en 1928 pero no se concedió entre los años 1939 y 1981, es uno de los premios con más historia de las letras catalanas, ya que a lo largo de su historia ha reconocido obras de Prudenci Bertrana, Josep Maria de Sagarra, Mercè Rodoreda, Joan Perucho, Baltasar Porcel, Pere Gimferrer y Ferran Torrent, entre otros. El ganador de la última edición fue Emili Teixidor con su novela Pa negre. Recientemente, los herederos de Joan Crexells (1896-1926) donaron sus fondos documentales y bibliográficos al Ateneu. La colección la componen cerca de 400 libros, entre los que destacan primeras ediciones de obras filosóficas, correspondencia, prensa de la época y manuscritos personales del propio escritor. *** Organizadores del premio Loewe no quieren polémicas este año La Fundación Loewe ha modificado las bases del XVIII Premio Internacional de Poesía, según se supo este 21 de marzo, tras anular el fallo del Jurado de la pasada edición por el incumplimiento de las bases por parte del ganador, Antonio Gracia. Su obra Devastaciones, sueños, había sido ya galardonada con el IX Premio de Poesía José de Espronceda Ciudad de Almendralejo. Las bases de este galardón especifican lo siguiente: "La obra u obras presentadas deberán ser inéditas y no premiadas. Si el autor presenta la obra simultáneamente a otro concurso, en caso de obtener un premio, deberá notificarlo con urgencia, en un plazo máximo de tres días, a la Fundación Loewe para proceder a retirar los ejemplares, mediante escrito firmado, pudiendo adelantarlo por teléfono o correo electrónico. En todo caso, una obra que haya resultado previamente premiada quedará automáticamente descalificada". Asimismo, en caso de ser premiado, "el autor se compromete a declarar bajo su responsabilidad el carácter inédito y no premiado de su obra, su total sometimiento a las bases del concurso, así como a ponerse a plena disposición de la Fundación Loewe en relación con la posterior promoción y/o difusión del Premio y de la obra editada". Otra de las novedades de esta edición será la presencia en el Jurado del director de la Real Academia de la Lengua, Víctor García de la Concha. Además, el autor de la obra premiada obtendrá, este año, 18.000 euros -1.500 euros más que en la edición anterior- y la publicación de la obra por la colección Visor de Poesía. Con la incorporación de Víctor García de la Concha, el Jurado de esta edición queda compuesto por Carlos Bousoño (Presidente de Honor), Luis María Ansón, Francisco Brines, José Manuel Caballero Bonald, Clara Janés, Jaime Siles y Luis Antonio de Villena. Se prevé, asimismo, un Premio a la Creación Joven, para menores de 30 años, de 6.000 euros, sólo en el caso de que el premio fuese otorgado a alguien mayor de edad. Los trabajos que optarán al XVIII Premio Internacional de Poesía de la Fundación Loewe tendrán un mínimo de 300 versos y se deberán entregar tres copias con título, lema o seudónimo, sin firma, junto a la plica. El plazo de admisión finaliza el 24 de junio incluido. El fallo tendrá lugar en el mes de noviembre. Respecto a la polémica de 2004, la cláusula 10 de las bases especificaba textualmente: "La obra u obras presentadas deberán ser inéditas. Si el autor se presenta simultáneamente a otro concurso, en caso de obtener un premio, deberá notificarlo con urgencia a la Fundación Loewe, para proceder a retirar los ejemplares". El jurado de esa edición, compuesto por Luis María Anson, Francisco Brines, José Manuel Caballero Bonald, Clara Janés, Jaime Siles, Luis Antonio de Villena y Carlos Marzal, otorgó el 23 de noviembre el premio a la obra de Gracia Caselles (Bigastro, Alicante, 1946), y así se le notificó por teléfono esa misma noche. El autor, asistió, incluso, al anuncio del fallo celebrado el miércoles 24, en el Hotel Palace de Madrid. Pero después de verificar las informaciones aparecidas en la prensa, el jurado consideró que el autor había incumplido las bases con una falta importante de sentido ético, al no notificar, en el momento en el que se le comunicó por teléfono la concesión del premio, que la obra había resultado previamente premiada con el IX Premio de Poesía José de Espronceda Ciudad de Almendralejo, el 25 de julio de 2004, por lo que se decidió revocar el fallo y declarar desierta esa edición del premio. *** José Antonio Millán publica Perdón imposible, libro sobre puntuación Perdón imposible, el más reciente libro del lingüista español José Antonio Millán (Madrid, 1954), y que llegó a las librerías el pasado 22 de marzo, es una "guía para una puntuación más rica y consciente". Su título alude a una historia que circula atribuida a Carlos V según la cual el monarca estaba a punto de firmar la confirmación de una sentencia, que decía: "Perdón imposible, que cumpla su condena"... Pero, movido por una magnanimidad repentina, decidió mover la coma de sitio: "Perdón, imposible que cumpla su condena", salvando la vida del reo. Anécdotas semejantes, referidas a todos los signos de puntuación, se encuentran a través de toda la obra. Millán explicó que, tras el éxito de la británica Eats, shoots & leaves, de Lynne Truss -un tratado de puntuación que ha vendido cientos de miles de ejemplares-, se planteó hacer algo similar pero, al ser diferentes las reglas del inglés y el castellano, una traducción "no era la mejor idea", por lo que se decidió a "hacer una obra nueva pero conservando el tono, es decir, dirigiéndose a todo el mundo, y no sólo a los filólogos". Millán constata que, a diferencia de otras lenguas, en la puntuación española "no existe una norma culta tajante" y, así, en nuestros escritos reina una anarquía de criterios que "convierte puntuar en una actividad creativa más, seña de estilo". El libro repasa la historia de la puntuación, desde los tiempos en que todos los textos se escribían juntos -sin separación entre palabras- y en mayúsculas, por lo que había que ser un experto para descifrarlos enseguida. De ahí que en el Satiricón de Petronio, cuando el rico Trimalción es sorprendido besando a un joven, se justifique así: "No porque sea guapo, sino porque es excelente: sabe dividir por diez, lee a simple vista". El sistema de puntuación también es fruto de los azares de la historia. Borges se lamentó de que, junto a los signos de interrogación o admiración, tan aceptados, no se hubieran ensayado los "de indecisión, de conmiseración, de ternura", matices que el lenguaje oral o gestual sí alcanzan a expresar. Millán añade otro vacío: "La exclamación indica un tono de voz elevado, pero no tenemos un signo para indicar el susurro". Perdón imposible contiene ejemplos extraídos de libros de cocina, leyes, manuales de instrucciones, diarios, poemas, enciclopedias... "Una receta mal puntuada puede conducirnos al desastre", apunta el autor. Las comas -"alegres, diversas, múltiples, minuciosas, salvadoras pero modestas", en palabras de Guillermo Cabrera Infante- ocupan los primeros capítulos de la obra, seguidas por el punto y coma, los dos puntos, el punto y los puntos suspensivos; después vienen el paréntesis y las rayas, los signos de entonación, las comillas, el guión, el apóstrofo e incluso la ausencia de puntuación. Hay, además, tres capítulos entre paréntesis -es decir, "de lectura optativa"-: uno sobre El Quijote, otro sobre las traducciones y un tercero sobre los signos en combinación. La atención especial a El Quijote ha sido en virtud de que Cervantes -como casi todos los escritores del siglo XVII- escribía sin puntuación, que le era añadida por el impresor, quien, además, no ponía puntos y aparte; es decir, que "el 95% de la puntuación que conocemos del Quijote se la hemos añadido nosotros, o Paco Rico, para hacerlo más claro". Asimismo, los lectores que lo deseen pueden consultar en Internet un suplemento de la obra (http://perdonimposible.com): ahí ha publicado Millán las notas, referencias exactas de las citas, bibliografía, fuentes, comentarios e ilustraciones que no aparecen en la manejable edición impresa del libro. También hay un concurso, que se renueva mensualmente, en el que se debe puntuar correctamente un texto, así como "ejemplos de puntuaciones raras, extrañas o malas", donde abundan los titulares de periódicos. *** Sergio Ramírez presenta una novela e inaugura un encuentro El escritor nicaragüense Sergio Ramírez (Masatepe, 1942) estuvo en España la semana pasada para cumplir una apretada agenda: el 19 de marzo presentó en Santander su novela Mil y una muertes, y mañana martes 29 inaugura en Lleida el encuentro Valiente Mundo Nuevo, actividad previa a la Mostra de Cinema Llatinoamericà que se realizará hasta el 5 de abril. Mil y una muertes es una novela, pero se involucra en la reflexión sobre la estética del arte y la creación literaria; por otro lado, Ramírez -quien fue vicepresidente de Nicaragua entre 1984 y 1990- ha expresado aquí su pasión por escritores como Rubén Darío, Flaubert o Turguéniev. Otra pasión plasmada por el autor ha sido la que siente desde niño por el arte de la fotografía, al investigar la vida de Castellón, un fotógrafo nicaragüense que falleció al final de la Segunda Guerra Mundial y cuyas peripecias vitales le dan pie al escritor para recrear determinados episodios del último siglo y medio de la historia de Europa y de América. La reconstrucción de las andanzas de Castellón le da pie al autor de Margarita, está linda la mar, premio Alfaguara de Novela 1998, para recordar episodios nada edificantes de las vidas de Rubén Darío, Flaubert, Chopin, George Sand o Turguéniev, entre otros. Todos ellos son creadores a los que Sergio Ramírez admira, pero a los que en esta novela no duda en "desmontar del pedestal" y mostrarlos tal como eran, "de carne y hueso", con sus debilidades, pasiones y defectos. Vicepresidente de su país durante la etapa sandinista, Sergio Ramírez hace años que dejó atrás la política y asegura que no siente nostalgia de ella. "Estoy curado de ese vicio, y lo estoy menos del vicio del tabaco, porque cuando veo una cajetilla de cigarrillos, aún quiero olerlos", dice. El escritor, quien reúne en su revista digital, Carátula (http://www.caratula.net), a algunas de las más importantes firmas de la literatura hispanoparlante contemporánea, funge además de coordinador del encuentro Valiente Mundo Nuevo, que desde mañana se desarrollará en Lleida con la participación de ocho escritores latinoamericanos de las más recientes promociones. Los autores incluidos en el programa son Juan Villoro, Jacinta Escudos, Alberto Fuguet, Eduardo Halfon, María Moreno, Edmundo Paz Soldán y Fabrizio Mejía, quienes debatirán sobre el estado actual de la literatura del continente. El encuentro será inaugurado por Ramírez, quien pronunciará la conferencia "América, novela con novelistas". El autor convocó a gente de una misma generación representativa de la literatura que se hace actualmente. Además de su conferencia, se celebrarán dos mesas redondas, una conferencia de clausura y también lectura de obra a cargo de los propios autores. El propósito de los organizadores es explicar la nueva realidad literaria latinoamericana en el contexto de la globalización, el subdesarrollo, la inmigración forzosa, la revolución tecnológica y el impacto de la droga y la corrupción. Otro tema es cómo crear un nuevo lenguaje que mezcle la influencia de las lenguas indígenas con el español y el inglés, pero también sobre qué escribir, si seguir con la memoria histórica o, por el contrario, mirar a la nueva realidad urbana y social. *** Falleció la pintora venezolana Mercedes Pardo La pintora venezolana Mercedes Pardo, una de las artistas más prestigiosas y representativas del arte moderno abstracto de su país, murió el jueves 24 de marzo en Caracas de causas aún no reveladas, según informó su hija, Mercedes Otero Pardo, presidenta de la Orquesta Municipal de Caracas. La artista contaba 83 años de edad. Nacida el 20 de julio de 1921 en la parroquia La Pastora, en Caracas, Pardo destacó por su evolución dentro de la abstracción lírica, al lograr, según los expertos, la autonomía de la obra a través del tratamiento sensorial del color. Titulada por la Escuela de Artes Plásticas y Aplicadas de Caracas, Pardo vivió varios años en Santiago de Chile y París y en 1978 recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas. Su obra ha sido expuesta en importantes museos de todo el mundo. La insigne maestra inició desde muy joven una trayectoria en la plástica que abarcó diferentes técnicas y diversas posibilidades del lenguaje abstracto, principalmente en pintura, acuarela, vitrales y collages, además de sus afamadas escenografías para teatro y una abundante obra gráfica. Esta última se expone desde el pasado 10 de marzo en la Sala de Exposiciones del Rectorado de la Universidad Metropolitana de Caracas, con piezas prestadas por la colección de la Galería de Arte Nacional. Recientemente, con motivo de la Feria Iberoamericana del Arte 2004, Pardo se definió como "La colorista" en un homenaje que incluyó la publicación de un libro que recoge parte de su obra, bajo el título La utopía privada de Mercedes Pardo. *** Seminario en Lima analiza la narrativa de Borges El Centro de Estudios Literarios Antonio Cornejo Polar, en Lima (Perú), iniciará el viernes 8 de abril el seminario "La narrativa de Jorge Luis Borges", en el que el investigador Moisés Sánchez Franco desarrollará el tema en ocho sesiones -los viernes de 7 a 9 de la noche- para una matrícula máxima de veinte alumnos por curso. El seminario tendrá como fin estudiar y analizar la obra cuentística del gran escritor argentino. Para ello, se examinarán los relatos más representativos de sus libros más importantes, señalándose los temas principales y las constantes temáticas, ideológicas y simbólicas más recurrentes en sus discursos, así como su interrelación con su contexto y su importancia en el devenir histórico de la literatura argentina y latinoamericana. Sánchez Franco expondrá temas como la apropiación de discursos por parte de Borges; el rol de los sueños, los símbolos y la metafísica; el infinito, la intertextualidad y la crítica a la pedantería artística argentina; el doble y el relato breve; la representación de espacios modernos y la monstruosidad del texto; el conflicto entre civilización y barbarie y la concepción de la fábula, y el tratamiento de subgéneros a través de la narrativa borgiana dedicada al malevo y al cuento policial. Cada semana, los asistentes leerán y analizarán un texto de Borges. Entre las lecturas se encuentran fragmentos de El informe de Brodie, El Aleph, Episodio del enemigo y Borges y yo. Antes del debate, Sánchez Franco establecerá el contexto histórico del texto a estudiar, para luego describir y analizar el texto, proponiendo algunas características y pautas que guíen su discusión en cada sesión. El costo del curso oscila entre 100 y 150 nuevos soles. Los interesados pueden inscribirse en la sede del centro, en el número 3074 de la avenida Benavides (Óvalo de Higuereta), en Miraflores, telefonear al 2161029 o escribir por correo electrónico a celacp@wayna.rcp.net.pe. *** Julio Verne protagoniza nueva película venezolana Después de una década sin producir largometrajes, el cineasta venezolano, Alfredo Anzola, regresa con 1888, el extraordinario viaje de la Santa Isabel, una historia en la que Julio Verne funge de protagonista a través de un viaje maravilloso por el río Orinoco. El filme reúne al afamado escritor francés, precursor de la literatura de ciencia ficción, Julio Verne, al geógrafo italiano Ermano Stradelli y a Juana de Kermor, originalmente un personaje de El soberbio Orinoco, de Verne. Se estrenará en las salas venezolanas el 15 de abril y abrirá la Semana del Cine Francés en conmemoración del centenario de la muerte del escritor. Kermor se embarca en el bongo con una identidad distinta a la suya; este tercer expedicionario se disfraza de hombre para buscar a su padre, hecho que le imprime sorpresa, romance y gracia al filme. Además, según el mismo Anzola, la majestuosidad del Orinoco, rodeado de imponentes paisajes, convierten al río en un personaje más de la cinta de 95 minutos de duración. "Verne y Stradelli representan la visión del europeo y la mirada imperial sobre las provincias, en una época marcada por el descubrimiento científico, y el despertar del mundo ante nuevos conocimientos", dijo Anzola sobre los personajes en rueda de prensa celebrada recientemente en la capital venezolana. Anzola reveló que con esta película pretende rendir homenaje a su padre, quien le inculcó la lectura de Verne. La fresca historia, ambientada en el siglo XIX, intenta plasmar un momento histórico en el cual los europeos, como Stradelli, viajaban a América para describirla en Europa, "de una manera tal, que luego nosotros nos vemos obligados a estar a la altura de esa descripción que ellos hicieron". Por lo tanto indicó que esta película se acerca a estos íconos de la ciencia y de las letras con una mirada diferente. "La naturaleza logra seducir a un marinero aficionado y aun geógrafo, haciéndoles creer que pueden subir tranquilamente por el Orinoco. Uno busca paz y el otro el inicio del Orinoco". Anzola explicó que su película es el resultado de la pretensión de querer hacer cine histórico, ilusión que no se llegó a concretar del todo. "Al principio quería hacer un film sobre Humboldt y Bonpland pero, cuando estaba en disposición de arrancar, me llamó (el cineasta) Luis Armando Roche, y me dijo que tenía una película sobre Humboldt por hacer". Esto, más allá de desilusionarlo le dio una gran libertad porque le permitió desarrollar "una fiesta de la imaginación" donde mezcló personajes de la historia con un ser irreal. Dentro de las peculiaridades de esta producción, destaca el hecho de haber sido filmada totalmente en exteriores. Al principio la trama ocurre en el castillo de Araya y luego el resto de la historia se desarrolla en el río Orinoco. Para esto, el equipo de producción, integrado por 21 personas, se tuvo que internar en la selva durante los meses de enero y febrero de 2004, acompañados de los protagonistas: Marco Villarubia (Julio Verne); Ronnie Nordenflycht (Ermanno Stradelli) y Kristin Pardo (Juana de Kermor). El cineasta, reconocido por su cinta de 1994 El misterio de los ojos escarlata, habló de las dificultades del rodaje. "El sol del mediodía era insoportable; pasamos el calor zoquete; los mosquitos puri-puri nos acompañaron cada mañana y cada tarde, tanto así que los muchachos les compusieron una canción". Mencionó entre los principales logros de producción el haber logrado la construcción del bongo "Santa Isabel", embarcación que fue hecha por carpinteros de la región y que fue posible, como él mismo lo dice, gracias a su terquedad. "Nadie creía que aquel barquito que dibujé en un papel pudiese navegar. Sin embargo, después de algún tiempo se logró, y todo por mis ganas loquísimas de hacer esta película", dijo con una sonrisa. La dirección de arte indicó que el trabajo estuvo a cargo de Marietta Perroni, quien se basó en los tonos ocres dados por el sol para ambientar la historia. Perroni, con ayuda de amigos, ubicó ciertos objetos que caracterizan la época tales como un sextante, escopetas y una brújula, que son piezas únicas de colección. La música fue compuesta especialmente para esta película por Alfonso Montes. "Se grabó en un conservatorio alemán, y se basa en una pieza sinfónica compuesta por Alfonso titulada El río siempre". La veterana actriz Elba Escobar, quien se ha ganado el aplauso del público en filmes como De mujer a mujer y Macho y hembra, además de presentar actualmente en teatro la obra Afrodita, cuerpo de señora, tiene una actuación especial en el filme encarnando a Honorine, la esposa de Verne. *** Promotores y gestores culturales se reunirán en Guadalajara Entre el 26 y el 30 de abril se celebrará en Guadalajara, Jalisco (México) el III Encuentro Internacional de Promotores y Gestores Culturales, que bajo el lema "Del pluralismo cultural a la interculturalidad" reunirá al menos a quinientos promotores y gestores del sector cultural de los países de la región. La programación correrá a lo largo de cinco días, en los que se ofrecerán conferencias magistrales en sesiones plenarias; mesas de trabajo y talleres en forma simultánea, con énfasis en diferentes temas de la gestión cultural; y eventos que permitirán dar a conocer a los participantes algunas manifestaciones artísticas de México. Además, se contará con la exposición y venta de publicaciones relacionadas con el tema. Se crearán sedes alternas en los distintos estados mexicanos en los que los institutos, secretarias o consejos de cultura apoyen las condiciones necesarias, para instalar teleaulas y organizar los aspectos logísticos. Además se realizará una memoria y se editará un multimedio, con las conferencias y ponencias presentadas al encuentro, así como otras actividades relevantes, y un directorio con los datos de todos los participantes como pasos básicos para la creación de la red de gestores culturales. El primero de estos encuentros se realizó en 1988 en Ciudad Victoria, Tamaulipas, y nueve años después se realizó el segundo en Querétaro. Tomando en cuenta estos antecedentes, se ha organizado la tercera edición con la participación del Consejo Nacional de la Cultura (Conaculta), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, http://www.unesco.org), la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Gobierno de Jalisco, los Ayuntamientos de Guadalajara, Zapopán, Tlaquepaque y Tonalá, el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (Iteso) y la Universidad de Guadalajara. La cuota para participar en el encuentro es de $500. Los interesados deberán contactar a alguno de los organizadores: el maestro José Antonio Mac Gregor (macgrego@correo.conaculta.gob.mx) y las licenciadas Anacecilia Montilla Rugeles (cmontilla@correo.conaculta.gob.mx) y Adriana Martínez Flores (amartine@correo.conaculta.gob.mx). También se puede establecer contacto vía telefónica a través de los números de Conaculta: 55 12539861 / 9862 / 9685 / 9870 o el número de fax 55 12539899. ** Promotores y gestores culturales se reunirán en Guadalajara Entre el 26 y el 30 de abril se celebrará en Guadalajara, Jalisco (México) el III Encuentro Internacional de Promotores y Gestores Culturales, que bajo el lema "Del pluralismo cultural a la interculturalidad" reunirá al menos a quinientos promotores y gestores del sector cultural de los países de la región. La programación correrá a lo largo de cinco días, en los que se ofrecerán conferencias magistrales en sesiones plenarias; mesas de trabajo y talleres en forma simultánea, con énfasis en diferentes temas de la gestión cultural; y eventos que permitirán dar a conocer a los participantes algunas manifestaciones artísticas de México. Además, se contará con la exposición y venta de publicaciones relacionadas con el tema. Se crearán sedes alternas en los distintos estados mexicanos en los que los institutos, secretarias o consejos de cultura apoyen las condiciones necesarias, para instalar teleaulas y organizar los aspectos logísticos. Además se realizará una memoria y se editará un multimedio, con las conferencias y ponencias presentadas al encuentro, así como otras actividades relevantes, y un directorio con los datos de todos los participantes como pasos básicos para la creación de la red de gestores culturales. El primero de estos encuentros se realizó en 1988 en Ciudad Victoria, Tamaulipas, y nueve años después se realizó el segundo en Querétaro. Tomando en cuenta estos antecedentes, se ha organizado la tercera edición con la participación del Consejo Nacional de la Cultura (Conaculta), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, http://www.unesco.org), la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Gobierno de Jalisco, los Ayuntamientos de Guadalajara, Zapopán, Tlaquepaque y Tonalá, el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (Iteso) y la Universidad de Guadalajara. La cuota para participar en el encuentro es de $500. Los interesados deberán contactar a alguno de los organizadores: el maestro José Antonio Mac Gregor (macgrego@correo.conaculta.gob.mx) y las licenciadas Anacecilia Montilla Rugeles (cmontilla@correo.conaculta.gob.mx) y Adriana Martínez Flores (amartine@correo.conaculta.gob.mx). También se puede establecer contacto vía telefónica a través de los números de Conaculta: 55 12539861 / 9862 / 9685 / 9870 o el número de fax 55 12539899. *** Un congreso recordará la figura de Juan Valera Entre el 27 de abril y el 1 de mayo se realizará en Cabra, Córdoba (España) el II Congreso Internacional sobre Don Juan Valera, evento que cuenta con el auspicio de la Delegación de Cultura del ayuntamiento local y que se enmarca en las actividades conmemorativas del centenario del universal escritor egabrense. Además del encuentro, que tiene su antecedente en una primera edición realizada en 1995, el Ayuntamiento de Cabra (http://www.cabra.net) convoca anualmente un premio literario dedicado a Valera, y se vienen organizando conferencias, jornadas y un homenaje que durante los últimos 73 años se ha realizado de forma sistemática el día 24 de junio en la glorieta que lleva su nombre, dentro del parque Alcántara Romero. Este año ha sido declarado por el ayuntamiento como el "Año de Valera", por lo que se han organizado actividades que en el marco temporal de los doce meses intentarán difundir y proyectar la importancia de la obra y vida del autor en el ámbito local al internacional. El congreso abordará en su programa académico los diferentes ámbitos de Valera, y se complementará con una serie de actividades paralelas como exposiciones, proyecciones cinematográficas, lecturas públicas, representación teatral, muestra de coleccionismo, ruta turística y encuentro gastronómico sobre la cocina andaluza del siglo XIX. Para asistir al congreso es necesario cancelar, antes del 25 de abril, una cuota de inscripción de 30 euros que da derecho a la obtención de un certificado de asistencia y aprovechamiento expedido por la Universidad de Córdoba en el que se reconocerán créditos. El plazo para las inscripciones como ponentes ya ha expirado. Las inscripciones están siendo gestionadas desde el ayuntamiento por Inmaculada Campaña Ruiz (cultura@cabra.net). Es posible comunicarse con ella por el teléfono 34 95 7520110. *** Festival de Bogotá dedicará homenaje a Harold Alvarado Tenorio Organizado por la revista de poesía Ulrika, el XIII Festival Internacional de Poesía de Bogotá (http://www.poesiabogota.org), que se realizará en la capital colombiana entre el 16 y el 21 de mayo, tendrá como país invitado a Chile, y dedicará su homenaje central al poeta Harold Alvarado Tenorio (Buga, 1945), editor de la revista Arquitrave (http://www.arquitrave.com). Chile asistirá representado por nueve poetas: Raúl Zurita, José María Memet, Eduardo Llanos, Gonzalo Millán, Tomás Harris, Teresa Calderón, Pedro Lastra, Oscar Hanh y Marcelo Rioseco. Además participarán unos cuarenta autores de España, México, Costa Rica, Cuba, Venezuela, Ecuador, Brasil y Argentina, entre los que se cuentan los argentinos Daniel Chirom y Rodolfo Alonso; los brasileños Ledo Ivo y Floriano Martins; el costarricense Álvaro Matta Guillé; el ecuatoriano Fernando Balseca; los españoles Luis Miguel Madrid, Mariano Peyrou y Eduardo Moga; el nicaragüense Nicasio Urbina; los mexicanos Juan Bañuelos, Sergio Mondragón y José Ángel Leyva y el peruano Antonio Cisneros. Venezuela estará representada por Leonardo Padrón, Miguel Márquez y Arturo Gutiérrez Plaza. La sede anfitriona del evento será la Biblioteca Nacional de Colombia, donde, además de ofrecerse recitales con la participación de todos los invitados, se desarrollarán los seminarios "La poesía en el Quijote desde una perspectiva iberoamericana", bajo la coordinación del escritor Juan Felipe Robledo, y "La poesía chilena hoy", conducido por la escritora Luz Mary Giraldo. La inauguración del certamen se llevará a cabo en el Teatro Colón. Además, se ofrecerán recitales y mesas redondas en torno a los tópicos mencionados en universidades, colegios, centros culturales, bibliotecas barriales, parques, cárceles, tabernas y otras ciudades colombianas. Habrá tres grandes jornadas los días miércoles, jueves y viernes. El miércoles será el "Día de los niños y los jóvenes" y sus anfitriones los más grandes e importantes colegios de la capital. El jueves será el "Día de las universidades" y entre las universidades que se han comprometido con esta iniciativa están la Central, el Externado, la Nacional, la Javeriana, la Tadeo Lozano, la Pedagógica y el Politécnico Grancolombiano. Por último, el viernes será el "Día de las localidades", en que los poetas se desplazarán a los perímetros más apartados de la ciudad. El poeta homenajeado, Harold Alvarado Tenorio, ha destacado como traductor de las obras de Kavafis, Eliot y más de un centenar de poetas chinos. Hizo estudios de literatura latinoamericana en la Universidad Complutense de Madrid, donde recibió título de doctor con una tesis sobre Jorge Luis Borges. Como docente ha ofrecido cursos y conferencias en varias universidades y centros culturales del mundo, y fue catedrático y jefe de los departamentos de literatura latinoamericana de Marymount Manhattan College de New York, donde dirigió por varios años el programa The Latin American and Spanish Series, y en la Universidad Nacional de Colombia donde recibió el título de profesor y fue también director del Departamento de Letras y uno de los fundadores de la carrera de literatura. El poeta, que ha vivido en Madrid, Paris, México, Estocolmo, Berlín y Beijing, ha sido traducido a varios idiomas y ha publicado más de quince libros. Uno de sus últimos títulos es Summa del cuerpo. Ha recibido el Premio Internacional de Poesía Arcipreste de Hita y el Simón Bolívar de Periodismo. *** Hemingway recibirá visitas en museo de La Habana El Museo Ernest Hemingway de La Habana, Cuba, acogerá entre el 23 y el 25 de mayo a investigadores y turistas de todo el mundo, durante su X Coloquio sobre el mencionado escritor norteamericano. El encuentro tendrá como objetivo propiciar el intercambio de experiencias con especialistas sobre Hemingway en todo el mundo y conocer trabajos recientes sobre el tema. En esas fechas se conmemora también el 65º aniversario de la primera edición de la novela Por quién doblan las campanas y el sexagésimo aniversario de la conclusión de la Segunda Guerra Mundial. Con tantos motivos a cuestas, el coloquio puede atraer no sólo a expertos en la obra y vida del escritor, sino a muchos turistas interesados en visitar el museo y comprender de manera más cercana a Hemingway, autor que tuvo en La Habana muchos sitios predilectos, como el bar-restaurante Floridita, donde prácticamente estableció su comandancia durante más de dos décadas de estancia interrumpida en la isla. También se encuentran el hotel Ambos Mundos, La Bodeguita del Medio, un restaurante de comida típica, las aguas de la corriente del golfo, donde pescara peces de pico y el club marinero que lleva su nombre en la zona oeste, entre otros lugares. En 1956 el novelista entregó su medalla de Premio Nóbel a Cuba, en particular a los pescadores del poblado costero de Cojímar, sus mejores amigos, trofeo que se conserva en el Arzobispado de Santiago de Cuba, con una réplica en la Basílica de El Cobre, en ese lugar. Entre los temas del coloquio se encuentra la labor de Hemingway como corresponsal de guerra y el reflejo de esta contienda en su obra, su posición antifascista y antibelicista, y estudios sobre su vida y escritos. Gradys Rodríguez, quien fuera directora del museo y es ferviente investigadora del tema, anunció que los interesados pueden ponerse en contacto con el Museo Hemingway (Finca Vigía; San Francisco de Paula; teléfono 53 7 910809; fax 53 7 558090; e-mail: mushem@cubarte.cult.cu y gladysr@cnpc.cult.cu). *** Publican novela inédita e inconclusa de Alejandro Dumas El caballero del Santo Armiño, de novecientas páginas, una novela de Alejandro Dumas padre que se sitúa en la batalla naval de Trafalgar, fue descubierta hace diecisiete años por el investigador francés Claude Schapp. Originalmente publicada por entregas en el periódico El Monitor Universal, la novela será publicada en Francia, con un final agregado por Schapp, el próximo 3 de junio. Schapp, experto en la vida y obra de Dumas, tardó siete años en recopilar toda la obra -publicada entre enero y noviembre de 1869- y diez en corregirla. Realizó su descubrimiento en la Biblioteca Nacional de Francia. Dumas no pudo escribir el final, pues se encontraba muy enfermo y murió apenas un mes después de publicar la última entrega que alcanzó a escribir. El caballero... es la novela que faltaba para completar una trilogía junto a Los Blancos y los Azules y Los camaradas de Jehú. La historia, según adelantó el editor, se sitúa en la batalla naval de Trafalgar (1805), con la victoria de la flota inglesa sobre la hispano-francesa. Encontrar obras perdidas de Dumas no es insólito en Francia, pero hasta ahora el material recobrado correspondía a piezas de teatro, relatos de viajes y correspondencia, siempre obras muy cortas. El secreto de la existencia de la novela se ha guardado celosamente hasta tener preparada su publicación. Dumas es todo un símbolo para los franceses, que en 2002 trasladaron sus restos mortales al Panteón de París. ||||||||||||||||||||||| LITERATURA EN INTERNET |||||||||||||||||||||| === Proyecto Patrimonio: escritores y poetas en español =================== === http://www.letras.s5.com ============================================== En el ensayo sobre poesía gauchesca con el que Borges inicia su libro Discusión, el genio argentino cuenta que, cuando le preguntaron a Whistler cuánto había tardado en pintar uno de sus cuadros, el artista respondió: "Toda mi vida". Y agrega Borges: "Con igual rigor pudo haber dicho que había requerido todos los siglos que precedieron al momento en que lo pintó. (...) El menor de los hechos presupone el inconcebible universo". No hay que ser demasiado profundo para saber que se refería Borges a la manera como nuestras creaciones -y más, inclusive nuestras actitudes- son el resultado de todo lo que nos ha antecedido y de las influencias que los hechos pasados han ejercido sobre el entorno que, finalmente, nos construye a nosotros. Es esta materia la que conforma el vasto edificio que el sitio chileno (pero más, universal, por sus contenidos) Proyecto Patrimonio: escritores y poetas en español viene desarrollando desde el año 2000. Creado desde Santiago por Luis Martínez Solorza (osol301@yahoo.es), el sitio anuncia en su página principal ser una publicación "que rescata la creación y el pensamiento de escritores y poetas chilenos y extranjeros publicados en diarios, revistas y folletos en español". En parte localizados por Martínez Solorza y en parte provistos por sus visitantes, Proyecto Patrimonio: escritores y poetas en español está poblado de los más interesantes hallazgos literarios en nuestro idioma, así como de completos análisis sobre aspectos específicos de la literatura. Una sección de especial atractivo para ratones de biblioteca será la "Foto Literaria", un archivo con facsímiles de páginas maestras de la literatura e imágenes poco frecuentes o simplemente muy inetresantes que tienen que ver con las letras y sus autores. Allí vemos la primera página de Antes del fin, con tachaduras y notas marginales de Ernesto Sábato, un facsímil del telegrama con el que Neruda es oficialmente notificado del Nobel y su nota marginal pidiendo que se notifique a la Academia que su nombre "legal" es Neruda (y no Neftalí Ricardo Reyes Basoalto), una foto de César Vallejo que denuncia que a esa misma foto suele quitársele del lado a Georgette Marie Phillipart ("mi Gillette"), una imagen terrible en la que un soldado chileno quema libros en aquel funesto 11 de septiembre. Entre otras secciones informativas, el sitio ofrece un apartado con convocatorias de concursos literarios vigentes, un nutrido listado de enlaces a otros recursos en Internet y un muy concurrido foro cuyos visitantes mantienen vivo el debate sobre la literatura contemporánea. En principio el sitio fue pensado para la publicación de materiales literarios, escritos por las grandes firmas de la literatura en español, a los que difícilmente habría podido accederse por otra vía pues se hallaban desperdigados en revistas, antologías y otras ediciones. Más adelante se completó su personalidad con una segunda vertiente: abriendo sus puertas a autores que desearan publicar allí sus trabajos, para lo cual basta escribirle a Martínez Solorza. En el archivo de aquellas grandes firmas destacan nombres como Jorge Amado, Mario Benedetti, Roberto Bolaño, Alejo Carpentier, José Donoso, Ariel Dorfman, Jorge Edwards, Rubem Fonseca, Alberto Fuguet, Jaime Huenún, Franz Kafka, Clarice Lispector, Gabriela Mistral, Pablo Neruda, Nicanor Parra, Violeta Parra, Rainer Maria Rilke, Gonzalo Rojas, Pablo de Rokha, Joao Guimarães Rosa, Juan Rulfo, Ernesto Sábato, Antonio Skármeta, César Vallejo... Martínez Solorza explica, en la presentación del sitio, sus motivaciones para mantenerlo. "Que al artista se le conocerá por su obra es algo que se repite continuamente. Sin embargo es lógico preguntarse entonces respecto a dónde empieza o termina esta obra. (...) Es en la entrevista, practica periodística de enorme importancia, en el comentario, el artículo o la opinión publicada o transmitida por los diversos medios, en el que van brotando estas pequeñas piezas, estas pequeñas partículas creativas que van conformando este verdadero 'patrimonio', con los pareceres y pensamientos, análisis e ideas de los creadores literarios. (...) Dada la precariedad del soporte en el que estos escritos se encuentran, diarios, revistas, folletos, antiguas publicaciones, es que surgió la idea de generar un 'proyecto de rescate de patrimonio', que podría perderse o convertirse de muy difícil acceso o quedar destinado al desecho y a la pérdida , la idea es rescatarlos y subirlos a la red para el uso libre de ellos, por quien los necesite". Y es que tal filosofía es la que le da su verdadero valor a Internet: que, más allá de la interactividad y el chat y todas esas cosas, el hombre se encuentre a sí mismo en las ideas de todos quienes, precediendo el momento actual, han prefigurado el inconcebible universo en el que vivimos. ||||||||||||||||||||||| ARTÍCULOS Y REPORTAJES |||||||||||||||||||||| === Alberto Arvelo Torrealba o Cómo literaturizar el llano ================ === Carlos Yusti ========================================================== (Nota del editor: poeta, abogado, político, diplomático, educador y ensayista, Alberto Arvelo Torrealba murió el 28 de marzo de 1971. Su obra en conjunto luce opacada por su obra maestra, Florentino y el Diablo, sobre la cual habla en este trabajo el escritor Carlos Yusti). El escritor Rómulo Gallegos le dio al llano un protagonismo relevante a través de sus libros. Quizás este impulso intelectual pronto tomó visos de moda. Rafael Bolívar Coronado escribió una pequeña obra con diálogo y canciones que contenía la letra del Alma llanera y así varios autores convirtieron el llano como elemento de inspiración. Con Alberto Arvelo Torrealba el llano adquiere su dimensión mítica. El poema Florentino y el Diablo, que apela a esa fórmula llanera del contrapunteo, le proporciona al llano un elemento universal, presente en muchas culturas, como lo es un encuentro con el Diablo. Florentino y el Diablo vendría siendo nuestro Fausto. Ubicado en la corriente criollista, es un poeta que a veces rompe el recuadro de las simplificaciones sumarias para convertirse en un poeta de gran intensidad lírica. Premio Nacional de Literatura en 1966 y escritor de obras como Música de cuatro (1928), Cantas (1932), Glosas al cancionero (1940), Florentino y el Diablo (1940/1957) y Caminos que andan (1952). Como es lógico, Florentino y el Diablo opacó toda su restante obra. Las claves de su popularidad son empatía con su entorno inmediato, empleo de formas métricas sonoras y pegajosas. Sin mencionar el hecho que su verso apunta hacia esas dudas y anhelos existenciales universales. También el poema pasó por varias fases de correcciones. Quizá Arvelo Torrealba trataba de proporcionarle un toque de inigualable perfección. La notoriedad del poema se acrecentó con la versión musical en la cual el famoso Carrao de Palmarito se convierte, a través de su recia garganta, en un coplero siniestro. La versión del maestro Antonio Estévez, La cantata criolla, posee una fuerza poética por sí misma, rebasando cualquier parámetro populachero para situarla como obra estética de gran aliento. El poema de Arvelo Torrealba vuelve a la palestra cultural por razones políticas. Algún "sesudo" politicastro de ocasión ha encontrado la clave oculta del poema y lo ha banderizado/banalizado. El poeta no sabe para quién escribe. El creador, ya digo, es un insólito personaje que, trabajando para el día a día, se olvida de la posteridad, y luego viene un agente de comercio de la política y vulgariza su excelsa obra para darle carne lírica a su esquelética propuesta politiquera. Luego dicen que la poesía no sirve para nada. Uno, que sabe a la perfección que la poesía no vende, no se explica este éxito arrollador de un poema que convirtió al llano en una metáfora de gran expresividad lírica y musical. Hoy existen muchos poetas que convierten al llano en literatura, pero ninguno ha logrado alcanzar ese esplendor poético de Arvelo Torrealba. Ninguno ha logrado literaturizar con honestidad el llano y esa riqueza musical y lingüística que lo caracteriza. ** Carlos Yusti carlosyusti@cantv.net Escritor venezolano (Valencia, 1959). Es director de las Bibliotecas Municipales en Ciudad Guayana. Forma parte del equipo que edita la revista cultural Predios, del fondo editorial del mismo nombre. Ha publicado los trabajos ensayísticos De ciertos peces voladores, Pocaterra y su mundo, Cuaderno de argonauta y Vírgenes necias, entre otros. === No me pueden quitar el pensamiento Víctor Corcoba Herrero ======== Pintan bastos. Por todos los lados saltan chispas. El calentamiento se sirve en bandeja. Difícil lo tiene el aire para bajar los desaires y rebajar las desavenencias. La atmósfera recalentada no puede con los humos del hombre. Ahí está, la siembra de vídeos tormentosos, la faena de mafiosos plantando muertes en doquier esquina, los distintos y distantes gobiernos que nos desgobiernan con sus confrontaciones partidistas y particulares, la bajada de pantalones frente a los sembradores del terror y la delincuencia organizada, los baños pornográficos de la red, la familia como jungla de intereses, los cerebros descerebrados... Resulta que en el mundo de la globalización, la amenaza contra uno es una amenaza contra todos; y, por ello, todos hemos de colaborar en que los ánimos se aplaquen. Por desgracia, para la colectividad del mortal, se mortifica a raudales. Hoy cohabitan en el mundo fanáticos que no quieren razonar, necios que no saben recapacitar, esclavos que no se atreven a plantarles cara a los que piensan por ellos, cebos que nos engatusan el tiempo para la reflexión calmada, tan necesaria para desenredar los nudos anudados de vicios y bravuras. Para estos casos de abatido desconsuelo, Lope de Vega tenía una vivificante gragea poética, que desearía -por motivos de ambiente inseguro- ponerla en mente en toda mente: "Pero con una cosa me contento: / que aunque pueden quitarme la esperanza / no me pueden quitar el pensamiento". Con el tiempo, también es más fácil envenenar el bosquejo de ideas y dejar de ser la persona que pudo haber sido y no fue. Estamos en una selva, tan panchos, sin pensar en sus efectos. Una legión de ocupaciones tampoco nos deja cavilar para tomar otros rumbos salvavidas. El resultado actual es que una gran parte de la especie humana obra sin pensar, otra piensa sin obrar, sin mirarse a sí mismo para verse en los demás. Todo este clima de rupturas matrimoniales, familiares o sociales, se debe más que nada a un retraimiento, a un remar sin rumiar, a un modismo sin sentido en el sentido del vínculo afectuoso. Los afectos se rompen y el amor se troncha, porque no se es nada, el que a nada ni a nadie ama. Por esa falta de oír con los ojos y de escuchar con el alma el liderazgo del amor, golpean con fuerza las guerras entre estados, la violencia dentro del Estado, con inclusión de inciviles batallas, la pobreza, las enfermedades infecciosas, las degradaciones del medio ambiente, las armas nucleares, radiológicas, químicas y biológicas, el terrorismo y la delincuencia trasnacional organizada. Nos queda el pensamiento humano, la inquietud de la razón, por hacer valer la gnosis natural, el conocimiento cabal, en este mundo de máquinas. Vargas Llosa declaró recientemente que el terrorismo internacional "ha encontrado los instrumentos para interferir en nuestras vidas políticas". También en nuestras vidas diarias. Por cierto, cada día más inhumana que humana, quizás por esa ausencia de interrogarse cada cual, sobre el por qué de las cosas y su finalidad. Somos demasiado importantes, por el mismo hecho de ser, como para estar vendidos al capricho de alguien. Tal como está el patio, asegurarse la vida es una responsabilidad compartida y debiera ser una habilidad pactada. Unir siempre de manera armónica las cuestiones de vida con las del corazón y el pensamiento, creo que es una buena manera de hallarse todos con todos y en todos. Esa alianza de culturas de la que tanto ahora se habla, no puede tratar al ser humano como algo que está ahí, sino como alguien que vive con su propio pensamiento e identidad, por muy ínfimo que sea. A veces da la sensación que vivimos en un mundo irracional y sin sentido. Hace falta un renovado consenso avalado por el entendimiento a lo diverso. Ahí está la cuestión. Lo de hacer unas naciones unidas más eficaces para los nuevos tiempos que se nos avecinan es tan urgente como necesario. Hemos perdido tantos valores en el tiempo, inherentes a la propia vida del nacido, que urge redescubrir esos horizontes humanos, donde se reconozca, respete y ampare la existencia de todo individuo, aunque piense diferente a nosotros. Siempre será peligroso aquel que no tiene nada que perder, porque para él la vida es un juego de azar, le importa poco hacer camino y dejar que se camine. La nueva moda de alistarse voluntariamente para cometer ataques suicidas, es un fiel reflejo de lo que representa vivir para algunas personas. Por eso, es tan vital, que los estados existan para el beneficio del mundo, y el mundo para beneficio de sus ciudadanos, y los ciudadanos para que la vida sea una esperanza permanente. La vida es demasiado corta para que la tornemos un campo de batalla, en vez de un campo de conquista reconquistada en el amor. Y es que el amor no ve con la vista, sino con el alma. Un corazón es lo que le hace falta a la tierra para que vuelva a latir la poesía del viento en la faz del hombre. ** Víctor Corcoba Herrero corcoba@telefonica.net Escritor español (León, 1958). Reside en Granada. Diplomado universitario por la Universidad de Oviedo y licenciado en derecho por la Universidad de Granada. Ha ejercido la enseñanza. Ha publicado más de una veintena de libros de creación poética, ensayo, biografía y estudio. Es columnista en una treintena de medios escritos, radiofónicos, audiovisuales, digitales y revistas. === Marisela Norte: la poeta voyeur del MTA que recorre el mundo ========== === Desde el este de Los Angeles a todas partes, sin vehículo ============= === y sin computador María Eugenia Sáez ============================== Es una primitiva urbana que no quiere aprender a manejar ni tiene computador ni correo electrónico, pero es la poeta del este de Los Angeles traducida al alemán y sus versos son parte del "Diario Interno" que hizo un grupo japonés sobre nuestra ciudad y sirven de trasfondo a la Trance Music que se baila en discotecas belgas ("L.A. donde una mujer es asesinada"). Elle y The Los Angeles Weekly publicaron poemas suyos que aparecen en una antología de Rolling Stone. Explica el fenómeno como uno de transmisión oral de tribu a tribu. "Alguien le dice a otro que me oiga o me lea". Ella es todo oídos y ojos en ese autobús MTA que la transporta del este de Los Angeles al centro donde trabaja en el Museo de Arte Contemporáneo de Los Angeles (Moca). "Soy la que se asoma a mirar y escuchar", dice en "Peeping-Tom Girl" (salon.com.audio), la voyeur sin conexión electrónica, leída y escuchada en América, Asia y Europa. La voyeur del MTA "Soy una chica mirona y en el asiento del autobús me han llevado, he pasado y he sido invadida por las vidas de ellas", dice el poema. "Me convertí en la estudiante del asiento de atrás, con miedo a experimentar y las pestañas cargadas de rimel. Fui la muchachita metida en su vestido rosa de pantalla de lámpara, que escucha a sus padres discutir de un barrio a otro totalmente distinto. Y luego en ésa, en la otra, en la que mandaron al diablo con la bolsa del mandado, mujer de papel, corazón de cartón, con su tiara rota y demasiado colorete. Con una de ellas aprendí a soltar el humo del Marlboro como mujer fatal, mientras hablo de pasión ('I am your puppet'), pañales y welfare. ¿Qué palabras había entre 'Puppet', 'Passion', 'Pampers'? Y luego estaba Rosemary, que no sabía si estudiar bienes raíces o danza. Batiendo sus largas pestañas en la parada, estirando sus largas piernas en el autobús. En el bar, a veces algún hombre de pelo gris le paga la copa y le hace una promesa vaga. 'Voy a cuidarte', 'voy a pagarte la mensualidad del carro', 'te llevo directo a tu casa', 'te voy a llevar a cenar'. Ahora soy una bella terrorista y mis ojos flirtean con el que me llevará a Europa por primera vez, hasta que el empujón de una pasajera me trae de vuelta. Soy una turista perdida en Los Angeles y maldigo su multitud". Sabe Marisela Norte que hay gente que sigue su obra desde hace muchos años, que ese público crece con ella, leyendo sus poemas, viendo el espacio de Los Angeles desde un autobús lleno de gentes de todas partes, donde hay que hacerse un espacio, rozarse y, quiera que no, conocerse sobrepasando las barreras de lengua, cultura, edades. "No manejo. En el autobús 40 que tomo a diario para llegar al centro, la conversación cambia con el barrio, del coreano al chino. Hablo con los otros pasajeros en español o en inglés o a medias. A veces pienso que estoy dando vueltas y vueltas escribiendo siempre lo mismo, pero sigo interesada en lo que escribo". Hoy, durante la entrevista en el Moca, un muchacho se le acercó: "Marisela Norte, mi mamá me llevó a verte en el año 92 en un sótano de Long Beach, no me acuerdo dónde". Él toca en una banda de rock y le divierte la idea de reencontrarse con ella. Unos gemelos de la secundaria Roosevelt se le acercaron en el MTA porque vino a su clase hace cuatro años. La primitiva urbana que pasea por un mundo digital Hace 10 años se plantó ante mis estudiantes de español en Whittier College. Nos recitó poemas de la mujer que entra en La Clínica de la Mujer-Tu Clínica Familiar. Nadie le preguntó por el origen de su nombre. -¿Sigue sin querer aprender a manejar? ¿Cómo puede un poeta no reclamar el espacio propio? -El espacio va por niveles. Hay en Los Angeles una ciudad subterránea de inmigrantes indocumentados, como en los cuentos de [la mexicoamericana] Inés Arredondo, luego un río de gente que anda comprando y, si uno alza la vista, arriba las gárgolas mirándonos. -¿En qué ha cambiado su vida? -Casi nada. Hace 10 años comencé a trabajar en el museo, vendiendo los boletos de entrada. Hoy estoy a cargo de la membresía. -Entonces, es una buena chamba para los poetas, esto de trabajar en museos. -A mí me dieron tres días por semana y dos para quedarme en casa escribiendo. Pero escribo fuera de casa. -¿A dónde va para escribir? Las escritoras suelen hablar de un espacio interno, íntimo, de tiempo condensado, como si el espacio externo no fuera suyo. Los altares de Los Angeles Marisela Norte tiene sitios sagrados. Algunos no le funcionan por más que sea poeta. Lleva a la gente a la cafetería Clifftons en la calle siete con la Broadway y los visitantes no se sienten impresionados. Sus papás la llevaban a ella y a su hermano por la autopista 5, pasando por el Goodrich Tire Building que ahora es la Citadel, al Museo de Historia Natural de Los Angeles. "Gratis y me hacía sentir lejos de Los Angeles". Y del zigurat con palmeras, al mastodonte o el dinosaurio, a las chozas y loza de los indios, al jardín de rosas frente a la Universidad del Sur de California. Una tarde de domingo soleado y sin edad de Los Angeles. Pero está aquí. -Su obra figura en The Geography of Home: California's Poetry of Place. ¿Qué es L.A. como espacio? ¿puede darme una anécdota muy personal? -Una tía soltera tenía un Mustang convertible y nos llevaba a los sobrinos, cinco niños, al Calvary Cementery de East L.A., al Mausoleo, y nos poníamos a jugar. Nos hacía sentar junto a una... ¿cómo se dice? ¿toombstone? Escogía una lápida y nos contaba un cuento sobre, por ejemplo, el hombre que se fue a la guerra y no volvió. Imaginaba una vida entera. Ella decía: "Miren esa estatua allí de una mujer que llora apoyando la cara en una mano. En la otra tiene una carta y es del gobierno; su esposo ya no va a volver". -¿Tiene objetos a los que esté apegada? -Los recuerdos son mis objetos. Tengo remordimientos. -Los amigos la ayudan a no sentirse culpable cuando deja de escribir. Lleva 30 años con los mismos, de su secundaria. Teresa, su mejor amiga, es activista, "mi CNN". ¿Es usted activista también? -Soy activista porque llevo cuenta. -¿Y como la pongo, de poeta o de escritora, o de mujer a la que le gusta escribir? -Escritora; el nombre de "poeta" se lo tienen que dar a uno. El escritor refleja la realidad. Hace 17 años escribía una obra de teatro sobre un restaurante y ahora trabajo en uno el domingo y termino mi guión. "En animación suspendida, como una obra de arte" -Para escribir críticamente en Estados Unidos, ¿no hay que sentirse alienado? -Sí la siento [la alienación] y a veces no quiero escribir lo que veo. Una niñita en el autobús con una playera que dice "sexy" y la mamá ni se da cuenta de que los hombres la miran. Uno parado en una esquina de la Broadway con un espejo, mirándose y riéndose solo. -¿No quiere dejar de contemplar a ese tipo de humanidad dolorosa? -No; me hacen falta. Trabajo en un rascacielos sin ventanas y cuando bajo veo al típico abogado con el capuccino de Starbucks en la mano. -En las nubes pero con los pies en la tierra. ¿Se atreve a darme una frase lapidaria? -Necesitamos vivir en un estado de animación suspendida, como una obra de arte, en un estado de encantamiento. Tenemos que triunfar en un amor tan grande, que vivamos fuera del tiempo, desapegados. -Eso aparece en un portal electrónico (www.tropicodenopal.com). ¿Cómo conciliar el desapego y el amor? ¿Qué tipo de hombres le atraen más? -[ríe] Los escritores judíos. -¿Es su vida una serie de coincidencias, de pasar de boca en boca? ¿Cómo fue lo de la traducción al alemán? ¿Lo del CD japonés que oyen en Bélgica? -El libro, que salió por la universidad de Bamberg, incluyó traducción de "976 Loca" al alemán. De ahí grabé un CD para un grupo de japoneses que querían una experiencia de lo que es L.A. por dentro, un "diario interno", a través de 12 poetas locales. Y me metieron a mí y la vendieron a Trance Music de Bélgica donde bailan la versión en inglés de mi "L.A. where a woman is murdered". -Los Angeles, donde matan a una mujer, y se entretienen los japoneses o los belgas. ¿No hay plan en su vida, sólo destino? -Hay plan. Pero en lápiz, como en bosquejo. "Suspendida, como una obra de arte, en un estado de encantamiento", dice el portal electrónico. Marisela Norte queda en el umbral del museo, frente a la calle donde pasa el MTA de East L.A. ** María Eugenia Sáez mayerfmt@aol.com Escritora y editora venezolana (Maracaibo, 1955). Reside en Alhambra (Los Angeles, EUA), donde edita el quincenario Avance. Es historiadora por la Universidad Central de Venezuela y doctora en literatura de los Siglos de Oro por la University of Southern California (Los Angeles). Ha sido profesora universitaria en la UCV y en California. Tiene inédito su libro Don Quijote de Indias, así como diversos relatos de ficción y poemas. === Un cumpleaños como ninguno Miriam Ventura ======================== El Old Chelsea en el bajo Manhattan no deja de ser una incógnita, cuya simbología y señas personales puede ser reconocida con tan sólo una mirada al oeste de Nueva York. Caminarlo es mucho más complejo, pues el legendario down town, desde cualquier parte que se mire, ¡es siempre una suerte de feria! Muchas de sus calles obedecen su fama al oficio de sus moradores, o al tipo de negocios y establecimientos. La 42, denominada "el corazón de NY", es una mezcla de glamour neoyorquino con fama de "bonne apetite", sexy. Y, más de muchísimo más, con exquisitas salas de teatros y museos. Desde la 25 hasta la calle 40, por muchos sindicada como la "industria de la Aguja y la moda". Un poco antes de la 25, la calle 23 es la zona de los nigth clubs, y muchos comercios que subsisten por largas décadas. Abajo, abajo, en la calle 14, con las librerías en español y tiendas varias, cohabitan el olor y el sabor. También los géneros, y cierto encanto de las flores. ¡Eureka! Todas las etnias culinarias, todas las identidades se dan la mano. La calle 15 es un solo muestreo de restaurantes, salas cibernéticas de té y café. Y, justo aquí donde los olores y sabores son internacionales, hace varias décadas vive una pareja de amigos muy especial. Un trovador y artista de la tierra de Gregorio Luperón y un gran poeta de la tierra de Albizu Campos. En la casa de estos artistas, ubicada en la calle 15, en un edificio acogedor, no hay secretos. Alfredo Villanueva y Abersio Núñez son compañeros, y amigos que han adquirido fama de excelentes anfitriones. Este recinto de artistas está ubicado en esa zona de olores y sabores del bajo Manhattan. Normal que se coma bien en casa de Alfredo y Abersio. Es 16 de octubre, por supuesto en Nueva York. Con lluvia para variar, estos creadores abren una vez más las puertas de su casa con ventanales a la 8th avenida. La increíble colección de cristalerías y de búhos de ambos sonríen barrigonamente a los invitados. Al poeta Alfredo Villanueva Collado se le cantó a todo pulmón: Feliz Cumpleaños y esto fue a ritmo de cantejondo, de pachanga y guagancó, también de merengue y cumbia. A la celebración de sus 60 acudimos todos. Poetas, coleccionistas, teatristas, académicos, libreros, novelistas y una amplia fauna de creadores. Como haciendo honor al vecindario, la mesa mostró su mejor cara. Platos exquisitos de todas las nacionalidades de cuantos estaban presentes. A Abersio y Alfredo les encanta el buen comer, así que todo el mundo llevó algún presente culinario. Y la mesa parecía, culinariamente hablando, la sede de las Naciones Unidas. Y Mirna Nieves: "Ay, Miriam, ya no puedo más, esto está riquísimo, no sé qué hacer, pero hay que probarlo". Ercilia y Julio Alvarado con su combinación dominico-colombiana, aportaron su suma de banderas y de amores. La música fue punto de encuentro obligado. Al poeta Alfredo Villanueva sólo le bastaba exclamar: "Yo quiero, mambo. Ay, ay , yo quiero mambo", para que Rosita Velázquez, gran amiga de los escritores, destacada profesora del Colegio Comunal Eugenio María de Hostos y, particularmente, una mujer de armas tomar en asuntos de baile, inmediatamente convidara a todos. Así los chicos de Librería Lectorum, estaban a la orden del día con la música, con el mambo y el son acuesta. Y, se armaba el círculo. ¡Anja!, salvadoreños, peruanos, venezolanos y cubanos pedían sin rubor "pero ven acá, dame más, más cha cha cha". No había visto jamás tantos intelectuales, artistas, académicos, críticos, juntos, ni en la época de Bailey Ave., y todos al servicio de la música. De repente y por la puerta grande entró Gilberto Santa Rosa: "Que alguien me diga cómo se olvida" (aplausos). ¡Anja! Distante pero cerca, estuvo la increíble Celia Cruz, de todos. Dijo "presente" cuando CDs en mano los chicos de Lectorum, la librería en español más grande del Bajo Manhattan (down town), decidieron preponderar la antillanía en un balance inigualable. Celia Cruz nos hizo vibrar con su versión de I will survive, de Gloria Gainor: "Yo viviré", nos decía a viva voz Celia. Y esa sentencia tan verdad se notaba en los cubanos de distintas generaciones e ideologías allí congregados, en los puertorriqueños y dominicanos (sobrevivientes... sí y sí). La versión de Celia fue seguida por los reclamos de quienes pidieron presencia viva de la Gainor. Y entonces se disfrutó I will survive, con dignidad. Ambas versiones eran trasplante vivo del amor por vivir, por el placer en polaroid, por la literatura y la amistad del poeta homenajeado. Pero también por el exilio, por lo transnacional que enriquece, une o separa. Alfredo Villanueva Collado nació en Santurce, Puerto Rico, y confesó que ésta era la versión más contentona y chivirica de su cumpleaños. Villanueva es Ph.D. en literatura comparada y autor de numerosos artículos en Confluencia, Revista Iberoamericana, INTI, Caribbean Review, Hispanófila, Revista de estudios Hispánicos, Explicación de textos literarios, Alba de América y Romance Language Annual, entre otras. Poemarios: Las transformaciones del vidrio (1985), Grimorio (1988), Guerrilla fantasma (1989), En el Imperio de la papa frita (1989), La voz de la mujer que llevo dentro (1990) Pato salvaje (1991) Low Rent (Grove Press, 1994); Hecho(s) en Nueva York: Cuentos (Latino Press, 1994), PoeSIDA (Ollantay: 1996), Noche Buena: Hispanic American Christmas Stories (Oxford, 2000), entre innumerables títulos. El cierre lo marcó con estupendo atrevimiento y belleza Irma Heredia, actriz, cantante y bailarina de flamenco, quien con simpatía y todas las flores de su vestido inmenso nos devolvió la magia inocente, inmigrante de unos cantejondos olvidados, de una herencia española nítida sin intervenciones ni descubrimientos. Y el vino consagró la noche, pero la fabricada champaña pidió permiso al vino, y comparona con su espuma facilitó un brindis mayor y común, por la salud del poeta Villanueva. Y la música de fondo fue "Ojalá que llueva café en el campo" del poeta de la música dominicana Juan Luis Guerra, pedida expresamente por el poeta cumpleañero con anhelo de antillanía, a este pedido se sumaron hasta los amigos chinos invitados por Alfredo y Abersio, a lo que quedó denominado como el cumpleaños más multiétnico y territorialmente ubicado del ambiente intelectual literario. La fiesta se prolongó al ritmo de más música y más vino en un cumpleaños como ninguno. ** Miriam Ventura miralven@aol.com Escritora dominicana residente en Nueva York. Poemas suyos han sido incluidos en el Boletín Federico García Lorca (España) y en la revista Compost (EUA). Ha publicado Claves para fantasmas NY, Poemas de la noche y Acerca del otoño. Ejerce el periodismo en Nueva York y ha obtenido el premio Rafael Herrera de Periodismo. === Ciudades y la Cátedra Rectoral Alexis de Tocqueville ================== === Domingo Alfonso Bacalao (hijo) ======================================== En 1950 el 29% de la población mundial era urbana; en 1965 pasó a ser el 36%; el 50% en 1990 y hacia 2025 podría ser el 60%. La población en las ciudades se incrementa en 250.000 personas al día, lo que equivale aproximadamente a la aparición de una nueva Valencia cada dos semanas. Queda claro con estos números, ha escogido la especie una sede donde vivir. De ahí que no debe parecernos una reflexión vaga o, en su defecto, una pregunta dotada de excesivo acento intelectual, qué tipo de urbes nos convienen, acaso todo lo contrario, es apenas una de las numerosas que debemos formularnos. Si preguntáramos a la gente qué son ciudades, probablemente hablarían más de coches y edificios que de calles y plazas. Y si les preguntáramos acerca de la vida en ciudad, nos hablarían, probablemente, de alienación, aislamiento, delincuencia, atascos y contaminación, más que de sentido comunitario, participación, animación, belleza o placer... probablemente dirían que los términos "ciudad" y "calidad de vida" son incompatibles. Richard Rogers, el arquitecto -entonces doblemente arquitecto- del párrafo anterior, conocido principalmente por obras como el Centro Georges Pompidou en París, el edificio Lloyd's en Londres y padre del concepto de ciudad sostenible, pone en evidencia la formidable paradoja que supone escoger vivir en un sitio que, a final de cuentas, consideramos hostil. Una ecuación que se debe resolver, que hayan devenido las ciudades en estructuras tan complejas y tan poco manejables que se hace difícil recordar que su existencia se justifica para satisfacer, ante todo, las necesidades humanas y sociales de las comunidades. Rogers propone tres ideas sustanciales: la relación entre ciudad y política, la distancia del satélite como alejamiento adecuado para ver mejor el sistema de ciudades, y la relación entre belleza, espacio público y calidad de la ciudad. Sugiere, así mismo, la primacía del proyecto público, a veces gran proyecto, a veces detalle urbano, sobre el mercado, frío y muchas veces desprovisto de la estética integrista. La Cátedra Rectoral Alexis de Tocqueville, adscrita a la Alcaldía de Valencia, dedicada a hacer reflexiones y producir teorías urbanas y de calidad de vida para Valencia, copia ese modelo, pues visualiza la ciudad moderna como creación de un sector privado altamente motivado que se inscribe en una visión de largo aliento propuesto como marco y/o referencia por el sector público. Si es cierto que las migraciones apuntan al hecho urbano, como se desprende de la data antes mencionada, ¿por qué dejar al azar la expansión de las ciudades? Mejor aun, ¿por qué negar a las generaciones futuras de valencianos una capital en mejores condiciones de las que hoy tenemos? La ciudad irá bien si se reducen y transforman todos y cada uno de sus espacios sin sentido, si se logra un verdadero equilibrio entre espacios públicos y privados que acabe, de una vez y para siempre, por ejemplo, con esos gigantescos lotes hechos urbanizaciones apenas dotadas de una pequeña, ridícula más bien, franja de área verde, aceras enjutas y ningún sentido arquitectónico, que tanto nos recuerdan la incuria gubernativa del pasado con su ornamental estilo de devastación nuclear. Debido a la alta densidad que se espera para nuestras ciudades, mandan los tiempos que vivimos, agregar a la belleza, al sentido y a la proporción de las mismas, prudencia. Prudencia en los términos expuestos por Pasqual Maragall (presidente de la Generalitat Catalana), en el diseño de los edificios y de los barrios (zonas residenciales para nosotros) pues "antes un teatro era un teatro y una fábrica una fábrica, ahora es posible que esta fábrica acabe siendo teatro o centro cívico". ** Domingo Alfonso Bacalao (hijo) domingobacalao@netuno.net.ve Abogado y ensayista venezolano (1968). Artículos suyos son constantemente publicados en revistas, diarios, semanarios y otros medios de comunicación impresos y electrónicos de Venezuela y otros países. === Héctor Torres, editor de Ficcionbreve.org ============================= === Un sitio sin calidad es un hermoso cascarón vacío ===================== === Entrevista por Jorge Gómez Jiménez ==================================== (Nota del editor: sus colegas en el taller de narrativa del Celarg lo apodaban "el shamán" por su habilidad para pronunciar sentencias. Edita en Internet, desde hace seis años, el sitio Ficción Breve Venezolana, y cree firmemente en que el papel y el silicio serán algún día vías simultáneas para la edición de literatura. "Los escritores jóvenes de Venezuela le dedican cada vez más tiempo a la corrección de textos y menos tiempo a la bohemia", sentencia como para no perder el hábito. Se llama Héctor Torres y es uno de los editores digitales más importantes del segmento venezolano de la red). Hace más de treinta años, Michael Hart hacía historia enviando a una docena de personas, por correo electrónico, la Declaración de Independencia de Estados Unidos. Con ello no sólo quedaba fundado el Proyecto Gutenberg: literalmente estaba naciendo el libro digital. La difusión de literatura a través de Internet cobra cada día un espacio mayor en el ámbito literario general y, por supuesto, aunque ha heredado muchas de las dificultades de aquél, incorpora al oficio del editor nuevos mecanismos y nuevas expectativas. Pero el entorno digital mantiene intacta una característica del tradicional: surgen muchas publicaciones que se quedan en el camino. Al parecer, un altísimo porcentaje de quienes se aventuran en la edición digital ignora los tropiezos que le esperan; por ello, el que una publicación en Internet sobreviva a través de los años es indicio de que hay alguien detrás de ella que se lo está tomando en serio. Seis años lleva en línea Ficción Breve Venezolana (http://www.ficcionbreve.org), el más importante directorio de narradores de Venezuela en Internet. Definirlo como un directorio es injusto; digamos que se trata de una antología in progress que ofrece al mundo una muestra solvente de la narrativa venezolana. Quien tras FBV se toma las cosas en serio es el escritor caraqueño Héctor Torres. Nacido en Caracas el mítico año de 1968, Torres inició estudios de informática pero finalmente se dedicó a la literatura y a la composición musical. A principios de los años noventa se radicó en el estado Aragua, a ochenta kilómetros de la capital venezolana, donde rápidamente estableció contacto con el grupo Senderos Literarios, que en aquellos años desarrollaba una labor solitaria como editorial alternativa de la región. En 1997, Torres desarrolló el sitio Letras de Aragua, que ofrecía al público textos de autores de la región. Tal experiencia constituyó la base inmediata para la creación, en octubre de 1999, de FBV, en una primera edición que incluyó seis relatos y una entrevista al escritor Eduardo Liendo, autor, entre otros textos, del clásico contemporáneo El mago de la cara de vidrio. Desde entonces, FBV ha crecido con paso firme. Torres regresó a Caracas y allí ha construido un imponente archivo digital con fichas y textos de cerca de 250 escritores. "El registro de autores de FBV crece hacia delante y hacia atrás", acota refiriéndose a que, en la actualidad, FBV ofrece también materiales de autores de todo el siglo XX. Aunque catálogos de este tipo nunca se completan, Torres apoya parte de su trabajo en la expansión de la cual se hacen vehículo muchos de los autores incluidos. "Actualmente requerimos penetrar más algunas regiones venezolanas para acceder a los autores que hacen vida en ellas. No obstante, autores de todo el país se encuentran en nuestro catálogo, y esa presencia regional seguirá creciendo paulatinamente". Torres explica que, pese a ello, se hace difícil contactar a todos los autores que él quisiera incluir en FBV. "La dificultad de contactar a ciertos autores, sea porque no tienen correo electrónico, sea porque llevan un estilo de vida apartado, o por alguna otra razón, imposibilita sentirse totalmente satisfechos con el catálogo. Importantes e involuntarias ausencias serán siempre el reto de nuestro meta. Sin embargo, la búsqueda suele generar hallazgos satisfactorios". Aunque los criterios de FBV para incluir nuevos autores obedecen, según Torres, "a inevitables prejuicios como lectores", existen dos criterios básicos. El primero es incluir a cualquier autor que haya pasado por filtros previos, como concursos literarios, inclusión en antologías tradicionales o publicación a cargo de alguna editorial. El segundo es más subjetivo: "En general creemos en la narrativa que cuenta una historia, y que atrapa al lector con pericia cuando la cuenta. Por lo general, cuando un autor nos envía varios cuentos, solemos escoger el que podría interesar a un lector no académico ni especializado. Generalmente son los autores los que deciden qué es lo que hablará por ellos en FBV, pero deben tomar en cuenta que allí conviven más de doscientos textos; es decir, hay mucha oferta para el lector, mucha competencia para su escogencia. Sólo en caso de un autor que envíe textos no acabados, solemos rechazarlos, y termina siendo por su beneficio". El editor electrónico Así que Héctor Torres es un narrador venezolano devenido circunstancialmente en editor digital, ambos oficios muy relacionados pero que, en su caso, establecen una pugna tras la cual él se las ingenia para hacerse de tiempo suficiente para ocuparse de ambos. -A los creadores de sitios literarios en Internet suele proponérseles el debate sobre la vigencia del libro. ¿Por qué se crea un sitio literario en Internet? ¿Tienes problemas con el papel, con la letra impresa? -No, supongo que un sitio digital y un sitio impreso tienen similares objetivos y similares funciones. En todo caso, tienen diferencias inherentes a su formato: un sitio digital es menos costoso de distribuir y tiene más alcance; en contraposición, tiene más dificultades para obtener ingresos por la vía de la publicidad. Sin embargo el medio digital es idóneo para el perfil de FBV, porque permite que la extensión de cada actualización sea variable, además de que se puede mantener actualizada la ficha de cada autor agregando nuevos datos. En cualquier caso, no creo que el formato digital sustituya al impreso, y sospecho que más temprano que tarde perderán esa aureola de feroces antagonistas, para conformar las vías posibles, y simultáneas, de la edición. A juicio de Torres, la edición en papel y la edición en bytes se topan en un punto de convergencia: difundir la obra literaria en función de los parámetros establecidos en su creación, parámetros que, en el caso de FBV, abarcan toda la narrativa venezolana. Tanto en el medio digital como en el tradicional se debe dedicar, explica, mucho tiempo y esfuerzo para producir los contenidos. "Aunque el diseño es vital en ambos formatos, sin un contenido de calidad el sitio se convierte en un hermoso cascarón vacío, valga el lugar común. Eso, en el papel o en los bytes. En fin, las revistas digitales de literatura son revistas de literatura, y generalizando más, son publicaciones periódicas, por lo que tienen en común con sus pares impresos todo lo que en esencia tienen de publicaciones". -En un reciente editorial de FBV hablas de condiciones adversas. ¿Cómo se sostiene FBV? ¿Tiene sentido mantener un sitio como este si le genera pérdidas económicas a quien lo edita? -FBV debe ser cuidadosa con el tema de la publicidad, por ser legalmente una asociación civil sin fines de lucro. La búsqueda de los recursos necesarios se orienta entonces al establecimiento de convenios de patrocinio, preferiblemente con la empresa privada. De hecho, desde el año pasado contamos con el patrocinio de Econoinvest. Estos aportes, aunque importantes, no son suficientes para cubrir todos los gastos operativos de una revista mensual que realiza entrevistas, reportajes y noticias en general, además de la preparación de los textos de opinión y creación y otras actividades como contactar a los autores, dedicar tiempo a las actualizaciones. Por tanto nos encontramos en la búsqueda de otros patrocinantes que permitan sostenernos. Entre 2000 y 2001 Torres siguió el taller de narrativa del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (Celarg, http://www.celarg.org.ve), bajo la dirección del escritor Ángel Gustavo Infante. Estos talleres son muy respetados en Venezuela y acaban de cumplir treinta años de desarrollo. Los colegas que acompañaron a Torres durante ese año le llamaban, en virtud de su habilidad para pronunciar sentencias, el shamán. Y ahora sentencia, en relación con el aspecto económico de las revistas literarias, que quien edite una "y esté pensando básicamente en la rentabilidad del negocio, debería intentarlo con una revista de un público más masivo, como una revista de modas o de farándula. Se edita literatura con una dosis de pasión y de paciencia para saber que se puede llegar a cubrir los gastos, pero nunca será un boom editorial, dado que se trata de un público minoritario. Los sitios sobre ventas de autos o noticias de ricos y famosos de seguro tienen suficientes visitantes para ser rentables, pero no sería eso lo que me gustaría hacer". -¿Mantiene FBV relaciones con el mundo real? -No podría ser de otra manera. De hecho, FBV se afinca en la relación directa entre lectores-editores-autores para generar información de interés. En el sublime mundo de la creación literaria, la edición es el necesario mundo real, el hipotético y anhelado espacio en el cual el autor ganaría dinero por lo que hace (tal como los médicos, los plomeros, los taxistas y los arquitectos); por tanto, es nuestro deber despertar el interés de los potenciales compradores de libros, que es, a fin de cuentas, el objeto de comercio que permitirá algún día a los autores vivir de su obra. De tal manera, la relación de FBV con el mundo real es necesariamente absoluta. Cada vez se orienta más a acercar al lector al consumo del libro. La narrativa venezolana Torres es, además de uno de los más importantes editores digitales de Venezuela, un prolífico narrador que ha publicado ya los libros de cuentos Trazos de asombro y olvido (1996), Episodios suprimidos del Manuscrito G (1998) y Del espejo ciego (1999). Por otra parte, ha sido incluido en diversas antologías, como Voces nuevas del Celarg (2005) y Cartas en la batalla (Alfadil, 2004). Y, por supuesto, en una antología digital, Siete (http://www.badosa.com/ebooks/m010/), que en formato PDF publicó en 2002 la pionera de la edición digital en español, Badosa.com. Un hombre, pues, con un pie en el silicio y otro en el papel. -Teniendo en Internet el catálogo más extenso de autores del patio, nos parece invaluable tu diagnóstico de la literatura venezolana contemporánea. -Aunque algunos críticos piensan lo contrario, la literatura venezolana se encuentra en un buen momento. A falta de nombres que en el pasado se convirtieron en referencia de Venezuela en el mundo, y cuando digo esto pienso en Gallegos, en Ramos Sucre, en Úslar Pietri, en Salvador Garmendia, y en Adriano González León, todos, en su momento, referencias de nuestra literatura, a falta de tales nombres los escritores jóvenes están adquiriendo cada vez mayor conciencia del oficio. Cada vez le dedican más tiempo a la corrección de textos y menos tiempo a la bohemia. De hecho, esas historias de escritores agregados culturales y embajadores nos suenan a las nuevas generaciones como desvaríos de viejos alcohólicos. Torres concede especial importancia al trabajo que los autores venezolanos desarrollan actualmente en el exterior, asentados en bases estrictamente literarias y con la misión autoimpuesta "de vencer la apatía con que son tratadas nuestras letras en el mundo de habla hispana, y vencerla con buena literatura". -Nuestros autores cada vez se interesan más por concursar en el extranjero. Cada vez tienen más conciencia de que el mercado editorial es difícil. Tenemos en contra provenir de un país que no tiene el prestigio, aunque sí la historia, que sí tienen otros, como Argentina, Colombia, México y Chile. Cada vez es más común ver a autores venezolanos en las plicas ganadoras de concursos internacionales: desde el premio Jorge Luis Borges ganado por Oscar Marcano hasta el Fernando VIII obtenido por Fernando Cifuentes, o el más reciente Casa de América ganado por una jovencísima Enza García, son muestras fehacientes de una mayor conciencia del oficio. Si a eso le agregamos que el venezolano deja de negarse como colectivo, es posible que pronto tengamos un catálogo de autores de rango internacional en nuestro país. -¿Conoces en el mundo impreso iniciativas de la envergadura de FBV? -El crítico y académico venezolano Luis Barrera Linares, autor de dos reconocidas antologías del cuento en Venezuela, comentó en una carta que "se trata de un proyecto necesario que nunca antes se materializó por las vías más convencionales". Y sospecho que producir un catálogo que tenga casi 250 autores y alrededor de doscientos textos, y que prometa seguir creciendo al mismo ritmo, sea un proyecto inviable en papel. -¿Qué posibilidades de publicar, obviamente en papel, tiene un escritor en Venezuela? -A pesar de la crisis, de lo poco rentable que es la literatura en Venezuela y de lo escaso del mercado, cada vez hay mayores apuestas por la edición literaria en Venezuela. Todas las grandes editoriales, y las llamadas alternativas, se plantean una determinada cantidad de autores venezolanos al año. Con paciencia y con un trabajo sostenido, siempre será posible publicar. A aumentar esas posibilidades debemos contribuir todos: editores de revistas, editores de libros, medios impresos, autores y público, que es quien debe dar su confianza al autor local. Obviamente, los autores desconocidos tienen que vencer el escepticismo y la duda que despiertan en los editores, quienes tiene como principal objetivo vender el libro, y si el autor es conocido, el riesgo es menor. -¿Cómo se vence el escepticismo del editor? -Ganando concursos (que, a diferencia de lo que se suele decir, aún sin presentar pruebas contundentes, no todos son amañados), buscando espacio en cualquier sitio, digital o impreso, que le dé cabida, en fin, haciéndose de un nombre. No en balde, el ganador de la reciente Bienal de Novela Adriano González León, Milton Quero Arévalo, es un autor inédito, desconocido hasta entonces, residenciado en Maracaibo. Ahora lo publicará Norma. Luego de eso, de seguro no le será difícil publicar en otras editoriales. El escritor ante la ley -FBV ha mantenido una postura crítica ante la delicada situación sociopolítica venezolana de los últimos años y, al menos en el entorno digital, se ha hecho de cierto prestigio en este sentido. ¿Qué evaluación haces de las leyes y reglamentos aprobados o por aprobarse, que inciden sobre el trabajo creativo? -El asunto de las leyes en discusión es delicado. Como en muchas de las leyes aprobadas o por aprobarse lo más preocupante es la ambigüedad, o excesiva discrecionalidad que la aplicación de las mismas podría producir. En el caso de la Ley del Derecho de Autor presentada recientemente a la Asamblea Nacional hay, por ejemplo, dos directivas que ilustran eso y llaman a la suspicacia. Torres hace referencia al anteproyecto de Ley del Derecho del Autor y la Autora y Derechos Conexos (puede revisarse en http://www.asambleanacional.gov.ve/ns2/leyes.asp?id=640), que en agosto del año pasado fue introducido a la Asamblea Nacional de Venezuela -nombre con el que el actual gobierno rebautizó al viejo congreso- y que el 1 de febrero fue aprobado en primera discusión por la mayoría oficialista. -En el título V de ese anteproyecto se estipula que toda obra inédita deberá ser inscrita previamente en un "Archivo de Obras Inéditas" que correrá a cargo de una "Comisión Nacional de Derechos del Autor y la Autora", que protegerá la obra de los autores inéditos. La pregunta al respecto es: ¿tendrá potestad esa comisión para rechazar la inscripción de una obra presentada? No lo especifica. Y el otro caso es más alarmante: el artículo 5 le da al Estado la potestad de declarar "de beneficio colectivo" una obra determinada y en virtud de ello la puede adquirir, luego de lo cual su reproducción por cualquier medio estará supervisada por el Ministerio de Educación y no se podrá comercializar. Según Torres, aunque esta propuesta suena "altruista" lleva implícito un riesgo: reserva para el gobierno la posibilidad de limitar legalmente, constituyendo una censura de hecho, la difusión de contenidos -libros, discos, filmes u otras creaciones- en los que se afecte la credibilidad de los gobernados o se denuncien hechos ilícitos. -Por ejemplo -continúa Torres-, si el gobierno considera "de beneficio colectivo" un libro que recoge testimonios relacionados con hechos que incriminen a uno de sus funcionarios, ¿eso quiere decir que en la práctica lo estaría "recogiendo" de la calle? ¿No sería censura? Para el editor de FBV, la redacción de leyes que pretendan defender los derechos del autor debería hacerse en combinación con las instituciones civiles del gremio, tales como el Pen Club de Venezuela, las asociaciones de escritores, la Sociedad de Autores y Compositores de Venezuela y otras similares. "Ignorar a estos órganos al momento de hacer leyes que inciden sobre el creador podría conllevar a que se le haga más daño que bien", sentencia. "Al menos por desconocimiento". ||||||||||||||||||||||||||| SALA DE ENSAYO |||||||||||||||||||||||||| === Reflexiones desde la crónica ========================================== === El caso específico de Prosa Sadia ===================================== === como camino de reflexión identitaria Marcela Caetano Popoff ====== "Y lo que más le une a cada uno consigo mismo, lo que hace la unidad íntima de nuestra vida, son nuestras discordias íntimas, las contradicciones interiores de nuestras discordias". Miguel de Unamuno, La agonía del cristianismo. Sin lugar a dudas la realidad es, en el más estricto sentido foucaultiano, un abanico abierto a múltiples posibilidades de existencia. En pocos espacios esa premisa puede cobrar materialización tan evidente como en el universo continental que nos convoca. Quizá porque en este espacio el tiempo adquiere dimensiones casi míticas donde pasado, presente y futuro se fusionan en un tiempo único. La literatura y el arte abren las puertas a la crítica y la reflexión y la crítica y la reflexión abren las puertas a la vida. Y, como lo señala Unamuno, nuestras discordias íntimas nos convocan y nos unen porque en esa unión acaban por desvanecerse. Existen aspectos teóricos que pueden convocar desde la literatura y el pensamiento crítico a fin de volver sobre el deseo de ahondar en nosotros mismos como latinoamericanos pero sobre todo como Hombres. Buscar América Latina, la América nuestra en páginas elegidas, ha sido en cierto modo una forma de comunión profunda -intelectual y sensible al mismo tiempo-, una manera de transgredir el tiempo y el espacio y recordar que el mundo no es "ni tan ancho ni tan ajeno". Ha sido esta nuestra conquista más cara y se lo debemos (en gran medida) a la posibilidad que hemos tenido (o al menos al intento de tenerla) de recuperar la memoria, de considerar todas las voces, de abrir nuestro mundo a la polifonía. Carlos Fuentes escribe en una significativa carta a los indígenas chiapanecos en la cual analiza el proceso de la insurgencia: "Todo esto les debemos y algo más: habernos recordado todo lo que habíamos olvidado. Incluso el olvido de nosotros mismos" (1). Ferreira da Rosa (2), sugerente cronista brasileño, nos advierte en su obra, Prosa Sadia, acerca del aún inconcluso y posibilista trabajo de análisis crítico sobre nuestros procesos identitarios, quizá destinados a la perpetua perpetuación. Ferreira da Rosa nos alienta a un desafío: descubrir en el tiempo la salvífica continuidad de algunas circunstancias y recuperar la crónica como un género valioso que nos permita redescubrirnos en la imagen especular que la historia nos devuelve de nosotros mismos. Ciertamente partimos de la premisa de Theodor Adorno acerca de que la masa ya no desconfía de los intelectuales, de la clase letrada, porque éstos traicionen la "revolución" (entendiendo la revolución en sentido amplio como cualquier amenaza a un orden establecido y legitimado) sino porque la desean y en esta actitud revelarían al fin su pretensión de convertirse en discurso regente y hegemónico. Prosa Sadia nos advierte acerca de la capacidad de evitar aquellos miedos propios de las pugnas entre subalternidad/hegemonía, nos devuelve una práctica discursiva en la cual descubrimos la coexistencia de "lo que es" con "lo que debiera ser" en el más estricto sentido aristotélico. Y es precisamente esa coexistencia la invitación perdurable a la reflexión intelectual y a la revalorización de una ética innata, desde una posición teórica y crítica, a la naturaleza humana. Ni el Emilio ni Filosofía del Tocador, el desafío es más complejo, el desafío será siempre la búsqueda del equilibrio. "...porque descendemos de amores incompletos aunque intensos, de memorias intensas aunque incompletas y no podemos heredar sino lo mismo que nuestros antepasados nos legaron, la comunidad del pasado y la voluntad del porvenir..." (3). En Prosa Sadia es posible reconocer esa herencia, reconocer como latinoamericanos la comunidad continental con el pasado y la voluntad, también continental, con el porvenir. Después de todo Cronos no siempre devora a sus hijos, existen ocasiones, como ésta, en que los nutre para el futuro. "Contemplo a America sacudida de Norte a Sul, e do Atlántico ao Pacifico; despertando no litoral e nas cordilheiras, nos campos e nas fabricas... Contemplo a America atravesando o océano, para garantir ao mundo a Liberdade e o Direito. Contemplo a America grandiosa e generosa..." (4). Aquí nos encontramos todavía, buscando América Latina para buscarnos a nosotros mismos. Y quizá buscar América Latina no sea sino recordar -recuperadas para la memoria- los múltiples procesos de conformación de identidad (para los cuales muchas veces hemos caído en aculturaciones peligrosas) lúcidamente omnipresentes en las palabras escritas por Ferreira da Rosa. El brillante crítico y ensayista uruguayo que fue Ángel Rama escribe en sus diarios: "Carta a García Márquez, respondiendo a la lectura de mi ensayo sobre sus comienzos. Emocionado él y yo también. Tenemos la misma edad, hace pocos años que nos conocimos ya adultos, pero no en balde crecimos (en ciudades y países diferentes) en el mismo tiempo histórico cultural. En su formación encuentro huellas, marcas, señales de la mía: son lecturas, proyectos, esperanzas. Por eso es comprensible que pueda seguir de cerca sus años juveniles. Y si los estudié acuciosamente... es porque siempre estuve cercano de él en ese origen popular, en esa impregnación de pueblo que hace su (mi) (nuestra) mayor sensibilidad. Porque no es un problema de ideologías (a veces raramente desviadas de los reales y naturales impulsos del Hombre) sino un problema de sensibilidades. La inclinación a ciertos sabores, ciertos seres humanos comunes, ciertos ámbitos, y ni siquiera eso, porque todo ello puede darse en un hombre (un escritor) sin eso específico que es una sensibilidad y una felicidad que vienen de la inmersión gozosa en el pueblo" (5). Desde algún lugar es posible, partiendo de la lectura de Prosa Sadia, vivir esa inmersión gozosa en el pueblo a la que alude Ángel Rama, es posible experimentar esa inclinación a ciertos seres humanos comunes y ciertos ámbitos, y sobre todo es posible volver una vez más a los procesos de aculturación-transculturación que han marcado los caminos identitarios en nuestro continente, que han silenciado muchas veces los discursos heterólogos, que han impuesto lo monológico antes que lo dialógico, y lo dialógico, finalmente recuperado con más vitalidad que nunca, se ha impuesto en nuestros debates críticos, en todas las voces que a partir de estos textos buscan todavía una América Latina que nos permita reformular la máxima riveriana: "para encontrar dentro de nosotros lo que necesitamos" (6), que nos permita, al fin, redescubrirnos una vez más en nuestra posibilista condición humana. En la teoría de Althusser, el individuo "subjetivado" es precisamente el individuo "sujetado", vale decir que la conquista de la libertad y la autonomía radica precisamente en la obediencia al sujeto o la Ley. Cuando el sujeto se considera más próximo (ilusoriamente) a la conquista de su libertad es precisamente en el momento en que, introyectada la Ley, ésta llega a cumplirse naturalmente y en ausencia de cuestionamientos. De modo que la propia subjetividad humana sería la forma más original del auto-encarcelamiento. Claro que, desde lo freudiano, esto es simplemente un aspecto dado que la rebelión contra la Ley o el sujeto que disciplina podría acontecer (y de hecho acontece) en caso de que las exigencias fueran devastadoras. Por consiguiente la Ley podría ser transgredida por la propia libertad en la construcción de un eventual espacio contestatario. Tal vez uno de los aspectos más importantes a que Prosa Sadia nos convoca es precisamente al poder contestatario frente a diversos discursos hegemónicos de disciplinamiento devastador y a una pregunta inquietante por auto-referencial, ¿es dicotómica o dialéctica la compleja relación entre lo subalterno y lo hegemónico entre lo disciplinante y lo disciplinado, entre la pugna por el ejercicio del poder y la resignada situación de quien no llega a ejercerlo? Notas 1. FUENTES, Carlos, Nuevo tiempo mexicano, Aguilar, México, 1995, p. 174. 2. Francisco Ferreira da Rosa, cronista nacido en 1864 en Açores, Portugal. En abril de 1878 se radica en la ciudad de Río de Janeiro, donde desempeñaría tareas docentes. Muere en 1952 en la ciudad de Río de Janeiro. Entre sus obras se encuentra el conjunto de crónicas Prosa Sadia al que hacemos referencia en el presente trabajo y en el cual -en el marco de ocho volúmenes que completan la colección- se reúnen escritos publicados en diarios y revistas de Brasil y Portugal. 3. FUENTES, Carlos, Los años con Laura Díaz, FCE, México, 1999, p. 320. 4. FERREIRA da ROSA, Prosa Sadia, Gráfica Sauer, Río de Janeiro, 1940, p. 79-80. 5. RAMA, Ángel, Diarios 1974-1983, Trilce, Montevideo, 2001, p. 38. 6. RIVERA, Diego, "Diego pintado por sí mismo", en Diego Rivera y la salud, Issste, México, 1986, p. 13. ** Marcela Caetano marcelacaetano2387@hotmail.com Investigadora uruguaya (Montevideo, 1972). Licenciada en letras por la Universidad de la República (1998) con una maestría en literatura latinoamericana (2001-2003). Autora del prólogo a Glosario de afronegrismos uruguayos (El Galeón, Montevideo, 1999), de Alberto Britos Serrat. Trabajos suyos han aparecido en publicaciones como Dramateatro (http://www.dramateatro.arts.ve) y en el Boletín de la Red de Universidades Abiertas (Unitres) de Montevideo. Ha participado con ponencias en diversos eventos de importancia en Latinoamérica, como el IV Congreso Internacional de Literatura Latinoamericana (México, 2002) y las Jornadas Andinas de Literatura Latinoamericana (Lima, 2004), entre otros. Dicta conferencias en centros educativos y culturales de su país, donde además ha coordinado talleres literarios. === Deutsches Requiem o Borges y su pasión por el Laberinto =============== === Osiris Vallejo ======================================================== Piense en un ser horrible. Haga el intento de transfigurarse, de convertirse en otro. Suponga que más allá del rostro, más allá de esa máscara con que nació y que el espejo recuerda y reconstruye cada día, se oculta un demonio. Pero no un ser víctima de los azotes continuos de su propia conciencia, sino un demonio que asume su condición con toda la naturalidad del mundo; que justifica cada acto, por horrible que parezca, como si fuera el único acto posible. ¿Qué le parece el ejercicio? ¿Difícil, espantoso, horrible? Al realizar el ejercicio anterior, cabría preguntarle qué le ha quedado: ¿el horror de quien se acerca a un abismo profundo o la curiosidad de quien se ve al espejo? La respuesta depende de su habilidad para colocarse más allá del bien y del mal o de su inexorable claudicación ante la imponente intensidad de las imágenes que perciba. Pocos son capaces de, a la hora de juzgar, colocarse en una posición de absoluta frialdad analítica. Muy pocos, repito, son capaces de tan saludable tarea. Uno de esos pocos es Jorge Luis Borges. Con gran agudeza, utilizando la razón como principal recurso, Borges hurga sigilosamente, muy a su manera, por entre laberínticas existencias de personajes representativos de la esencia humana. Fijémonos en uno de los relatos más característicos de Borges con el objeto de acompañarlo a una de esas aproximaciones al laberinto de la conciencia humana. Deutsches Requiem es el relato al que me refiero. Es esta una de las piezas literarias en que este escritor universal penetra con más agudeza por entre los laberínticos rincones del alma humana. El relato está narrado en primera persona. Otto Dietrich zur Linde es el narrador-personaje. Soldado defensor de la causa nazi, hecho prisionero tras el fracaso alemán en la segunda guerra mundial, es condenado a muerte "por torturador y asesino" (1), según lo manifiesta él mismo. Ya al umbral de la muerte, zur Linde enjuicia su vida, tomando como epicentro su participación en la guerra y, más importante aun, su adhesión absoluta al sueño nazi. El lector poco avisado corre el riesgo de dejarse confundir por este relato de Borges. El título mismo está concebido para despertar suspicacias. Habrá quien piense que el autor de este texto toma partido por la causa nazi. Pero no. La mayor virtud del Borges escritor consiste precisamente en plantear posibilidades; inducir al lector a un gesto de interrogante perpetua, o circular, para usar un término borgiano. Borges pone a Dietrich zur Linde a defenderse con buenas razones... y, claro, no podría ser de otro modo. Sería una patente falta de honestidad intelectual hacerle trampas a los personajes por el solo hecho de que no comulguemos con sus posiciones o ideas. He aquí una de las pruebas de fuego de todo escritor, y Borges sale de ella invicto. Se sabe que existe una vasta literatura en que Borges se convierte en defensor del pueblo judío. Sin embargo, en el relato al que aludimos parece convertirse en cómplice del torturador y asesino zur Linde. La explicación a dicha discrepancia hay que buscarla, insisto, en la honestidad intelectual de Borges. En Deutsches Requiem, a través de Otto Dietrich zur Linde, Borges se ve al espejo y contempla de aquel lado el trágico destino, no ya del hombre alemán, sino del hombre en sí. Se pregunta a través de la literatura qué parte del mundo murió con el fracaso alemán. Yo no condeno a Borges por esa pregunta, así como no lo condeno por ninguna otra. Este relato no es otra cosa que una interrogante visceral, un intento (y claramente un acierto) de penetrar un laberinto donde copulan dragones y palomas. Dietrich zur Linde traza las líneas argumentales de su tragedia personal (símbolo indudable de una tragedia mayor) con tal profundidad que ningún lector imparcial (ave rarísima) la tomará por superflua o poco fundamentada. Cuenta el personaje sus antecedentes familiares, es decir, una muy comprometedora genealogía, que es ya, en cierto modo, sin que por esto adoptemos una actitud determinista, presagio de su ulterior destino. A esto se suma una sucesión de elementos acumulativos en la conciencia de zur Linde que constituyen, en cierto modo, una parábola sobre el surgimiento del nazismo. "Durante el juicio (que afortunadamente duró poco) no hablé; justificarme, entonces, hubiera entorpecido el dictamen y hubiera parecido una cobardía", dice zur Linde. De esa manera retrata lo que es, sin duda, una obsesión alemana: la adhesión espiritual a un ideal de fuerza o poder y el rechazo casi patológico a la debilidad. Más adelante, zur Linde repetirá esta misma idea, aunque con otras palabras. Otro elemento de la sucesión antes mencionada que hemos de tomar en cuenta (pensando siempre en Alemania como trasfondo) es el contacto de zur Linde con lo más esencial de la filosofía alemana. He aquí su testimonio: "Hacia 1927 entraron en mi vida Nietzsche y Spengler". Nótese que dice "entraron en mi vida", apuntando así a la influencia decisiva que ambos tuvieron en él. Para nadie es un secreto que Nietzsche, especialmente, fue, si no un arquitecto, al menos un factor catalizador del delirio de grandeza alemán. En este relato, como en tantos otros de Borges, cada frase, cada palabra es fundamental. Cada concepto, cada acto es una pieza decisiva. Ninguna hoja de otoño desciende del árbol en vano. La alusión a Nietzsche y a Spengler no es casual. La aparente sugerencia de Borges es que debe tomarse con seriedad la influencia histórica de la filosofía alemana en el papel jugado por el pueblo alemán en tiempos modernos. Aunque, por supuesto, no vamos a cometer la idiotez, que tampoco incurrió en ella Borges, de supeditar la violencia o las ansias de gloria del alemán a la literatura de Nietzsche. Lo que sí debe subrayarse es el insoslayable vínculo entre ambas cosas. En este relato abundan los ejemplos que atan, irremediablemente, la vida de zur Linde con la concepción nietzscheana del superhombre (2). "No pretendo ser perdonado, porque no hay culpa en mí", declara zur Linde. Cómo no pensar aquí en el muy conocido concepto de Nietzsche del criminal que no está a la altura de su acto. Para este filósofo alemán (y esto se desprende de su entera filosofía), zur Linde sería el criminal ideal, que sí está a la altura de su crimen. Éste que hemos citado es el vínculo más estrecho entre la filosofía y el surgimiento del torturador y asesino zur Linde o, lo que es lo mismo, entre filosofía alemana e historia alemana. De manera que este relato genial nos proporciona una especie de macro-visión histórica que nos hace comprender mejor el drama de Alemania. Otro acierto de Borges en su tránsito por el laberinto de la conciencia de su narrador-personaje es la relación alemano-judía, vista a través del encuentro entre zur Linde y el personaje David Jerusalén. Si zur Linde representa al pueblo alemán, el poeta Jerusalén encarna al pueblo judío. Pero, ¿por qué escoge Borges la figura de un poeta para representar al pueblo hebreo? Dos posibles respuestas, que se contraponen entre sí, pudiéramos citar. La primera tiene que ver con la imagen del poeta ante el poder. Es decir, la condición de poeta como encarnación de la debilidad, de enfermedad del espíritu. La segunda apunta a algo absolutamente distinto, como ya he indicado: la poesía o el poeta como ente de fuerza y, por lógica consecuencia, como peligro amenazante. Aunque el contexto del relato señala a la primera de las posibilidades como la más factible, veo en la segunda cierto fundamento, o casi tanto fundamento como en la primera. Me parece que a esto alude también Borges cuando presenta a David Jerusalén como poeta. La verosimilitud que le atribuyo a lo antedicho tiene su raíz en otros relatos de Borges. Bastaría con valernos de la brevísima Parábola del Palacio (3), en la que se plantea la posibilidad de que la poesía (y en general la palabra) sea capaz, incluso, de borrar el universo y transfigurar su esencia, convirtiéndolo en un mero (¿?) símbolo. Es también seductora otra conclusión de Borges. Esta conclusión se refiere al asunto de la relación que el alemán zur Linde tuvo con el judío David Jerusalén, a quien el primero tenía órdenes de destruir y, en efecto, destruyó. "Ignoro si Jerusalén comprendió que si yo lo destruí fue para destruir mi piedad. Ante mis ojos no era un hombre, ni siquiera un judío; se había convertido en el símbolo de una detestada zona de mi alma. Yo agonicé con él, yo morí con él, yo de algún modo me he perdido con él; por eso fui implacable", afirma zur Linde. Aquí Borges nos toma del cabello y parece decirnos: "Miren allá abajo; observen con minucioso rigor la génesis del espanto". Esta cita ahonda más que cualquier otra por entre los escondrijos del alma de zur Linde, o sea del alma nazi. Es, quién lo duda, minucioso retrato de la esencia de este alegórico narrador personaje. A través de todo el relato se halla presente una constante discursiva que se parece mucho al determinismo, pero que no lo es realmente. Se trata de la concepción borgiana de que cada cosa es lo que es porque no puede ser otra cosa. Fíjese el lector en esta cita en que Borges pone en boca de zur Linde varios ensayos explicativos sobre por qué el personaje ve su derrota, el fin, el ocaso de la pesadilla nazi, como algo casi deseable. "...me satisface la derrota, porque me sé culpable y sólo puede redimirme el castigo... me satisface la derrota, porque es un fin y estoy muy cansado... me satisface la derrota porque ha ocurrido, porque está innumerablemente unida a todos los hechos que son, que fueron, que serán, porque censurar o deplorar un solo hecho real es blasfemar del universo". A la luz de esas aseveraciones, surge de entre las brumas de la conciencia de zur Linde y, claramente, del ingenio de Borges, una conclusión terrible: en un entramado psicológico como el que plantea Borges, el verdugo es tan inocente de su crimen como lo es la víctima. Cada personaje es lo que es porque no puede ser otra cosa. Estos juegos de Borges tienen como raíz explicativa la clara intención de hurgar minuciosamente en el laberinto de la conciencia humana. De manera que, planteadas las cosas del modo antedicho e insistiendo, naturalmente, en que esta pasión de Borges por el laberinto es en él casi una obsesión, queda, en consecuencia, casi establecido que Borges el narrador, el intelectual, el filósofo, el artista, no toma partido más que por el proceso creativo, por el arte, por la honestidad intelectual, por las ansias incontenibles y desesperadas de entender al Otro. Notas 1. Jorge Luis Borges, El Aleph, Alianza Editorial, España, 1999, pp. 93-103. Todas las alusiones al relato Deutches Requiem remiten a la misma fuente. 2. Véanse dos textos fundamentales de Nietzsche: Así hablaba Zaratustra, Biblioteca Edaf, España, 1985 y La voluntad de poderío, Biblioteca Edaf, España, 1981. 3. Jorge Luis Borges, Narraciones, Cátedra, Letras Hispánicas, 1994, p. 136. ** Osiris Vallejo opgv195@aol.com Escritor dominicano (1971), residente en Estados Unidos desde 1990. Escribe cuento, novela y ensayo. Fue finalista del Concurso Internacional de Cuentos patrocinado por Profesionales y Estudiantes Colombianos en el Exterior (PECX) con "Parábola de un tránsfuga" y recibió mención de honor en el concurso Virgilio Díaz Grullón (2002) por su relato "Mauritania era otra historia". Además ha recibido el segundo premio del Concurso Internacional Casa de Teatro (2003) por su cuento "Cicatriz". Textos suyos han aparecido en las revistas Hybrido y Dominí y en el periódico Siempre, de Nueva York. Su libro Cicatriz contiene los cuentos mencionados, entre otros relatos. Tiene una licenciatura en ciencias sociales del City College of New York. === La traición iniciática de Silvio Astier Mario Amengual =========== 1 Es difícil decir algo que valga la pena sobre Roberto Arlt que no haya dicho Onetti en su inmejorable y sincero prólogo a El juguete rabioso (1), modesta y poética novela que sobrevive a las modas editoriales. Al menos me queda la simple satisfacción de comentarla, siguiendo sus caminos de fracasos aleccionadores, frustraciones insuperables, dilemas éticos y poesía de arrabales. Silvio Astier es el héroe adolescente, iniciado por un viejo zapatero andaluz en los deleites y afanes de la literatura bandoleresca, que sirvió a Roberto Arlt para expresar su oscura y lúcida alma argentina. Sueña Silvio con ser bandido y estrangular corregidores libidinosos, enderezar entuertos, proteger viudas y ser amado por singulares doncellas. En esa admiración por los malevos bondadosos se encompincha con Enrique Irzubeta, en cuyo elogio puede decirse que un bronce era más susceptible de vergüenza que su fino rostro, y fundan orgullosamente un club de ladrones (más bien de rateros, diríamos los venezolanos) al cual incorporan, pocas semanas después, cierto Lucio, un majadero pequeño de cuerpo y lívido de tanto masturbarse, todo esto junto a una cara tan de sinvergüenza que movía a risa cuando se le miraba. Adolescentes, al fin y al cabo, le dan a sus raterías y a su club una solemnidad acorde con sus cabezas soñadoras, y en el Diario de Sesiones del susodicho club anotan con toda seriedad que el Club debe contar con una biblioteca de obras científicas para que sus cofrades puedan robar y matar de acuerdo a los más modernos procedimientos industriales. El Diario de Sesiones abunda en propuestas similares, que combinan peculiares experimentos científicos destinados a convertirlos en mejores e ilustrados delincuentes. Gozan los tres ladrones el dinero robado, gozan su impunidad ante la gente que ignora sus hazañas secretas y gozan imaginando los ojos con que los mirarían las doncellas si supieran que ellos son ladrones. Sienten que abochornan el peligro a bofetadas y les engrandece el alma el regocijo de quebrantar la ley y entrar sonriendo en el pecado. Pero Silvio Astier, en su pobreza que lo aprieta y entristece, va creciendo con el peso de su propia inutilidad y su destino lo acecha a cada paso, un destino que no empaña sus ojos y no apoca su corazón. Y culmina su primera etapa delictiva con el robo a una biblioteca que fuerza la suspensión de las heroicas actividades del Club de los Caballeros de la Media Noche y, además, Silvio y su familia se mudan a otro barrio por el eterno cuento de que el dueño de la casa les aumentó el alquiler, que como buenos pobres no podían pagar. Signado para estar cerca de los libros, entra Silvio Astier a trabajar en la casa de compra y venta de libros usados de don Gaetano, cuyo local era más largo y tenebroso que el antro de Trofonio. Ese desventurado oficio revuelve las reflexiones de Silvio sobre su vida, sobre su amargo destino de inutilidad y pobreza: ¡Oh, ironía!, ¡y yo era el que había soñado en ser un bandido grande como Rocambole y un poeta genial como Baudelaire! La soledad de Silvio se vuelve arrolladora y desespera por amor, o más bien por amar y ser amado, y en sus pensamientos se mezclan anhelos y amores puros (algunas veces, en la noche, hay rostros de doncellas que hieren con espada de dulzura o que dejan en los huesos ansiedad de amor) y el puro deseo de la carne por encontrar el goce y confiesa que alargaba un brazo hacia mi pobre carne; hostigándola, la dejaba acercarse al deleite. En el colmo de su soledad ansiosa y con el deseo quemándole el corazón y la piel, todo su cuerpo de hombre clama: ¡Y yo, yo, Señor, no tendré nunca una querida tan linda como esa querida que lucen los cromos de los libros viciosos! Algo de cultivada compasión por sí mismo hay en Silvio Astier; llega a abundar en las páginas de El juguete rabioso, pero a la par de reclamos firmes contra la distante y exclusiva riqueza material de pocos. Al mismo tiempo que la calle y el dolor son para él escuelas que apuntan en un mismo sentido. Algo de ello intuye Silvio Astier cuando declara que su alma es baldía y fea como una rodilla desnuda, y busca entre las miserias de las calles y de las vidas turbias con las cuales les toca compartir sus días y seguir su viaje. Sobrevive el adolescente soñador, sobrevive con sus pugnas entre el bien y el mal, enfrenta sus demonios y mira más hondo y ese otro Silvio que puja por salir, a pesar de las dificultades cotidianas y de los sombríos parajes por donde avanza, habla con la fuerza poética que pocas voces alcanzan: Busco un poema que no encuentro, el poema de un cuerpo a quien la desesperación pobló súbitamente en su carne, de mil bocas grandiosas, de dos mil labios gritadores. Las penas de Silvio Astier, necesarias en su vida, de esa vida que durante nueve meses había nutrido con pena un vientre de mujer, las siente necesarias con todos los ultrajes, todas las humillaciones y todas las angustias. Y de pronto esa misma vida se encuentra consigo misma, se complace en ser vivida y con la voz adolescente de Silvio Astier habla el poeta Roberto Arlt (de un gran y extraño artista, asegura Onetti y estoy absolutamente de acuerdo con él): Vida, Vida, qué linda sos, Vida... ¡ah! ¿pero vos no sabés?, yo soy el muchacho... el dependiente... sí, de don Gaetano... y sin embargo yo amo a todas las cosas más hermosas de la Tierra... 2 Silvio Astier, como Álvaro De Campos, lleva en sí todos los sueños del mundo: se imagina ante un congreso de ingenieros exponiendo que las corrientes electromagnéticas que genera el sol pueden ser condensadas y utilizadas; se le afirma la convicción de que puede ser ingeniero como Edison, general como Napoleón, poeta como Baudelaire, demonio como Rocambole; pero esas desmedidas esperanzas, ese optimismo desbordado, chocan con la realidad de su vida y se ve en un futuro lamentable con ropas sucias, zapatos desgastados que apenas cubren sus pies callosos y con juanetes, tocando de puerta en puerta pidiendo trabajo. Silvio Astier verifica la dureza de la vida, la ominosidad de la pobreza; se niega a resignarse a la vida penuriosa que sobrellevan naturalmente la mayoría de los hombres: comienza a saber que su vida es poca cosa, una moneda sin valor en el mercado de las ambiciones y en el dominio de los prejuicios. Fracasa en la milicia, a la que llega convencido de que su ingenio científico le abrirá puertas y le granjeará galones y condecoraciones; fracasa su juguete rabioso, destinado a destruir mayor cantidad de hombres, porque va en contra de todos los principios de la balística; deambula nuevamente Silvio Astier, se aguzan sus sentidos, le emocionan las canciones infantiles que oye de paso en las calles, siente que el tiempo transcurre con paso de animal herido de muerte, siente el dolor de la especie, a pesar de que se aferra a felices imaginaciones egocéntricas y envidia los cadáveres en torno a los cuales sollozan mujeres hermosas. Sin embargo, en su deambular, Silvio Astier percibe el mundo y sus detalles con intensidad, su vida se liga a todo y todo se liga a su vida, aun las apariencias más dolorosas de la realidad humana. Y cuando hace de vendedor de papel (y digo hace porque descubre que en la vida es inevitable actuar), pese a todas sus vocaciones arruinadas, expone con eficiencia una especie de filosofía esencial del vendedor, el gran oficio de nuestro tiempo: Para vender hay que empaparse de una sutilidad "mercurial", escoger las palabras y cuidar los conceptos, adular con circunspección, conversando lo que no se piensa ni se cree, entusiasmarse con una bagatela, acertar con un gesto compungido, interesarse vivamente por lo que maldito si nos interesa, ser múltiple, flexible y gracioso, agradecer con donaire una insignificancia, no desconcertarse ni darse por aludido al escuchar una grosería, y sufrir, sufrir pacientemente el tiempo, los semblantes agrios o malhumorados, las respuestas rudas e irritantes, sufrir para poder ganar algunos centavos, porque "así es la vida". 3 El bajo mundo seduce a Silvio Astier, el bajo mundo lo persigue; no en vano admira a Rocambole. El Rengo encarna ese bajo mundo, un pícaro afabilísimo, del cual se podía esperar cualquier favor y también alguna trastada; el Rengo es para Silvio Astier la única posibilidad de cambiar su destino: necesariamente llega a su vida para que pueda abandonar y trascender su agrio mundo de arrabales bonaerenses. El Rengo le parece, al principio, cuando le confía su plan de robar la casa del ingeniero Arsenio Vitri, el ángel que lo ayudará a romper el círculo infernal de trabajar para comer y comer para trabajar. Pero el espíritu de Silvio Astier es demasiado inquieto, por naturaleza propenso a conocer las profundidades del corazón humano; su espíritu no se confía a las seguridades cotidianas, a las banalidades y certezas que conforman la vida de la mayoría de los seres humanos; el espíritu de Silvio Astier no se conforma con ser el de un ladronzuelo arrogante y satisfecho de sus hazañas mediocres, y por eso debe, porque es su destino, ir más allá del mero protagonismo de las páginas rojas de los periódicos. De pronto una idea sutil se bifurcó en mi espíritu, yo la sentí avanzar en la entraña cálida, era fría como un hilo de agua y me tocó el corazón. -¿Y si lo delatara? Desde ese momento, literalmente crucial, Judas Iscariote se convierte en su ídolo, exclama que puede ser hermoso como él y que la angustia abrirá sus ojos a grandes horizontes espirituales. Desde ese momento los razonamientos de Silvio Astier recorren caminos poco usuales en la literatura y poco aceptados en la vida y costumbres de las apariencias humanas. No es pura justificación de un espíritu bajo e inmundo cuando le dice al ingeniero Arsenio Vitri que hay momentos en nuestra vida en que tenemos necesidad de ser canallas, de ensuciarnos hasta adentro, de hacer alguna infamia, yo qué sé... de destrozar la vida de un hombre... y después de hecho eso podremos volver a caminar tranquilos. Esa afirmación, ese reconocimiento de la bajeza de su proceder, de esa repugnante delación, alberga el rarísimo contraste con una inmensa devoción por la vida y la confirmación de la necesaria existencia del lado oscuro del mundo, de nuestro corazón, de la Historia: ¿acaso no fue Judas Iscariote un traidor necesario para que el mensaje de Jesús perdure? La traición de Silvio Astier lleva aparejada la alegría de vivir y es el comienzo de su vida, no de otra vida. De ahí en adelante sí es Silvio Astier, hacia el horizonte infinito del final de una novela, de lo que los lectores podemos conjeturar sobre lo que será su futuro al término de El juguete rabioso. Se pudrirá el Rengo en la cárcel sin comprender jamás que ser traicionado era indispensable para que Silvio Astier llegara a ser él mismo, aunque esa traición parezca una mancha imborrable y deshonrosa. Y el diálogo final de El juguete rabioso, entre Silvio Astier y Arsenio Vitri, es de los más reveladores y significativos de la literatura latinoamericana (o de todas las literaturas): sencillo, cargado de honradez e inusual franqueza, y por momentos más parece himno que conversación. A donde llega el muchacho traidor es a esa frontera que a veces me parece perdida para la literatura en boga, para las polémicas entre intelectuales, y quizás el aludirla es hoy la mayor (o auténtica) subversión. Yo no estoy loco. Hay una verdad, sí... y es que yo sé que siempre la vida va a ser extraordinariamente linda para mí. No sé si la gente sentirá la fuerza de la vida como la siento yo, pero en mí hay una alegría, una especie de inconsciencia llena de alegría. Silvio Astier ya no es el joven soñador que envidia hazañas ajenas; es el joven que sabe que el dolor y el canto conviven en nuestro corazón, él lo ha descubierto entre los tropiezos de su aventura vital: Todo me sorprende. A veces tengo la sensación de que hace una hora que he venido a la tierra y que todo es nuevo, flamante, hermoso. Encuentra su religiosidad, define su religión: Yo creo que Dios es la alegría de vivir. Y antes ha confesado a Arsenio Vitri, quien lo ve como un monstruo que sólo justifica su inmoralidad, su vocación de Judas: Yo no soy un perverso, soy un curioso de esta enorme fuerza que está en mí. A esa misma fuerza, que pueblan el Canto a mí mismo de Whitman y los Himnos de Hölderlin, por ejemplo, de la que se siente contagiado el ingeniero Arsenio Vitri cuando Silvio Astier se la revela con palabras intensas, se refirió Stevenson en términos joviales y certeros que vale la pena recordar: "Encontrar un hombre feliz o una mujer feliz es mejor que encontrarnos con un billete de cinco libras. Él o ella son focos que irradian buenos sentimientos; y cuando entran a un salón, sucede algo así como si se hubiera encendido una vela de más. No nos importa si pueden o no demostrar la proposición cuarenta y siete; hacen algo más que eso: demuestran, prácticamente, el gran teorema de lo Vivible que es la Vida" (2). Y para alcanzar esa alegría de vivir que lleva a Silvio Astier a proclamar que a veces siente que su alma es del tamaño de la iglesia de Flores, debió recorrer palmo a palmo los vericuetos que habitan sus demonios y en cuyas anfractuosidades vegetan las más bajas pasiones humanas. Es un traidor, pero no reniega de sí mismo ni se excusa lastimeramente ni con cinismo, porque sabe a dónde va: geográficamente hacia el sur, a Comodoro, donde promete conseguirle trabajo Arsenio Vitri; vitalmente hacia ninguna parte, pero lleno de vida ahora, con la única certeza de estar vivo y como protagonista consciente de su epopeya solitaria, con la voz, el asombro y el duro destino que le infundió ese poeta que fue Roberto Arlt, que no pocos han querido descalificar, tildándolo de epígono latinoamericano de Dostoievski. Notas 1. Roberto Arlt, El juguete rabioso, Editorial Bruguera, 1ª edición, Barcelona, 1979. 2. Stevenson, Robert Louis, "Apología del ocio", Juego de niños y otros ensayos, Editorial Norma, Bogotá, 1990. ** Mario Amengual amengual714@hotmail.com Escritor venezolano (Maracay, 1958). Licenciado en Letras por la Universidad Central de Venezuela (1985), es desde 1997 profesor del Taller de Literatura de la Facultad de Agronomía de la Universidad Central de Venezuela. Ha colaborado en las páginas de opinión de los diarios Últimas Noticias, 2001 y El Siglo, así como en la revista ElMeollo.net, y poemas, cuentos y ensayos suyos han aparecido en los suplementos culturales de Últimas Noticias, 2001, El Periodiquito, El Impulso y en Revista Nacional de Cultura e Imagen. Ha publicado los poemarios La arboleda deslumbrante (1991) y El tiempo de las apariencias (Ediciones de la UCV, 2000), además de la novela breve y el poema en prosa El pozo de la historia / Los extranjeros (2001, un solo volumen). ||||||||||||||||||||||||||||||| LETRAS |||||||||||||||||||||||||||||| *** Bizitzamendi Rafael Pérez Ortolá *** El beso Verónica Delgadillo Vargas *** Tres poemas Rubén de Leo *** Al cerrar los ojos Alexánder La Rosa *** Cuatro poemas Paula Winkler *** Seis relatos Emanuel S. H. Marín *** La muerte es muy útil Isusko Larrinaga *** Los Miró Gricel Ávila Ortega *** Tres poemas Oscar Portela *** Noticias de la niebla (extractos) Triunfo Arciniegas *** Poemas Lina Zerón *** Si, sí, sí Abelardo Barceló Amorós *** Poesía repartida (extractos) René Dayre Abella *** Las cenizas del recuerdo Camilo Pequeño Silva *** El poeta en el hotel Juan Ensuncho Bárcena *** Tres cuentos Noelia Rodríguez === Bizitzamendi Rafael Pérez Ortolá ================================= (Nota del autor: en el mundo nos sobran marejadas, tormentas y algarabías, en un variado muestrario. Quien mire Euskadi, España, Venezuela, Palestina, Irak o... mire uno donde quiera. Ante esto se impone volver a las fuentes vitales, esos manantiales que nos puedan abrir a una existencia que podamos escribirla en letras mayúsculas. EXISTENCIA de verdad. En cualquier parte podremos aplicar este BIZITZAMENDI que sólo busca hacer más grandes las letras de la VIDA entre tantas calamidades). *** El monte de la vida Es inevitable pasar dos crestas al inicio de una vida sentida. En origen MENDIUTZ (1) es la partida, idea de Chillida, portal de fiestas. Ya en camino, nos tapan las forestas, la segunda cresta para una vida. Muguerza plantea la tenaz herida, ZALANTZAMENDI (2), las dudas enhiestas. Son encrespadas las olas vitales, muchos focos entre gran algarabía. Entre estos vientos somos los árboles Pensantes, orgullosos, ¡gran ironía! ¿Dónde encontrar unos buenos augures? ¿El buen talante dónde lo encontraría? 1. Mendiutz: Monte vacío, lugar de encuentro. 2. Zalantzamendi: El monte de la duda, la cumbre de la perplejidad. *** Marejadas Escucho profundo el murmullo sordo, caóticos vientos y agua sociales, siluetas sin control, inquietudes, siempre insólito y tenaz mar de fondo, Crispados, violentos y no razonables. Cáncer ignoto de margen nefando. ¿Qué soplo de aire tomará el mando? ¡Imposibles mínimas conclusiones! La belleza de tal encrespamiento clama por un dique de observación Sin él, lo humano queda sin tiento ¿Duele? ¿Se conoce? ¿Interpretación? Natural descontrol y sentimiento Estar requiere razonar la intuición. *** Algarabías La mente estrecha expresa su calaña, Cómo estímulo el suyo es único, Sólo el desprecio tiene auténtico, Sin cesar, otros criterios desdeña. Con este fondo su expresión extraña cuaja en desarraigo vil y trágico, abuso de gentes llanas, del pueblo mítico. Gran falsía, terca y frívola patraña. En mil lenguas, pan, diversión, oropel, gresca, mentiras, rumores, insidia, rencores potenciados a flor de piel. Para un sentido no tienen primer día Distraen su presencia, les va el tropel, jolgorio vacío, pura desidia. *** Ironías vitales Embarcados en la vital ironía brota abundante mi propia ignorancia, con luces de velada transparencia, presunto saber queda en villanía. Escándalo de una inteligencia pertinaz y terca en su manía, porque saber requiere armonía entre categoría y sustancia. Eso sí, captarla no es retenerla radica su sentido en lo creativo urdir, elaborar la propia estela. A la vez luz intensa y lenitivo, trágica paradoja que congela, gráfica esencia de un ser activo. *** Núcleo profético ¿Profetas? Demasiado profeta, son demasiados augures de feria, tanto jolgorio deviene histeria ¿Así quién me indicará buena meta? El pasado, gran principio concreta, del origen es básica materia, génesis de una enorme batería para inicio de una plática escueta Un profeta nunca da en arbitrario ¿Conseguiría camino auténtico? Requiere criterio pero no contrario. Conviene seguimiento frenético, con buena partida y buen operario. Con frivolidad acaba en caótico. *** Arbolados tenaces La firme apariencia se pone a prueba, Comba las ramas la recia ventisca, El arbolado pone su voz ronca, Ruge la tempestad, el viento silba. Fuerte tensión, gran dilema al alba. ¿Poderes superiores? Fuerza bronca que nuestro anhelo tranquilo trunca, Penas y dudas que el rayo conturba. El arbolado resiste ante la turba Su potencia con la raíz entronca Con savia limpia, con flujo sin traba. Un tronco enhiesto de protección terca, Su rama dobla pero no se acaba. Al fin llegará nueva fruta fresca. *** Talante Aturdidos por un mundo agresivo, si no lo interpretamos bien, sufrimos. Fronteras, razones o simbolismos fraguan en duro talante opresivo. Oprimen los elevados abismos, la impotencia me deja pensativo, aunque la exigencia me pone altivo bregando con tenaces optimismos. Sólo una ética decidida y genial con firme creatividad tesonera puede dar el potente impulso inicial. La práctica queda en voz rastrera ¿No podemos superar tan alto umbral? ¿Posible desesperación postrera? *** Fugitivos del accidente Entre ansias y renuncias navego. El misterio recubre mi origen, las razones no cambian esa imagen. Si intento escapar no doy el pego. Al primer accidente nunca llego, sólo intuición de lejano origen, con certidumbres escasas al margen. Orden alterado con quien dialogo. Ya fue el accidente definitivo al que siempre se atribuyen desdichas. Nos queda buscar el buen lenitivo cada uno verá si superlativo pues para encontrar verdadera dicha crepitará de amor un fugitivo. ** Rafael Pérez Ortolá rafapzo@wanadoo.es Médico español (Pego, Alicante, 1945). Reside en Vitoria, Álava. Es autor de Álava. Geometría sentimental itinerante. Ha publicado artículos en La Vanguardia Digital, El Inconformista Digital, Bierzo Noticias, Deia y Noticias Médicas. === El beso Verónica Delgadillo Vargas =============================== Ese día se levantó de la cama con la idea precisa de salir y darle un beso, con la convicción de romper la ceremonia del saludo y transgredir el rito de la bienvenida que ya se había convertido en un acto milimétricamente pactado entre los dos. Entró al baño, empuñó el jaboncillo con el debido reconocimiento del Ph de su piel, lo deslizó por el rostro y al mismo tiempo que el jabón se corría con suavidad, cada centímetro era transformado en una caricia juguetona suya, suya de él. Se enjuagó y se acercó a la pared con los ojos cerrados, buscó a tientas la toalla y se la acercó al rostro, que aún templaba la deliciosa sensación de una caricia. Un movimiento empinado, lento y pausado, un olor a rosas del oriente, un deseo inconexo, timorato pero a punto de asumirse como dueño del momento. Esa tarde se acercaría a él con la misma velocidad de siempre, para no alertarlo. Cualquier movimiento ajeno al proceso de rutina sería inmediatamente reconocido; y él retrocedería a pesar de que el ansia de recibimiento guarda la misma intensidad que el de la entrega de ese beso. Una caída inesperada, una ayuda, una recreación del cuadro de Munch, "El beso". No, eso sería una trilogía barata. Entonces, ¿cómo? Una petición, puede ser. Una solicitud: ¿querés que te dé un beso?, diría ella / ¿por qué?, diría él. Silencio estrepitoso. Ululos de lechuza. Entonces, ¿qué? Porque lo deseo, diría ella / ¿por qué?, diría él... Otra vez silencio, otra vez estrepitoso, quizá más. Porque veo tu boca y sólo pienso en besarla, igual que veo tu mano y sólo pienso en tocarla, diría ella / ¿por qué?, diría él... El silencio se rasgaría, entonces, con un suspiro y luego con el mismo silencio, terminaría de existir su propio e impasible ser. Tengo hambre, diría ella... / vamos a comer diría él. No, no daría resultado. Entonces, ¿cuándo?, se preguntaría ella; pero esta vez a sí misma, hasta en la idea. El silbo del viento le respondería o le daría un golpe en la cara; pero a veces el viento también es él, y el ansia se torna en lo mismo o más, porque el tiempo sigue su itinerario con la misma parsimonia de siempre echándole una risa en cada frente pasajero. ...al sol nadie le da bola, está ahí todo el tiempo, sólo cuando hace un frío de mierda uno se da cuenta de lo importante que es... Aquel pensamiento le apolillaba la cabeza, se lo había dicho un amigo y, a tal amigo, la sabiduría callejera impregnada de poesía le salía en cada estornudo. Tenía razón, un tiempo de ausencia tal vez haría sentir un cambio de clima, o tal vez no. Nadie lo sabría hasta no ensayar. A Fe hasta su propio nombre le resultaba insensato, la incipiente voluntad que tenía no le dejó jamás creerse la historieta del sol. Martín era eso, Martín, punto y aparte. Pero era tan jodido entender esas 6 letras juntas, que el asunto de los momentos inventados para abordar situaciones deseadas eran el excreto psíquico necesario para no podrirse por dentro. Para no consumirse en el deseo. Para no mal nutrir la esperanza. Sale temprano en la mañana, hace como 600 minutos, a la hora justa en que todo mundo sale a trabajar, en el mundo de este lado por supuesto. Sube al micro, un asiento individual, a la ventana por favor, mejor si es con el desnivel de la rueda (le gusta ver sus piernas cuando viste falda, y no sólo a ella). Va por la avenida de un mercado que de costumbre tiene vendedores ambulantes, y es un shopping particular con el vehículo circulando a 5 Km/hr. Hay modas en las ventas, hasta en las ambulantes. Hacía poco, el artículo preferido a ofrecer y/o comprar era el maní. Ese día, era papel higiénico. Dos, tres cuadras, veinticinco vendedores, todos ofreciendo papel higiénico. (Y a quién carajos, se le ocurrirá comprar eso a las 7:15 de la mañana en la ruta al trabajo). Baja del micro. Una, dos cuadras a pie, pintoresca caminata con el acompañamiento sincrónico de piropos con sabor a tufo de alcohol barato y a jornada del día anterior. Llega a la oficina con la certeza de que un edicto o una solicitada es una muy buena opción, y comienza a escribir una carta para convocar un beso. "Esperado Martín, Yo no sé de cierto -y eso te lo dije sin palabras en cada intento- en qué momento se produjo este fenómeno, porque de que es un fenómeno, lo es, de eso ya no cabe duda. Me parece, y eso significa que no lo podría garantizar, que el punto de génesis está en ese segundo ilustre en que las estrellas se volvieron ojos de lechuzas en un bosque de 4x4. Un día como este, como aquel o ese, donde al aire un tunante entonaba un poema de flojera y luego cantaba su canción. Qué flojera, dije yo también, así que no hice nada, el verso se hizo solo, de Benedetti y coco, de borrachera, de curiosidad e ilusión... de sun...". Se suspendió al tacto, la palabra no la saldó. Sintió que argumentar aquel beso era innecesario, cuando la lógica de aquella necesidad era víctima de una apatía general. Tomó una bocanada de aire, hizo añicos la hoja y dejó el bolígrafo sobre la mesa. ¿qué hago?, murmuró con preocupación. Tomó otra hoja en blanco e intentó de nuevo. "Hola Martín, Hoy tengo ganas de describirte algo de mi realidad, de nosotros, de lo que parece y lo que es. Una crónica. Cada uno de nuestros encuentros es una historia en tiempo real exactamente igual: Estás ahí, sentado frente al abismo interminable de unos ojos enamorados, los míos. Ojos que día a día se pierden en un mundo de ensoñaciones y un pantano de gelatina. Te miro y me limito sólo a desearte. Hay una distancia que nos separa, son esos metros o quizás centímetros entre tus ojos y los míos, que te hacen un imposible; por esa corta línea en la cual existe un algo extraño que divide nuestros mundos. Pero mi deseo es intenso, tan infinito como la nada, tan poderoso como el mismo ser. Y así se me van las horas y los días, pensándote, soñándote. Sólo una palabra sería suficiente para entregarte el alma entera en este beso; pero vos jamás hablás, tus labios no alcanzan a decir nada, ni siquiera un suspiro que lo explique todo... Y seguís ahí, sentado y muy calmado, pensando en tus cosas y hablando frivolidades; siempre ahí, frente a estos mismos ojos que te observan alucinados en la fantasía de construcciones imaginadas, o imágenes construidas, que son lo mismo; pero jamás iguales...". Un sollozo cayó junto con el bolígrafo. Los codos sobre la mesa, las manos sobre la cara. La impotencia mezclada con rabia, el orgullo con la ridiculez, el sentirse grandiosa y en fracción de segundos, al borde de la imbecilidad. Bajó unas de las manos del rostro hacia el papel, lo acarició, delineó cada palabra, sintió la textura que abrigaba aquellas frases, se detuvo un segundo, cerró los ojos e hizo añicos el papel otra vez. Fe creyó que sería indigno exponer a tal nivel los sentimientos más profundos que guardaba, ya no era un acto de desnudar el sentir, sino de hacer exhibicionismo del pensamiento. En el arte de la guerra esa carta hubiera sido un autoboicot, un autogol en fútbol; y además, encima de todo ello, no conseguiría el beso. Pero por alguna extraña razón, se sintió más llena de valor, sacó otra hoja y siguió. "Martín, Siempre pensé que la vida es mejor hacérnosla más sencilla: Vivir feliz, disfrutar de amar y ser amado. Puede parecer frívolo hasta superficial; pero es totalmente humano y terriblemente lleno de sensibilidad. Quiero hablar en sencillo, como decís vos, yo digo sin tapujos... sin puntos suspensivos ni metáforas, quiero hablar del amor que siento por vos, sin poner sólo la letra inicial y la final llamándolo 'lo indecible', de la eterna búsqueda de nuevas y mejores formas de hacerte feliz y de cómo seguir apilándolas en archivos mentales y cuadernos empastados, de mis múltiples intentos por conseguir una respuesta que no me signifique golpecitos en la cabeza cuando expreso lo que siento. Hoy, quiero darte un beso, y que lo recibas, sin importar si es el último o el primero... Fe". Dobló el papel una y luego otra vez. Ya está, pensó. Esto es. Y comenzó a imaginar cómo sería el encuentro ideal para entregárselo junto al beso. Una tarde agua Vital, en un cuarto de hotel tipo hogareño, un tango, sin lugar a dudas, destaparía el vino de medio pelo que le regalaron comprando un cinturón en una feria en Tarija. Dejaría la solemnidad, aparte de que no le va mucho cuando hay que hablar de sentimientos. La verdad, que en sus manos, de solemnidad, un poco, de piel nada más. Las confidencias de este calibre suenan a hueco si se las lanza confitadas, son más creíbles si saben a achachairú verde. Una charla imaginaria, un café de medio pelo, en invierno. Le daría un abrazo de media hora si estuviera por ahí, él y su boca, la suya; pero no importa, lo hará en cuanto llegue... él, que tanto le encanta hacerse esperar. Y ella que a veces, no hay que negarlo, le sale el costado vejete (el izquierdo que sufrió como tres fracturas costillares, dos de ronda escalerosa, y la última con sabor a tango), y se aburre... o le dan bostezos y náuseas. Pensó primero en qué decirle al llegar, luego las otras cosas fluirán. El saludo de bienvenida eterna, ¡gracias! me alegraste la madrugada , sos un malevo guapesco del siglo XXI y de tanguero te queda un Monet el sombrero. (Un Monet, ¿el sombrero? ¿El sombrero?) Si me hubieran dado a escoger una época en qué nacer, me hubiera resultado fácil escoger el siglo XIX, "la belle epoque" (no sé si se escribe así). A vos te vendría bien la Argentina de los años 20, o la Francia de los 30. O le contaría que esa tarde salió a buscarle un libro, sabiendo que él la encontraría hoy, y cómo será el nivel intelectual por esos sitios que visitó 3 librerías y estaba agotado. Y él dirá seguro al recibirlo, no he leído nada de Cortázar te contaré; pero sí mucho Discépolo, Troilo, Le Pera. Conseguiré algo para que comentemos luego; pero no estaría mal que alguna princesa amiga me hiciera un buen regalo..., dirá entonces él, con toda la galantería del caso. Y claro, ella le hace el regalo con un te quiero tanto en especial... y así, palpa la luna, la acaricia y todo, hasta con morbo y sin censura. Y le dirá, sí, a vos te iría de fábula la Argentina de los 20... mierda, cortázar... en su época moza. Y él dirá como ya lo pensó, de Cortázar no he leído casi nada. No blasfemes, rezongará ella. Entonces él reirá, y ella pensará, "qué ganas de darte un beso para que me contagiés". Habían quedado a las 6:00. Ella, ya en el café, lo esperaba pensando en cómo sería la arribada. "...qué ganas de verte llegar a este café. Y justo en el instante de pensar en eso, la campanilla de la puerta sonará y un señor con un gabán negro y un sombrero de tanguero. No, no sos vos. Vos no usarías un sombrero tanguero. Eso ni en la más remota posibilidad de construcción sucinta de personaje. El sombrero tanguero es para los de mente 'de chou mast gou on', para los prestidigitadores magos de feria de pueblo o de circo barato. No, vos no usarías un sombrero tanguero, porque no llevás el tango encima de la cabeza, lo llevás en el alma". Martín entró al café que estaba poco más o menos vacío, sólo ella, en un rincón en la esquina más alejada lo esperaba en el intervalo de una indecisión. Un olor a café recién molido y madera húmeda eran los protagonistas de las sensaciones en aquel lugar. Él, se fue acercando a la par que ella sacaba el papel doblado en 4 que escribió esa mañana. Él se inclinó para saludarla y ella con el beso planificado durante meses en la punta del alma, giró la cabeza y ambas mejillas se rozaron, ambas bocas se fruncieron levemente y ambas humanidades evocaron un efecto sonoro de beso. Otro beso como este, de mejillas propias y labios ajenos, como aquellos o como esos, que terminó igual que aquel día como este, como ese o como aquel. Tomaron un café. Él habló, ella soñó. Al pagar la cuenta, él se fue y ella estampó el papel doblado en cuatro en el fondo del basurero a la salida del café. Él llegó a su casa, a la suya de él y ella también, a la suya de ella. Se acostó, extendió su mano, la miró. Ordenó el dedo índice con el anular a modo de construir una boca y la besó. ** Verónica Delgadillo Vargas vdelgadillo@prefecturascz.gov.bo Escritora y comunicadora social boliviana (Santa Cruz de la Sierra, 1977). === Tres poemas Rubén de Leo ========================================= *** Dolor navío 1 Nada se parece a este mar bravío ni siquiera tu nombre que viene a tumbos por el agua azotado por el viento de noviembre Nada se parece a este dolor navío ni al astillero ni al mástil ni a la bandera de tu cuerpo donde muero 2 ¡Qué tristes se ven los barcos cuando zarpan! Apenas se mueven en las dobladas olas. En popa quedaron los ecos del muelle, quebrados por la brisa salobre de la tarde. Navegan silenciosos, con un pesar en el velamen, hasta parecen que se quejaran en el silbido. ¿Qué dolor agobia a los barcos? *** Lluvia en ruinas Llueve la ciudad resquiebra sus torres de polvo bajo el relámpago Llueve la tarde se pierde en un largo bostezo Llueve la ciudad se derrumba cae derrotada bajo torrentes de agua Llueve calle abajo retumba el arroyo Llueve viene a galope largo la portavoz de los venenos Llueve la lluvia en su lomo lleva el color de las piedras desenterradas A filo de espada se despeña devanada Llueve sobre la cara de los muertos Llueve larga lluvia Tormenta de ortigas Llueve rumor de cristales rotos el agua rodando piedras Llueve. *** El amor es un sol de mediodía Tendida en la afilada piedra del mediodía, tu desnudez me asalta. Como un pañuelo húmedo por la ventisca, acariciado por los dedos del mar, tu cuerpo se tiende a mi lado. El viento erige columnas de sal en tus muslos. La arena esculpe tu espalda en la playa. Eres el golpe de la espuma, la ola reventada en un sol de mediodía. ** Rubén de Leo rdeleo7@hotmail.com Escritor mexicano (Jáltipan de Morelos, Veracruz; 1969). Licenciado en letras latinoamericanas y maestro en educación superior por la Universidad Autónoma de Chiapas. Ha publicado los poemarios Latir del tiempo, Desde la lluvia y Liturgia de los misterios cotidianos, y el libro de cuentos Si te vienen a contar. En 2002 recibió el Premio Estatal de Poesía "Daniel Robles Sasso" (Chiapas). Ejerce la docencia y el periodismo cultural en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. === Al cerrar los ojos Alexánder La Rosa ============================= "Cuando los ojos se cierran comienza el mundo verdadero". Gore Vidal. Querido Andrés: Hoy he decidido escribirte ésta, mi última carta. Aquí en esta clínica, con la muerte como única compañera, nada me parece más sensato que escribirte, así que le pido lápiz y papel a la enfermera menos antipática. Luego de algunos minutos llega a mi habitación con lo menos apropiado del mundo, un bolígrafo de tinta púrpura y un pequeño bloc de Hello Kitty. Al entregármelo me pregunta automática: -¿Vas a escribir? Y yo, conteniendo lo mejor posible mi ironía natural, le respondo: -Sólo para pasar el rato. -Seguro te hace bien. Por un instante me mira con ojos de lástima, desliza sus manos demasiado masculinas por mis pies y sale de inmediato. Así pues, aquí estoy, no voy a contarte la historia de mi vida porque la conoces bien, no voy a hablarte de mis sentimientos hacía ti porque soy incapaz de tanta simplificación; una carta no puede expresar -por extensa que sea- ni siquiera una pequeña porción de mis sentimientos, no te voy a hablar de mis miedos, porque durante los últimos años has sabido entenderlos y darme valor. No, en ésta, nuestra última carta, quiero contarte sobre ti, sobre el Andrés de hoy. Al cerrar los ojos te veo llegando a la que fue nuestra casa, te sientes un tanto frustrado por lo rutinario y vacío del trabajo, tú y yo sabemos que jamás te han gustado demasiado los trabajos que has tenido, una oficina repleta de extraños no es ambiente para un alma como la tuya, debatida siempre entre el arte y la ciencia, entre lo etéreo y lo material. Sin embargo, desde siempre trabajas en aquella correcta profesión, que como joven de buena familia, te viste estudiando y luego ejerciendo. Te vas directo al cuarto y colocas la chaqueta del traje en el perchero, examinas la corbata y decides que, gracias a tus cuidados, no presenta mancha alguna, entonces regocijado por una de esas pequeñas satisfacciones que tu neurosis por la limpieza te reserva de tanto en tanto, guardas la corbata. Para la camisa blanca de doble puño y la camiseta de algodón no hay examen que valga, ambas van directo a la cesta de la ropa sucia, al colocarlas te acuerdas de que yo siempre llamé a la franela de algodón "guardacamisa", palabra que te parecía lo bastante cursi como para hacer burlas tontas, esbozas una discreta sonrisa y me parodias en voz baja: -"La guardacamisa está sucia". Mientras te quitas los pantalones y los interiores recuerdas que te conté lo que me decía mi abuela cuando llegaba del colegio y lo repites con el consabido acento español en tanto vas desnudo al baño: -"Loz piez en la cabeza, vamoz, directo a la ducha". Una vez en la ducha, das rienda suelta a tu neurosis y te aseas como lo haría un reo el día de su regreso a casa, no piensas, sólo te aseas. Cada parte de tu cuerpo, demasiado moreno para tu gusto, recibe su justo tratamiento. Por un momento no estoy en tu pensamiento. La enfermera menos antipática entra y sin decir palabra va al lado izquierdo de mi cama, lleva una bandeja de aluminio que me recuerda las bandejas donde servían la comida en el terrible colegio de monjas donde estudié mi primaria, ¿te conté sobre las odiosas bandejas de aluminio y de cómo aún hoy recuerdo con desagrado el sonido de los tenedores contra las bandejas? No lo sé... supongo que sí. Cambio de contenedores, chequeo del goteo. -¿Cómo está todo?, ¿bien? -Sí. Cuando sales del baño, seco de pies a cabeza, ves que la brisa levantó un poco la sábana que cubre la cama, la alisas y al ver tu mano sobre la cama Queen te aborda un dolor penetrante. Sin vestirte, te acuestas como sabes me gusta hacerlo a mí, ocupando sólo el lado izquierdo y colocando la toalla húmeda al lado derecho, ves el techo y sientes el punzón de la soledad, de pronto te parece un grito ahogado el silencio de la casa, empiezas a perder tamaño y cuando ya estás a punto de perderte en la inmensidad de nuestra cama te colocas en posición fetal y por primera vez lloras con sinceridad mi ausencia. Empiezo a sentir el efecto del calmante que me hace dormir por horas y que mañana me dejará un tanto inerte, por lo menos hasta las diez de la mañana. Te veo llorando, pero a la vez, cediendo a un sueño intranquilo. A las tres de la mañana, cambio de contenedores, chequeo de goteo. Disimulo dormir, te veo despertar por el frío, buscar la cobija debajo de las almohadas y retomar un sueño más calmado. Es sábado, vas del baño directo al estudio, observas tus libros, te sientas en la tumbona que yo usaba para leer la prensa mientras tú escribías sentado frente al escritorio, lo haces como lo hago yo, doblando el pie izquierdo sobre la tumbona y repasas con la vista nuestra colección de libros, recuerdas el sistema de clasificación que introduje, en el que los libros del estante de nuestra habitación eran los más importantes, les seguían lo del estudio, siendo, los libros en el cuarto de huéspedes y en el librero del pasillo, los menos importantes. Te dices: -Claro, y yo soy el neurótico. Tomas un libro al azar y resulta ser una edición de bolsillo de Cuentos grotescos de José Rafael Pocaterra, buscas el único cuento que recuerdas y lees "Los Come-Muertos". Te veo tranquilo leyendo, sonriendo con la típica sonrisa de complacencia y casi de superioridad, de quien conoce la historia y sabe cómo termina. Al finalizar te preguntas por qué este librito de edición económica ocupa un lugar en el estudio y no pasa al último nivel del escalafón, es decir, el librero del pasillo. Tratas de pensar en mis razones y te perturba no estar seguro de cuáles son. Baño, cambio de contenedores, medida de la temperatura y la presión sanguínea, cambio de ropa de cama, toma de placas y muestra de sangre, visita del médico residente y del tratante... Son dos horas de mucha agitación. Tú lees tranquilo. Las enfermeras me observan en calma, no saben que verte leer tranquilo me tranquiliza. A pesar de las restricciones impuestas por el médico, comienzo a recibir visitas. No siento nada. Las palabras de aliento me resultan vacías. Veo la escena como desde una butaca en una sala de cine de tercera. Me gustaría estar en paz para pensarte y escribirte. Recibes la llamada de tu mejor amigo. Luego de hablar con él te sientes aun más solo y más aislado. Decides salir, vas a desayunar al mercado de los chinos, nunca te ha gustado demasiado su comida pero crees que necesitas el ambiente caótico para aturdirte un poco. Ves una especie de pastel de masa de arroz. -Amigo, ¿de qué están rellenos? -Puelco. -¿No tienes de carne? -Puelco. -Entiendo... por cierto, ¿cómo se cocinan, al horno o al vapor? -Tres mil bolívares. -Entiendo pero ... ¿cómo se cocinan? (haces el gesto de abrir y cerrar la puerta del horno y el del vapor saliendo de una olla), casi gritas: -¿Al horno o al vapor? -Vapol, vapol, tres mil bolívares. No puedes reprimir la risa, ni dejar de comprar una bandeja de los famosos pasteles. Yo también sonrío. Cuando subes al carro, te das cuenta de que a nadie puedes contarle tu pequeña aventura y de nuevo la soledad te hiere. Regresas al apartamento, comes y vuelves a dormir. Durante la tarde estás aturdido, lo mismo me pasa a mí, desde la distancia mi cuerpo herido y maltratado me parece un vídeo efectista y de bajo presupuesto. Me reúno con los médicos, la quimioterapia no ha surtido efecto, tengo una infección galopante en una arteria en el corazón y metástasis en órganos vitales, voy a morir, esta parte la sabemos desde hace diez años. Quizás sea difícil de entender para ti, pero ahora mismo lo único que me importa es estar en paz, salir del hospital, recobrar un poco de control y pensarte, eso es lo único que quiero, pensarte, así se lo dije a los médicos. Me dieron de alta, me dieron una receta con un solo medicamento para el dolor, hasta aquí me acompaña la ciencia. De montones de medicinas intravenosas paso a una sola pastillita púrpura cada doce horas. Estoy en mi cama, puedo sobrellevar el dolor y vuelvo a pensarte, estás en la montaña desde donde se lanzarán mis cenizas cuando todo termine. Es un recodo estrecho no muy transitado del Ávila entre Sabas Nieves y Cachimbo, siempre oscurecido por los altos árboles y siempre húmedo aun en las épocas de sequía, hay un banco hecho de piedras, ahí estas sentado, entre las ramas se adivina la ciudad, pero sólo se escucha el rumor de la montaña. Por segunda vez lloras tu soledad y decides que también ahí yacerán tus cenizas. La tarde va cediendo, está oscuro, no puedes distinguir los detalles, pero puedes recordarlos. Ves el lecho de hojas, la línea de agua abriéndose paso entre la tierra húmeda, los troncos desgastados y disfrutas con los haces de luz de la luna que se cuelan entre las ramas. Yo lo repaso todo a través de tus ojos... Mis ojos cerrados ven a través de los tuyos... Estoy dentro de ti... No tú dentro de mi... Ya no eres mi imaginación... Yo soy tu imaginación. Tu soledad y tantos desencuentros sufridos te llevaron a imaginar un amor profundo e imposible, mucho más grande que todos los que has vivido, y me imaginas pensándote, entendiéndote y amándote. Me imaginas además muriendo y así explicas el por qué estás solo, te permitiste esta aventura hace unos años y pensaste que era mejor imaginar un amor que aceptar no haber amado jamás. El amor romántico no es más que un invento, yo soy el invento que más has amado. ** Alexánder La Rosa alarosa@adytumcorp.com Escritor venezolano (Caracas, 1968). Licenciado en computación. Textos suyos han aparecido en Panfleto Negro (http://www.panfletonegro.com). === Cuatro poemas Paula Winkler ====================================== *** Anhelos 1. Banal mi cuerpo, carnal el alma. Así dejó a mi boca tu aliento ayer, helada. 2. Extraeré el revólver y juntaré las balas. Del resto se encargó ya la obstinación del aire. *** Triángulo con chofer urbano Un hombre llama amor a su mujer, ella, después de oírlo, huye en taxi. ¡Bienvenida, autopista! *** Andante Bajo la falda va mi sexo. Oloroso, el que nadie ve, mágico pero yermo. Bajo la falda sigue andando oloroso y yermo, mi sexo, ¡maldita vida!, sin tu sexo. *** Lexotanil Atragantada, mi lengua se abrevia en espera de saliva ajena e inquieta. Para hidratarse no le queda otra opción (a mi lengua) que la caja de grageas. Es que si claudicara, y mi lengua volviera a tu saliva mi vida sería, darling, inveterado desastre. ** Paula Winkler paula_winkler@fibertel.com.ar Escritora argentina (Buenos Aires). Doctora en derecho y ciencias sociales y magíster en ciencias de la comunicación. Ensayista y cuentista, ha publicado el libro de cuentos Los muros, la nouvelle Cartas escritas en silencio para el viento y el libro-objeto Cuentos perversos y Poemas desesperados, además del ensayo El discurso argentino de la mentira, del cual es coautora. Ha recibido el premio Jorge Luis Borges de la Fundación Givré (1989), el premio publicación categoría cuento de Ediciones Nuevo Espacio (2003), y el mismo premio en la categoría cuento breve (2005). Textos suyos han aparecido en revistas como Híbrido Literario, El Escribidor, Letras (Buenos Aires), Everba (Universidad de Berkeley), Turia (Aragón, España), Hontanar-Cervantes, (Meulbourne, Australia), Brújula Compass (Instituto de Escritores Latinoamericanos de Nueva York), y en la revista del Lake Forest College, (Departamento de Literatura y Lenguas Extranjeras de Chicago). Su cuento "Esperando instrucciones" ha sido traducido al alemán por la escritora y traductora Lilith Tetzner. === Seis relatos Emanuel S. H. Marín ================================= *** Negación de la realidad Todo aquel que viva o haya visitado una zona costera habrá visto que la playa es uno de los lugares predilectos de las parejas. Esteban y Carla eran una de ellas. Casi todos los días iban allí en busca de vaya a saber qué cosa de enamorados. Pero todo eso cambio un día en el cual contemplaban la luna que brillaba sobre el mar y en el cielo. En ese momento fue cuando él le preguntó: -¿Me amas? Ella mantuvo un absoluto silencio. Él no insistió y comenzaron a caminar por la orilla. Ahora la luna brillaba sólo en el mar. Pero él no lo sabía, no se atrevía a mirar al cielo. *** Soñadores y realistas Un hombre miraba el movimiento simétrico y controlado de la ciudad desde la costa. Y otro desde el mismo lugar miraba el continuo e irregular movimiento de las olas. A los minutos pasó otra persona y los miró desorientados, no podía distinguirlos. *** El pequeño mendigo En la estación de un subte repleto de gente un niño harapiento se encontraba pidiendo. Primero caminó un poco entre las personas y luego se acercó a un hombre de traje que le daba la espalda. Tiró con una de sus manitos de sus ropas para llamar su atención. Y éste se dio vuelta, viendo al niño con los bracitos extendidos hacia él. El hombre lo miró y le entregó una moneda. El pequeño mendigo no dijo nada, se alejó mirando la moneda y luego de sacar otras de su bolsillo y de juntarlas todas en su mano pensó: "Ahora solamente me falta saber dónde venden los abrazos". *** La información que desinforma Estaban mirando la televisión y veían con tristeza imágenes de la guerra de Irak. Todos estaban realmente dolidos por los aberrantes hechos. Pero mientras lloraban esos sucesos a miles de kilómetros de distancia. Nadie sabía que a su vecino lo había dejado su esposa, y que en ese mismo momento sostenía una pistola entre sus manos. *** Retratos perfectos Cuentan que hace tiempo existía un hechicero que practicaba la magia negra y era adepto a la pintura. Éste pagaba grandes sumas de dinero a las modelos para que posasen para sus retratos, pero lo que ninguna de ellas sabía era que aquel lienzo tenía un extraño conjuro. El brujo retrataba a las personas de manera tal que los cambios producidos en el lienzo se transformaban en la verdad del cuerpo de la modelo. Así era como las pintaba con cambios drásticos, cambiando lo que él pensaba como imperfecto e imponiendo su ideal de perfección. Un inventor conoció esta historia en su juventud. Y luego de muchos años se inspiró para el gran invento de su vida, el televisor. *** Epitafio Cuando Pablo se suicidó fue a parar directamente al infierno, allí el diablo no tardó en someterlo a las más aberrantes torturas. Pero, pasados momentos de eternidad, Satán empezó a preocuparse ya que no sentía ninguno de los dolores a los que sometía su alma. Por eso, luego de meditarlo comprendió que había un error, él no tenía que estar ahí sino en el cielo. Habló con Dios y le dijo lo que había pasado y Pablo fue llevado al cielo, donde lo agasajaron con los placeres más puros que puedan ser imaginados. Pero otros fragmentos de eternidad sucedieron y nuevamente era indiferente a todo lo que se lo sometía. Luego de esto Dios y Satán se reunieron y al no poder soportar esta alma ajena a todo decidieron enviarlo a vagar por la tierra como un espíritu errante. Pablo aceptó indiferente, y lo primero que hizo al llegar fue cambiar su epitafio por uno más apropiado: "Desterrado del paraíso y del infierno por estar enamorado". ** Emanuel S. H. Marín pupurhey@yahoo.com.ar Poeta y narrador argentino (1985). Su obra, compuesta por poemas y relatos, permanece mayoritariamente inédita. === La muerte es muy útil Isusko Larrinaga =========================== *** no pares en la salud o en la enfermedad, en cueros o bien abrigados lean el Quijote, no paren de leerlo. mientras la nariz se llena de inmundicias, mientras las viejas se cuelan en la frutería lean el Quijote, no paren de leerlo. en la hora del sandwich, mientras oyen un concurso lean el Quijote, no paren de leerlo. banner: vendo pastillas de éxtasis, por cada lote de treinta el Quijote de regalo. *** hogar faxion no recuerdo haber pasado la aspiradora, reconozco que estoy cansado de pasarla. si cae una mota de polvo corres a subir a un árbol, ya crees que aparecerá un tigre. todo brilla en exceso, no encuentro un poco de mierda, ni siquiera una pelusa perfecta terminada en remolino. amor, dejemos entrar a las lagartijas, que brinquen en las venas, perdamos el tiempo. *** nunca mueras pájaro oh pájaro, nunca mueras pájaro, no mueras antes de que me mate este cigarro. Llévalo en tu pico, arrójalo a las llamas infernales. ya ves donde desespero, aquí, en medio del pasillo. no sé si ir a la cocina, no sé si ir al servicio; dime si mi Padre ha dejado algún langostino, dime si queda alguna hoja de papel higiénico. ¡pájaro! ¡dónde te hallas pájaro! sácame de la mano fría del pasillo, sácame porque el pasillo es un pájaro, el pájaro que picotea mis pies para evitar mi descanso eterno. tú ya sabes que yo sé, yo ya sé que tú sabes que tú eres un pájaro, pero tus ojos sujetan un mar el mar que canta bellas orquídeas. ayer te vi llorando en mi cuello, espesas lágrimas posabas en él, completamente enloquecido. no te llevaré a los tribunales, mi corazón es una casa en llamas donde los corderos asoman el rostro y piden que llames a los bomberos. oh pájaro, nunca mueras pájaro, no mueras antes de que me mate este cigarro. Llévalo en tu pico, arrójalo a las llamas infernales. *** blues Robert Johnson exaspera en el gramófono, finaliza su grito en la risa que retumba en un sótano de mala muerte. ante la copa de whisky contorneada al máximo la gatita, sus carnosos labios imaginando la solidez de mi cipote rosa, sus guantes de seda desvistiéndose, lista la punta de su lengua, listo el punto del prepucio para detener el universo, detenerse álgido. felices sus labios juguetones empapados de calor fálico. suena la campanilla, tilín-tilín. *** pasaje invernal en qué quietud aguardan los árboles, vestido su ramaje por el verdín que traen los vientos. es verdad: los animales no toman cola-cao, pero hay que ver lo abrigado que sienta caliente. cuajan, cuajan en mi cabeza copos de nieve, qué cristal el piano, tan silencioso. mira qué juguetona la ardilla, cómo desciende peluda, cómo toca la tierra a por un mechón de hierba, la hierba endurecida por la noche. ya no están, ya no colorean las hojas moribundas, se las comió la tierra y yo me pregunto: ¿se secarán los calcetines en las estrellas? ** Isusko Larrinaga isuskola@mixmail.com Poeta y narrador español (1974). === Los Miró Gricel Ávila Ortega ===================================== La historia de los Miró es simple. Fueron cuatro hermanos que desearon tener libre albedrío, pero su poder de decisión estaba alienado y el libre albedrío se dividió en los cuatro. Vivieron en un pueblo llamado "Vio", el cual no figuraba entre los demás nombres de la ciudad "Eximirse". Todas las personas que vivían en esta ciudad huían de las presencia de los del pueblo "Vio", porque temían que su gran estatura de cuatro metros -todos los habitantes del pueblo "Vio" medían esa enormidad humana- los aplastara y se los comiera como unas plantas gigantes carnívoras. Me he desviado un poco de la historia de los Miró. Disculpe usted. Pero era necesario describir el entorno humano donde habitaron estos hermanos tan, tan, tan: ¿cómo los calificaría usted? Tal vez, al final de la historia le podamos otorgar juntos un calificativo. Bien, los Miró midieron cuatro metros de altura, al igual que todos los habitantes del pueblo "Vio", vestían frac y bombín negro, pantalones excesivamente largos -más allá del bajo de sus tobillos-; pero no usaban zapatos -al igual, repito nuevamente, que todos los habitantes de "Vio"-, al no haber zapatería que pudiera crear calzado del enorme tamaño de sus pies. Ahora, permítame usted singularizar a estos cuatro hermanos de la demás gente monótona de Vio, que lo único relevante fue su gran estatura y sus grandes pies. Los Miró tuvieron adornos muy relucientes: grandes de narices de horquetilla, a lado de una excesiva delgadez corporal, y otros adornos problemáticos que fueron causantes de la alienación del libre albedrío. A excepción de todos los habitantes de la ciudad "Eximirse" y de "Vio", los Miró lidiaban con los siguientes adornos: tener una boca compartida, alargada hasta los veinte centímetros, un solo corazón dividido en cuatro, ubicado no en el lado izquierdo del pecho, sino mucho más abajo, en las rodillas; estas mismas rodillas no estaban divididas en una, como la boca y el corazón, cada uno tenía sus dos rodillas, pero para colmo, los ocho pares de rodillas estaban unidos congénitamente. Causaban ternura verlos pasar tomados de la cadera para ayudarse a caminar y más belleza el poder agacharte hasta la mitad del cuerpo y escuchar un solo corazón fusionado, conformando un todo de virtudes en los Miró. Virtudes trastornadas, retrógradas, fuera del alcance de su entendimiento y del entendimiento de todas las personas de "Vio" y "Eximirse", a pesar de que estas virtudes fueran compartidas. Ahora, voy a tener que desviarme un poco de la historia de los Miró para enumerar una sola acción que unía a "Vio" y a "Eximirse" - aunque los segundos le temieran a los primeros- y que singularizaba aun más a estos cuatro hermanos. A los habitantes de la ciudad "Eximirse" y del pueblo "Vio" -ya me cansé un poco de ser algo reiterativo en estos nombres, pero de otra forma, a mí o a usted puede que se nos olvidé el nombre de estos sitios y no quisiera arriesgarme a que eso ocurriera, de tal forma, continuaré siendo reiterativo-, si algo los distinguía era la rapidez, el dominio de vivir siempre corriendo aunque fuera domingo y no hubiera clases ni trabajo, a tal grado llegaba su obsesión por la rapidez -acción que fue calificada como la máxima virtud en estos sitios tan, tan, tan ¿rápidos?, ¿podría ser ese el calificativo?, ¿no prefiere usted que les denominemos "conejitos" del cuento Alicia en el País de las Maravillas?, acuérdese de ese personaje tan bello y tan apresurado. Se lo dejo a su opinión; a mí me gusta más "conejitos"-, discúlpeme que me he vuelto a desviar de la historia. Decía, pues, que estos habitantes de la ciudad y del pueblo eran tan rápidos que comían sopas instantáneas calentadas instantáneamente con agua caliente del microondas. Muy al contrario de esta barbarie apresurada que como "conejitos" buscaba hoyos transportadores, como sus automóviles, para ser más instantáneos como las fotos instantáneas; los hermanos Miró eran personas muy lentas y precavidas, pero decisivas en el momento preciso de lo que querían hacer, no se preguntaban entre si qué deseaban llevar a cabo, cometían sus acciones espontáneamente, en un vano intento de querer parecerse a la gente de "Eximirse" y de "Vio" y no ser tan, tan, tan ¿singulares?, recuerde que acordamos que el calificativo de los hermanos se lo otorgaríamos usted y yo al final de la historia. Bien, continúo, lo que hacía uno, naturalmente tenían que realizarlo todos; y por ello siempre estaban atentos de lo que el otro hermano fuera hacer, y si podían, trataban de adivinar los pensamientos del otro para aventajarse con otra acción que eliminara la acción en la que no estuvieran de acuerdo a realizar. Vivían contrarrestándose entre sí; por eso los Miró no se bañaban. No querían lavarse el culo al mismo tiempo que sus hermanos, ni lavarse la cara de último, porque alguno lo hizo después de jabonarse el pene, entre otras dicotomías. Muy a propósito, no olían mal y fueron muy limpios, pero nunca quisieron revelar su forma higiénica para eliminar este innecesario hábito de limpieza. Debo decir que en este aspecto las personas de "Vio" y de "Eximirse" los envidiaron sobremanera, porque eliminaban una acción que si ellos la imitaban podían ser más veloces contra las veinticuatro horas del día, pero no querían lidiar con el problema del mal olor corporal que sin duda los haría ser repelentes unos contra otros. Así, hubo dos grupos de espías, del pueblo "Vio" y de "Eximirse" que vigilaban las acciones de los Miró para descubrir su receta contra el mal olor y contra el tiempo. Ambos grupos fracasaron, solamente se llegó a comentar que los niños del pueblo "Vio" habían visto a los Miró limpiarse con la nariz: los ojos, la boca, el cuello; las axilas, los codos y su propia nariz. La forma de gran horqueta de sus privilegiadas narices -según se dijo-, les permitió realizar ese estilo de pulcritud. Pero no les creyeron a los niños, quizás porque ambos bandos reconocieron que ni con cirugías plásticas lograrían el tamaño de las hermosas narices de los Miró para ganarle unos minutos al tiempo. A lado de esa irresistible hermosura de los Miró, que los habitantes de "Vio" y "Eximirse" no soportaban, a los hermanos les adornaban otras valientes manías. Manías que eran consecuencia de que tampoco coincidían en los hábitos alimenticios, pues no deseaban comer lo que el otro comía y, de ahí su excesiva delgadez corporal. Ahora sí podremos entender extensivamente la razón de estos hermanos tan, tan, tan... -bueno ya sabremos después- de los adornos tan irremediablemente paralelos de compartimiento. A causa de una sola boca, mantenían especial atención en contrarrestar lo que el otro pudiera meterse al paladar en cualquier momento imprevisto. Sólo coincidieron en la papaya, se alimentaban de papaya y del agua de papaya. No estaban desnutridos, tomaban y comían cincuenta papayas al día, trescientas cincuenta a la semana, mil quinientas al mes y dieciocho mil, doscientos cincuenta en trescientos sesenta y cinco días. Sé que la cifra de papayas es bastante grande y un pueblo tan pequeño como "Vio" y una ciudad aun más pequeñita que el pueblo como "Eximirse", no podía cubrir con este requerimiento de abastecimiento y donde además los envidiaban -y no de una envidia de la "buena"-; así que los Miró tenían su propio viñedo de papayas. Sí, sí, viñedo, ¿por qué sólo utilizar la palabra viñedo para referirse al cultivo para el vino de uvas? Los hermanos tenían una gran extensión de tierras donde cultivaban las papayas, las añejaban para elaborar su vino de papaya. Incluso realizaban una gran fiesta popular de la vendimia de la papaya donde nada más que ellos eran los organizadores e invitados a este gran evento temporal del clima. Cada año, los hermanos se turnaban para ser: ¡el rey de la vendimia de la papaya! Sin embargo, no solamente fueron grandes cultivadores y comedores de papaya, también fueron fenomenales sicólogos, pues debido al gran adorno de su boca compartida, la enfocaron para que fuera los oídos que escucharían a la gente. No es que sus oídos tuvieran mal funcionamiento para colmo de sus beldades, pero ellos se habían dado cuenta de que la gente se sentía más comprendida si se les escuchaba por la boca. Los Miró habrían tremendamente su boca de veinte centímetros al momento en que se disponían a escuchar la plática de alguien. Es sencillo decir que las personas se sentían conmovidas en su vanidad, al ver tamaña boca abierta, la cual era señal irrefutable de asombro ante una interesantísima conversación. Sólo los habitantes del pueblo "Vio" podían disfrutar de esta exclusividad de sicólogos, aunque en su interior estas personas los envidiaran, pues al fin y al cabo tenían imperiosa necesidad de una "boca" siempre amiga que los escuchara. Perdón, tengo que desviarme de la historia central otra vez. Decía acerca de la exclusividad de "Vio" por tener a los Miró como sus fenomenales sicólogos, por la sencilla razón de que la pequeñita ciudad de "Eximirse" al tener miedo de los gigantes de "Vio" de que los aplastaran y los comieran, no eran capaces de acercarse al confesionario de los hermanos -sí, sí, confesionario, los hermanos tenían uno en la plaza pública del pueblo, donde la gente acudía a sus consultas sicológicas-, por ello se conformaron con el murmullo de aquella fama de famosos sicólogos de "boca". Y no fue raro que la mayoría de los habitantes de "Eximirse" soñaran con el magnífico día de poder viajar a "Vio", esquivar valientemente a todos los gigantes, librar el peligro de ser aplastados y devorados, atravesar el parque principal y llegar al tan ansiado confesionario Miró. Pronto el sueño se volvió popular, inalcanzable, mítico y se llegó a dudar acerca de la existencia de estos sicólogos fenomenales. Creo que he nombrado tantas virtudes de estos hermanos que pareciera que los defectos no existen. Disculpas por tercera o cuarta vez, esta historia no tiene originalidad y, como se dijo al principio, es simple y llana, así que los defectos hacen gala de aparición. Pero es sólo un defecto, podría usted tomarlo en cuenta para no clasificar esta historia "tan carente de originalidad". El defecto que nos engalana con su presencia en esta historia es: ¿cuál piensa usted que podría ser?, yo no me lo hubiera imaginado antes de que me contaran esta historia. No fueron ni su gran boca, ni sus narices, ni las papayas, tampoco su altura, mucho menos sus pies. ¿Cuál es el último elemento que no he terminado de describir..? ¡Sí!, las rodillas. Exacto. El defecto de los hermanos eran sus rodillas porque su vida se depositaba allí. Sufrían con el constante peligro de su muerte, y un sumo cuidado para contrarrestarla. Como antes mencioné, lo enternecedor que resultaba verlos caminar cogidos de las caderas para ayudarse entre sí; pues esa forma tan humana de ayudarse mutuamente no era producto más que de su precaución por no caer y morir. La muerte se encontraba en la alienación de sus rodillas. La alienación de sus rodillas era demasiado delicada y su corazón se ubicaba ahí. Los Miró no podían voltear a ver hacia atrás al mismo tiempo, sólo uno de ellos podía hacerlo y comunicarle a los otros lo que vio; pero no debían hacerlo en tiempos iguales: un movimiento brusco por mirar atrás, provocaría la separación de las rodillas y el corazón; y ellos caerían al suelo como lentas plumas volátiles. Los hermanos tenían divididos sus tiempos consecutivos; cada uno se había apropiado de una hora para mirar atrás, de allí que fueran tan lentos y precavidos. Buscaban no coincidir y morir. De nada sirvió su precaución y lentitud pues de todos modos murieron. En un día simple, como todos los que existen, llegó al pueblo una mujer valiente de la ciudad "Eximirse" decidida a olvidar el miedo a los gigantes de "Vio" y comprobar de una vez por todas el sueño popular de su gente acerca del confesionario de los Miró. Iba resuelta a buscar una cita sicológica con los hermanos. Por cierto, no se supo el nombre de la mujer, porque murió de desolación el mismo día que llegó. Sin embargo la gente de "Eximirse" se valió de la muerte de esta mujer para acrecentar aun más su miedo contra los de "Vio", imaginando que su muerte fue porque la aplastaron o la tragaron. En fin, una imaginación, en verdad, falsa, pero cierta para ellos, porque lo que ocurrió en realidad es que la mujer se enamoró de los Miró en la primera hora que les vio caminar cogidos de la cadera; y no tuvo capacidad de decisión. No pudo amar a uno. Su amor se alienó en los cuatro, así como el libre albedrío. Y los Miró tampoco estuvieron capacitados para decidir quién de los cuatro amaría. Al observarla pasar de frente, se enamoraron de la mujer en una hora indeterminada. Y en una hora determinada del mismo día, la mujer, habiendo superado definitivamente su miedo a los gigantes de "Vio", se atrevió a preguntar a los del pueblo por los nombres de los hermanos. Por supuesto, nadie le supo dar un nombre individual: "Son los Miró", le dijeron. Y ella se sintió feliz. Creyó posible universalizar su amor y no dividirlo en cuatro. Creyó haber solucionado fácilmente su dicotomía o más bien su cuatricotomía amorosa (eran cuatro y no dos, dudo que cuatricotomía exista en el diccionario, pero no encontré otra palabra mejor -aunque sea inventada- que definiera este cuadrado amoroso) . Creyó que los hermanos no eran los Miró y quiso individualizarlos. A los hombres de sus motivos amorosos, le llamó Miró. En esa misma hora determinada, ella caminó detrás de los pasos de los Miró. Esa hora era propiedad del tercer Miró, y ella no sabía las reglas del tiempo. Gritó su nombre: -¡Miró! Voltearon a ver y la muerte escapó libremente de las rodillas. Encontrando coincidir en el amor, y la muerte. Y así es la historia de los Miró. * Discúlpeme, por sexta o séptima vez, pero no quiero arruinar el final de la historia, termina "muy bonito" para entorpecerla con un acuerdo que establecimos usted y yo. El adjetivo calificativo con el cual denomino a los hermanos sería el de "Alicias", ya que son cuatro, no puedo decir solamente "Alicia". Si, "Alicias" del cuento de Alicia en el País de las Maravillas. Los conejitos son los de "Vio" y "Eximirse", los Miró siendo tan lentos y estando dormidos, son los que caen en el hoyo de estos "conejitos" de rapidez. ** Gricel Ávila Ortega grissssmx@yahoo.com.mx Escritora mexicana (Mérida, Yucatán, 1983). Estudia actualmente la licenciatura en literatura latinoamericana en la Universidad Autónoma de Yucatán, casa de estudios de cuyo taller literario participa activamente bajo la tutela del escritor Joaquín Bestard. Colabora como guionista y locutora en la emisión radiofónica Voces de Papel, en la frecuencia 103.9 FM, Radio Universidad. Ha participado en eventos como el Congreso Nacional de Lingüística, organizado por la Asociación Nacional de Lingüística Aplicada, con sede en Mérida. A su vez, ha colaborado en diversas mesas de creación literaria en la Facultad de Ciencias Antropológicas de la citada universidad. Ha cursado estudios de Historia del Arte en el Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (Macay). === Tres poemas Oscar Portela ======================================== *** Responsorio A Estela Guedes con afecto y admiración Alma olvidada, pliegue donde se oculta el sangriento rastro de Minos, ay de ti, frente al fulmíneo rayo del espíritu que sólo lava deja tras de sí, tú, ánima sin morada, extraviada y errante, sola en la espera de la tríada del imposible origen, sólo esperar puedes. Aguardar como se espera con los oídos puestos sobre la mansa tierra, con el corazón hundido en las tinieblas de un aura donde juegan las luces y las sombras, sola con los ojos puestos en los lejanos astros y en perdidos senderos. Ay de ti, alma, aliento vivo de la sangre de la memoria, y eso es todo para ti, vestal pequeña como los mortales pasos del mortal en el infinito círculo del Universo. mas el guardián vela tras la cerrada puerta entreabierta, pero velada para ti, hoy, alma mía viajera. Así la dolorosa mano en voladura, que inerte yace ahora sobre el sepulcro pálido de una aurora perdida, y de los Dioses áureos que nos dieron el habla. *** La querella Silencio y soledad pez untado en mi boca, proferido destino que no abandona el habla. Habla por mi desierto donde ninguna huella existe: di el vacío del mundo, del alma su querella. Contra todas las cruces aún se alza el velamen que levanté en las horas de un claro mediodía. Si la noche se cierne sobre mi cuerpo expuesto al vértigo del tiempo, si el pesar se desploma sobre mis tristes ojos y las cenizas vuelan un postrer salomo abierto a las luces del mundo cantaré en alabanza de una patria olvidada: origen del origen que siempre ha estado ausente, sueño por el que todo fue anunciado sin serlo. Así surgen las notas de mi rota garganta, con la sangre vertida y el sacrificio a cuestas: A pesar de lo que Habla sin callar ni el silencio, seguiré hablando en sueños cuando trigo y guadaña hablen el decir del olvido. *** Canto para el Ocaso del Mundo Mírenme ahora a los ojos, calmos lagos, ciegos como los ojos del anciano y solitario ex Rey en Colona, mírenme así, sin esperar, sin esperar ver el final ni el vuelo de las aves, adentrándome en la oscura caverna de la que no salimos nunca, oh Prometeo, nosotros, yo, raza de traidores por los Dioses burlados y los días, sustancia de inmortales: así me veo ahora, en fútil conocimiento, la cítara y la flecha no son más inútiles prendas de quien va a perecer como Paris en Troya, sintiendo cómo se apaga la luz, la luz, con el consentimiento de los Dioses, inútil atavío, lujo de quienes ignoran su destino. Volver, volver siempre al desierto del cual partió el mortal, jugando con alhucemas y con rosas, pactando con sonrientes inmortales que ahora, separados del hombre, miran girar en el vacío el destino mortal: guerras, violencias, depredaciones, galeras convertidas en naves donde se gestan monstruos más insidiosos que las Parcas, hombres con lenguas bífidas y de largas palabras que ocultan el Ocaso que vio Edipo hace siglos, antes de que todos los soles se apagaran en ardentía de Caos, como se apagan hoy, en medio de solitarias muchedumbres que ignoran el fin de primaveras y de luces: hombres pequeños que han descubierto la duración efímera como el Poder que afirma "seamos como Dioses", mientras la vejez se hace con las cosas que el hombre crea para alcanzar la Infinitud del tiempo: Así, yo, como Edipo, abandonado por las luces del cielo que iluminaran mi niñez, de los caballos que Agamenón pusiera a las puertas del oro, de rumorosas aguas, y de flores, veo cómo el Tirano Egisto impone el crimen y sin posada ya, siento pasar los días, sin lamentos ni lutos, porque toda parodia se repite, y en lo profundo de la caverna yace el animal que espera otro animal de muerte, dispuesto a dominarlo todo, e ignorar que la burla del Dios y el sacrosanto Búho, son apenas la risa de máquinas de hierro, que en el desierto moran, esperando la muerte. ** Oscar Portela portelao@hotmail.com Escritor argentino. Ha publicado los poemarios Senderos en el bosque (Torres Agüero Editor), Los nuevos asilos (Botella al Mar, Buenos Aires), Recepciones diurnas, celebraciones nocturnas (Editorial Crisol, Corrientes), Auto de fe (Municipalidad de Corrientes), Había una vez (Botella Al Mar), Memorial de Corrientes (Editorial Tiempo, Corrientes), Golpe de gracia (Editorial Marymar, Buenos Aires), Selección poética (edición bilingüe, Ediciones del Correo Latino, Buenos Aires), La memoria de Láquesis y Fresas salvajes (1ª ed., Ediciones de la Universidad Nacional del Nordeste, UNNE; 2ª ed., Dunken, Buenos Aires) y El maldito asombroso (Editorial Tiempo), así como el ensayo Nietzsche, sonámbulo del día (Editorial Tiempo). Obtuvo el Primer Premio Nacional Carlos Gordiolla Niella con su poemario Estuario, publicado por la Comisión del Cuarto Centenario de Corrientes. === Noticias de la niebla (extractos) Triunfo Arciniegas ============= *** En tinta verde El hombre terminó de escribir la tarjeta y sonrió ante la belleza y la precisión de las frases. Imaginó que la mujer sería muy feliz leyéndola. Saldría del baño con la toalla en la cabeza, descalza, sonaría el timbre y sin prisa se colgaría la bata para abrir la puerta: nunca tiene prisa, es bella. Sin duda reconocería a primera vista los garabatos y la tinta verde, pero postergaría la lectura con el propósito del goce perfecto. O no, se quitaría la bata y así, desnuda como es ella, bebiéndose el café, leería la tarjeta una y otra vez, se reiría, sería muy feliz. Entonces, sin perder la sonrisa, el hombre destrozó la tarjeta y acercó un fósforo a uno de los pedacitos, que se encendió como el rostro de una muchacha avergonzada, para terminar encendiendo el pedacito contiguo, y todos se hicieron ceniza. Vio con toda precisión a la mujer metiéndose en la bata, triste, llorando la tarjeta sin leer, el timbre sin sonar, el café sin tomar. *** El inquilino Se recortaba las uñas de los pies la noche del viernes como una preparación para los días de descanso. Pero luego no bastó con recortarlas y pulirlas: había necesidad de pintarlas, y todos los días. Probó tonos y marcas de esmalte hasta el hastío, aunque lo dominaba el temor de que alguien le gritara quítese los zapatos, quítese los calcetines, y se riera de sus uñas pintadas como un día, años atrás y en el salón de clase, treinta bocas habían escupido sus pies mugrientos y malolientes. Casi sin proponérselo, después de una película fantástica, se pintó las uñas de las manos antes de acostarse. Asaltado por la dicha, pasó el montoncito de algodón empapado de removedor por cada una de las diez uñas esa primera mañana del resto de su vida. Decidió ser libre. Cada noche aseguró las ventanas y la puerta y durmió como una paloma, con sus veinte uñas pintadas, hasta la noche en que se derrumbó el edificio y entre los escombros de la ciudad revuelta, con su peluca rubia y las pestañas postizas, con todo lo demás, lo tomaron por una hermosa mujer. *** Pequeño mío Al afeitarse esa mañana descubrió que tenía cara de gato: se erizó. La espantosa imagen lo persiguió durante el día, en cada pausa del trabajo: los ojos claros de dilatadas pupilas, los bigotes enhiestos, las orejas puntiagudas, y su grito, su propio grito, que le descubrió un par de pequeños y finos colmillos. En la noche, sobre el cuerpo jadeante de la mujer, maulló: tuvo sueños horribles con ratas y perros y otras bestias. Al despertar se deslizó entre las sábanas, lamió los tobillos blancos y dulces y luego, perezoso, mientras los dedos de sangrientas uñas le recorrían el lomo, bebió la leche que la mujer le trajo en el platito. *** El tamaño del miedo El loco estaba tirando piedras a diestra y siniestra cuando surgió el camión, cuadras más allá, primero del tamaño de un juguete, luego del tamaño del miedo, verde y repleto de soldados, y el milico se bajó, lo amenazó con el arma desenfundada, y el loco tiró piedras, piedrecitas, polvo, se fue. *** Ceremoniales Las esposas reciben en la noche el tibio esperma de los maridos borrachos, luego ronquidos hasta la herida del alba. Se lavan con sueño el sudor de los senos fatigados, se hurgan con asco, con descuido. Les duele la oscura matriz mientras limpian el piso arrodilladas, mientras recogen la porcelana rota, las camisas sucias, el polvo, y el insecto de la desdicha las carcome sin ruido. En el tedio o la siesta se consumen, las revistas monótonas, la radio en el buzón sentimental, el noticiero de las siete, el hueco que dejan los años. A las once piensan en los cuchillos. En la puerta alguien con torpeza golpea. *** La prueba Me miró con lástima cuando le dije que estaba dispuesto a cumplir la prueba de cortar a medianoche una rosa de su jardín. El rumor de la desaparición de sus novios sólo era una calumnia más de las mujeres que envidiaban su hechizadora belleza. Los perros ladraban furiosos, reluciendo sus amenazantes colmillos y tensando hasta el martirio las cadenas, mientras la mujer me conducía de la mano hasta la puerta. Hizo un gesto y los perros escondieron el rabo entre las piernas y se enroscaron como serpientes. Volví a la medianoche, arrojé la cuerda y salvé el muro del jardín. Corté la rosa y entonces los perros me rodearon sin hacerme daño porque ya era uno más, con rabo y colmillos. Mientras me revolcaba de dolor sobre la tierra, entendí que el mensaje de sus ladridos no era de amenaza sino de advertencia, y escuché el llanto de la mujer en el fondo de la casa. *** Amantes El hombre y la mujer, enloquecidos, se devoraron en la oscuridad. Poco antes del mediodía, distraída y sin prisa, la camarera corrió las cortinas, recogió las prendas desparramadas por el cuarto y las depositó en el bote de los desperdicios. Luego cambió las sábanas. *** Noticia Picoteados por los pájaros del deseo, se asaltan a besos en las revueltas esquinas. Aunque ciegos, nunca tropiezan. Se recogen, se husmean y se lamen. Heridos e invisibles, sus cuerpos desnudos escriben las páginas del alba. Nadie reconoce su rostro en los periódicos, entre ladrones y asesinos, entre putas acuchilladas y motociclistas triturados, entre viejos sorprendidos en la autopista. Nadie. Eran pájaros. *** La mujer del comeclavos La mujer del comeclavos no se lamenta del oficio de su marido, al fin y al cabo de algo tienen que vivir, sino de su insistencia en penetrar cada noche sus heridas. Durante el amor, los clavos tragados asoman por toda la piel del hombre y se acomodan en los orificios antiguos y recientes del cuerpo de la mujer, que debe recibirlos entre gemidos, y entregárselos temprano, con un beso, cuando el hombre sale al trabajo. *** Una historia trágica La historia se la contó a Luis López del Castillo el poeta Álvaro Toloza, quien conoció a los protagonistas. López del Castillo me la contó una noche de borrachera en Quiebracanto. Esa misma noche Kid Chocolate noqueó a Mano de Piedra a la mitad del noveno asalto, y en el jolgorio de la celebración me estrellaron el carro. He tratado de olvidar la historia con paciencia, de desdibujarla, y casi lo consigo. Un hombre sacó por la ventana a su novia, su niña blanca de ojos tiernos, su caperucita roja, para que saludara al vecindario con el trasero. El hombre, que sólo quería divertirse, reía como loco, aunque la mujer gritaba muerta del susto y agitaba en el aire de la noche sus pequeños pies desnudos. El caso es que la mujer resbaló y él no pudo con su peso de golondrina. La vio caer despacio, como hiriendo la solidez del aire, hasta la acera, tres pisos más abajo, y entonces se desbocó por las escaleras a recoger sus pobres plumas. La mujer no murió pero tampoco volvió a caminar. El hombre, que no dejó de llevarle flores durante la larga estadía en el hospital, se casó con ella, y tuvieron un final trágico unos siete años después. La mujer le disparó cinco balas y reservó la última para destrozarse la cabeza. Nadie, hasta el momento, se ha atrevido a escribir la historia. Ni yo mismo podría. Una de esas historias que uno cree que a nadie le suceden. *** Beautiful body for rent La otra vez alquilé el cuerpo a un ladrón necesitado y me lo devolvió hecho cedazo de tanta bala. Renuncié a los ladrones pero cedí a los ruegos de una prostituta triste. Desde entonces lo he lavado en tanto sitio, en tan diversas aguas, señores, y aún no acierto a establecer si es más persistente el olor del sexo o el olor de la pólvora. Las ganancias no cubren las reparaciones. La última vez lo alquilé al presidente. Todavía no logro desgastarle, a punta de cuchillo y lija, de jabón y lejía, la hipócrita sonrisa. *** La vaca subversiva El avión presidencial, con todo el gabinete ministerial en su barriga, se estrelló contra una vaca de colores. Nadie se explica qué hacía la vaca a tales alturas. *** Poética Los hombres, en cuatro patas, ladraban a la luna mientras los perros le escribían poemas. Sobra agregar que ni los perros entendían los ladridos ni los hombres los poemas. Batían la cola ante el papel que el amo les sacudía como un trozo de carne, corrían alrededor y acezaban, ladraban. Amarrados a un árbol, veían en la ventana el perfil inclinado del perro que escribía. *** Niebla Abrí mi casa a los extraños. Llegaban apartando la niebla con las manos, aturdidos, perseguidos por un hilo de sangre. No averigüé sus nombres, sus historias, sus gestos. Sólo requerían de una cama para pasar la noche, de una taza de café para emprender el día. Unos caían rendidos, lastimados por los accidentes del camino o el acoso de una bala reciente. Otros, sentados, temerosos, esperaron el alba junto a la puerta como si fuese un tren que podría pasar de largo o como si consideraran la última noche en su país una estación equivocada. Dijeron adiós, los ojos ya en tierra ajena, el rostro todavía tiznado por la sombra. Unos se voltearon para arrojarme una moneda. Otros prometieron un presente. La mayoría nunca regresó. ** Triunfo Arciniegas triunfoarciniegas@yahoo.com Escritor nacido en Málaga (Colombia) y residente en Monteadentro, en las afueras de Pamplona. Ha publicado El cadáver de sol, En concierto, La silla que perdió una pata y otras historias, El león que escribía cartas de amor, La media perdida, La lagartija y el sol, Los casibandidos que casi roban el sol, La pluma más bonita, Serafín es un diablo, El Superburro y otros héroes, El vampiro y otras visitas y las obras de teatro El pirata de la pata de palo, La vaca de Octavio, La araña sube al monte, Lucy es pecosa, Después de la lluvia y Mambrú se fue a la guerra. Con Las batallas de Rosalino obtuvo el VII Premio Enka de Literatura Infantil, con Caperucita Roja y otras historias el premio Comfamiliar del Atlántico, con La muchacha de Transilvania y otras historias de amor el Premio Nacional de Literatura de Colcultura y con Torcuato es un león viejo el Premio Nacional de Dramaturgia. === Poemas Lina Zerón ================================================ *** Moradas mariposas Fui semilla de sol plantada en la tierra, parida por un tornado de agua, entre polvo estelar y alarido de colores. Yo quería nacer mariposa, águila y que me crecieran doradas plumas, pero nací higuera de enormes raíces y me salieron ramas y de las ramas hojas y me nacieron ojos en la corteza. De las hojas brotaron palomas y acunaron suspiros mis rojos dedos, y mis manos abanicaron tinieblas y probé la manzana del edén. Supe del sabor de la sangre y me punzaron los huesos y aprendí a llorar con mi sombra y a cargar la cruz del fruto de María pero también probé la miel sagrada de la rosa y la carne del cordero y tuve sangre virgen en las venas y entre mis piernas el jugo de Adán corrió. Mi vientre parió moradas mariposas que alimenté con savia pura de abeja y me transformé en Olmo para defender los frutos y ni sequías ni tempestades arrancaron mi tronco de la tierra. Cantaron muchas primaveras con sus inviernos, maduraron los higos y a la vida cayeron y se olvidaron de este árbol y desnudas quedaron mis ramas. *** Cortesana Soy la mujer que duerme en la jaula con los leones al ponerse el sol. Carne cruda como de sus pestilentes fauces lamo sus recovecos denigrantes y sin importarles, prueban cada mes mi sangre. Me he dejado ultrajar por conveniencia, soy mansa por una retribución, Abro mis posiciones para conseguir prodigios mayores, mejores pagas. Todas las noches meto al sol en mi cama y caliento deshilachados cuerpos. A veces suplico ternura desde el fondo de mi alma, desde el encierro de mi jaula repleta de vacíos inconmensurables, pero ellos no escuchan. El mundo me desprecia, yo lo ignoro. Vivo para alimentar a las bestias con mi carne, soy libre de volar si quisiera, de escapar, mas no tengo a dónde ir... Pertenezco a esta jaula. *** Ahí, donde En la blanda cavidad de mi cuerpo ardes. En el espacio donde impera la noche tiemblas. En las sombras donde los dementes clemencia piden te arrodillas. En la profundidad del sueño roto apareces. En nombre del Maestro que llegó a salvarnos imploras. Ahí, donde el olvido a jirones llega palpitas. Ahí, donde tu memoria no tiene sosiego existo. Ahí donde el alma absorta se ciñe uno a uno yacemos juntos. Ahí donde mi corazón oprimo antes de que el llanto llegue y me avergüence te desconozco. Ahí, donde mi delgado silencio te interroga, te perdono. *** Añadirte a mi piel Quiero hervirte en el centro de mis suspiros, desgreñar tus ansias en mi ansiosa piel, y encender piras infinitas en la avenida de mis piernas para guiar tu clavel por mi noche. Desmadejar tus besos con mis besos, en la flor de mi naranjo adormecer tu sed. Sentir en mi elástico triángulo azules bocanadas y convertirte en amaranto ocaso, para deleitarme con tu espuma, para echar anclas, para perseguir gaviotas, para morir en ti. *** La casa Llegó el momento de partir el hogar en dos. Bien: Comencemos por los rincones donde las arañas tejieron también su historia. Hablemos de los muros y sus cuadros. ¿Cuál eliges? ¿El del día de la boda, el retrato de la niña o el de vacaciones en verano? Quiero el antiguo bodegón para recordar las comidas familiares. Mira la casa: permanece ahí de pie pero sin alma. ¿Con cuál alcoba deseas quedarte? ¿Aquella donde los gemidos alguna vez fueron música perfecta? ¿O el cuarto azul donde echó raíces la cuna para siempre? ¿O el jardín donde todavía se columpian las sonrisas? Te regalo los espejos saturados de susurros, ecos familiares, desfigurados rostros que hoy se desangran en reproches. Deseo la terraza, esa roja plataforma de minúsculos ladrillos donde lluvias y palomas encontraron su refugio, donde todavía transpiran las estrellas y no hay sombra que oculte los engaños. Pero tienes razón: Tal vez aquí ya nada nos retenga. A la frontera tal vez llegamos entre el amor que vacila y las cenizas. Viéndolo bien, no puedo partir en dos la casa: te la regalo con todo y promesas de futuros. Como cortinas viejas te regalo lo que queda: este sombrío cielo y este desvencijado viento que dejaste al cerrar la puerta principal. *** Nacida muerta El corazón por fuera. Me acurruco en las noches con mi sombra, duermo entre quejidos muertos, inútilmente imagino despertar embriagada por los pétalos de tu boca. ¡¿Por qué no fui piedra, árbol, tumulto de olas, sangre que fluye en otro cuerpo?! Sin ondularme a la cavidad de tu silueta consumo mi vida esperando las migajas, todos los días me arrepiento de buscarme en tus ojos, Imán de tu nerviosa lengua, Me arrepiento de extrañar tus besos, el fragor de tu sexo. Duro, insensible, indiferente, ¿Por qué no fui hombre como tú? ¡¿Por qué no nací muerta para poder olvidarte cuando tanto te amo?! ** Lina Zerón linajes-editores@att.net.mx Escritora mexicana (1959). Licenciada en relaciones internacionales por la Universidad Nacional Autónoma de México. Periodista cultural de El Financiero, El Excélsior y la sección cultural del Suplemento La Jornada. Editora de la revista de poesía Entre Amigos (http://www.entreamigos.com.mx) y directora general de Linajes Editores. Su poesía ha sido traducida al francés, alemán, inglés, sueco, italiano, portugués, servio y esloveno. Fue galardonada con la presea "La mujer del año 2002" en su municipio, Tlalnepantla, por su trayectoria poética y actividad cultural. Ha recibido, entre otros premios, el segundo lugar 2002 en Melilla (España) por su poemario Vino rojo y el Premio Ciudad de Barcelona 2003 por el mejor poema de amor, "Dime cómo". Su poesía aparece en antologías de Estados Unidos, Uruguay, Italia, Francia, Suecia, Canadá, Perú, Cuba, Rumania, Turquía, Puerto Rico, Brasil, Eslovenia y México. Imparte talleres de poesía y cuento a los niños de las comunidades mixtecas. Ha publicado los poemarios Espiral de fuego, Rosas negras para un ataúd sin cuerpo, Moradas mariposas, Vino rojo y Un cielo que crece en el fondo de tus ojos, entre otros. Coordina el Comité Internacional del Encuentro de Mujeres Poetas en el País de las Nubes y el Festival Internacional de Poesía de La Habana (Cuba). === Si, sí, sí Abelardo Barceló Amorós =============================== Desde el silencio que me rodea escucho hablar a mi esposa y a todos vosotros, dirigiéndoos a mí. A pesar de vuestro disimulo, observo la inseguridad que os guía en las recomendaciones que intentáis que asimile. Queréis que siga vuestros consejos y que actúe como se espera de mí, pero esto ya no depende ni de vuestras sugerencias, ni de mi voluntad. ¡Qué ilusa!, ¡qué ilusos!, aún creéis posible que mi antigua serenidad vuelva a acomodarse en mi cerebro, y que ponga en orden mi desasosiego. Estoy indignado con la falta de respeto que se tiene hacia mi condición, y con el comportamiento tan poco cívico del destino. Ella intenta atraer mi atención y conseguir que la confianza que siempre ha presidido nuestras relaciones, siguiera latente entre nosotros. Mi gorgoteo incomprensible quiere llamar su atención o distraerle de su compromiso para liberarle de éste. Me gustaría trasladarle una de mis anteriores intenciones, como era la de escribir un libro en el cual le relataría mi vida, pero esto no será posible si no dispongo de una guía que me dirija... o algo; algún consejo que me resuelva el orden que debo de seguir para plasmar mi realidad. En otras circunstancias -en mis anteriores circunstancias- hubiera sido capaz de construir un mundo desde el cual poder entrar y salir en infinidad de ocasiones. Y ser cantor y ser embustero..., y ser ángel y ser demonio. Efectivamente se puede entrar y salir desde ese mundo que yo habitaba; desde el mundo que habito ahora, ya no. Pero ella es tenaz, incapaz de aceptar mi realidad y la suya. Cree que aún puedo ser capaz de inventar un hábitat a nuestra medida igual al que disfrutan una paloma torcaz junto a un ruiseñor de plumaje gris-anaranjado. ¿Cómo es posible indicarle que desde mi mundo ya no es posible retornar? Un hombre me mira dentro de los ojos; pretende que éstos le digan algo. Yo sólo puedo hablar con mis ojos y con éstos le digo: Estoy habitando en un mundo que alguien ha fabricado a mi medida, aunque la verdad, no ha tenido que esforzarse mucho, sin embargo para transitar por aquí, me hace falta la ayuda de vuestra tolerancia para que entendáis mi comportamiento. Éste no es el que dejan entrever mis gestos y mis palabras, las cuales se vuelven torpes y atropelladas, y consigo que no sean coherentes. Y lo siento; naturalmente que lo siento. Afortunadamente, soy capaz de entender vuestras miradas, las que a veces disfrazáis de compasión y alguno de alegría. En realidad he dejado de ser un estorbo para muchos de vosotros, y una preocupación para varios más; un número menos en la estadística que fabricáis, y un consumidor inútil para vuestros productos, un rival para el silencio y un amigo para el sereno, al cual acompañaré en su soledad y tal vez en el frío. Tengo infinidad de cosas que deciros, sin embargo, me doy cuenta de que a nadie le interesan. Me habéis reducido a un espacio interno, y yo me he agazapado en mi ostracismo. Vuestras simplezas no pueden sacarme de él. Desde aquí quisiera que ella no se esforzara más y que me deje circular por el sendero que se presenta ante mí, donde siempre encuentro el mismo obstáculo..., los mismos obstáculos ya que son cientos de ellos: mi incapacidad para reírme, para llorar, para guardar silencio en determinadas circunstancias, y es posible que para sentir. Sentir que no puedo contestar a su llamada, a su risa, y que ya no puedo acompañarla. Es fácil que os confundan mis aspavientos y que os parezcan gestos incontrolados y sin sentido, pero yo sé lo que me hago, y sé que estoy habitando en territorios inalcanzables inacabados y complicados para vuestro entendimiento, pero para mí, misteriosos y atractivos. Evidentemente no comprendéis la fascinación que me embarga. Varias veces me había planteado que mi retorno fuera inaccesible para el desaliento y es muy posible que ahora lo esté consiguiendo. Me habíais hecho creer que mis vivencias iban a ser capaces de conformarme, pero no me brindábais ninguna alternativa para ello. Sólo que detrás de unas cañas, detrás de una sonrisa, permanece inalterable mi utopía de la cual no puedo desprenderme. También me decís -porfiando en vuestra intención- que puedo inventar un mundo a mi medida..., pero no os dais cuenta de que yo ya estoy habitando en éste. Y entro y salgo de él las veces que quiero. No tengo nada que decir y me alejo, y cuando necesito comentaros alguna anécdota, vuelvo. Esta vez he vuelto porque quiero redactaros mi vida, pero me hace falta la ayuda de alguna quimera para plasmar mi realidad. Plasmar no sería el término adecuado, ya que este vivir mío sólo es una anécdota y a pesar de eso, tengo infinitas cosas que decir. Y sin embargo me aterra pensar que nadie me va a escuchar. Vuestra recomendación para que salga de mi ostracismo es una constante que se repite en mi vida y nunca os hago caso, ya que siempre encuentro el mismo obstáculo. A pesar de mi esfuerzo no consigo que ninguna de vuestras pretensiones consigan encandilarme, y nada más lográis que mi mirada se vuelva torva e insensible, y a veces temerosa. Ya no puedo continuar andando en vuestro mismo camino, aunque la senda que me había trazado era atractiva, y eso tal vez fue mi perdición. Desbocado, mi afán fue desbocado en busca de la meta que habíais diseñado para mí, y acaso la imposibilidad de conseguirla ha hecho que deje de lado todas las pretensiones que a pesar de que no eran mis auténticas necesidades, las asumí como tales. Muy tarde me di cuenta del error que estaba cometiendo con mi vida. Ésta es una de las causas para mi negativa, pero aún hay más. Lo difícil es que consiga catalogarlas cronológicamente: ¿cuál es la principal?,¿cuál la que ha decidido por mí?, ¿cuál es la que puede hacerme retornar?, ¿cuál la que continúa empujándome? Y ¿cuál la que me aleja de su lado? Me colocan dentro de un aparato que destella miles de luces y emite sonidos que martillean mi cerebro, e intentan que el eco les traslade mis inquietudes, pero éste está aletargado. Es posible que sea yo mismo el que lo ha adormecido. Ahora ya se repiten siempre las mismas circunstancias, por eso los episodios que vivo pasan desapercibidos para vosotros, y es posible que mis movimientos no os llamen la atención y penséis que son gestos incontrolados y sin sentido, desconectados de las normas en uso, pero ya os he dicho que yo sé lo que me hago. Yo sé que habito en territorios inalcanzables en el que ocupan un lugar preeminente los enigmas y vuestra fascinación por resolverlos. A veces me sumerjo en un cuento en el que tienen cabida todas mis aventuras, sobre todo las de ayer... ¿las de hoy? Las de mi presente. Si tuviera las mismas facultades de antaño, seguro que sería capaz de trazarme un cauce por donde discurrir y poder ser el dueño de mi navegación. Ser capaz de transformar mi desenlace en una fantasía, y que me acompañe cuando deambulo por la calle, alarmando a vuestra indiferencia. Alguno me tildáis de loco y yo lo admito. Admito que todos estamos locos. ¿Quién de vosotros no ha tenido sueños en los que un hada le brindaba tres oportunidades de conseguir otros tantos deseos? Yo sí, lo difícil ha sido conformarme con tres oportunidades, ya que son cientos de desarreglos los que veía a mí alrededor, y cada grito que sale de mi garganta es el recuerdo de alguno de ellos. Y grito por el mar, y grito por el cielo, por el canario enjaulado y por la paloma libre, por mi perro y su ladrido prisionero, por mi sueño y por la ausencia, por un consejo desoído, por un futuro inacabado y por un presente sin comenzar. De nuevo quiero contactar con vosotros, ya que tal vez me ayudéis a decidir si la elección que he escogido es la correcta. Así será más fácil que asuma ésta como una escapatoria, y que desestime las múltiples negativas que yo he materializado, y que me pregunte el motivo por el cual quiero irme. Me pregunto cuáles serán vuestras peticiones; seguro que una de ellas es el deseo de que os corresponda algún premio en el juego, y ya ves, a mí eso apenas me interesa. ¿No lo comprendéis, verdad? Veréis en mi desorientación, pero sólo estoy disfrazando mi vida y aprovecho la contingencia de que me consideráis "no apto" para hacer lo que me interesa. Para vosotros sólo son decisiones sin fundamento. Unos lazos invisibles mueven mis brazos y en ocasiones los adecuan a vuestro deseo. El mío, mi deseo, ha sido sustituido y destruido; un Dios vengativo y cruel decide mantenerme en esta postración. Ojalá penséis que todo lo que os digo tiene algún fundamento. Mis alaridos, los que a menudo os estorban y otras veces os alborozan, asustan a algunos niños, y a mí se me hace imposible adivinar el motivo para ese miedo, ya que sólo son lamentos, sólo es mi lamento por la vida que alguien me está haciendo arrastrar. Ésta tal vez os parezca artificial; para mí es fantástica, sobre todo cuando paso alguna página de ella, imperceptible para todos vosotros que no sois capaces de ver el lienzo del que dispongo para plasmar mi realidad. Y lo mismo que vosotros debo amueblar mi vida o enturbiar este lienzo que se muestra inacabado ante mi ausencia, y tal vez por eso, tengo alguna ventaja sobre vosotros. Deberíais de introduciros en mi mundo y comprobar lo que os digo. En efecto he pasado una de mis páginas, y desde mi actual precario entendimiento, la veo impoluta, llena de rasgos y de mensajes que deberíais de seguir para mantener vuestro frente en común con el mío. Me han dicho muchas cosas, seguramente las mismas que a vosotros, y estamos tomando diferentes soluciones. ¿Es la vuestra más agradable? De verdad, nada más veo que aún podéis escalar las metas que os han marcado y pensáis que son vuestros auténticos deseos. La diferencia entre vosotros y yo, es que aún podéis conseguirlo. Yo, ya no. Yo ahora entono canciones, y éstas retumban en mi cabeza repitiendo el estribillo, y en mi interior adquieren diferentes matices, a pesar de que es la misma canción y nadie la escuche, e intento que ninguno vea la posibilidad de que la mía esté envuelta en euforia y que hago caso omiso de vuestros argumentos. No sois capaces de escuchar la suave melodía que me componen los pájaros en el cielo, cuando mi canto suena en el mismo momento del amanecer y les obligo a levantar el vuelo. Con las primeras luces del alba los observo cómo huyen hacia el sol, pero antes me dibujan en el cielo formas muy curiosas, siguiendo la estela que marca el primero de ellos; a éste, le ordeno que gire a la derecha, y los siguientes le siguen estilizándose y componiendo la vistosa melodía que os he dicho, y que sólo yo tengo el privilegio de escuchar y saludar con el vaho de mi aliento. Nunca me equivoco ya que si giran a la izquierda, yo rectifico mi orden. Un noctámbulo que pasa por mi lado suelta un bufido de complacencia, o de desagrado, según haya transcurrido su noche. La mía ha pasado como la de ayer y como pasará la de mañana; soy consciente de que voy a hacer un requerimiento inútil: también he estado en la misma posición que vosotros, y seguramente sentiría la misma pena que sentís vosotros al verme, y que yo sentía al mirar la confusión de otro. Ahora la confusión impera en mi alma y abotarga mis sentidos. Pero el mismo sol no hace distinciones entre vosotros y yo... pero... calificar mi mal como más os plazca y refugiaros en mi melancolía o imaginaros que llevo conmigo una alegría desbordante. Es posible que así justifiquéis mi sonrisa, y podáis apuntaros un tanto a vuestro favor, o una excusa. Podéis decir que me río gracias a algún comentario que hacéis en mi presencia, pero no. Vuestras interjecciones ya no me hacen gracia y sólo escucho palabras que no respondo. Nada más respondo al silencio. No puedo sustraerme a oír las frases que vienen desde mi interior, aunque apriete mis oídos para no escucharlas ya que me relatan mi vida, que aunque ya no forma parte de mí, me recuerda mi primer fracaso. Un fracaso igual al que estoy viviendo ahora. Sólo era un primer desnivel, pero mi retirada fue patética ante él. No, apretar mis manos sobre mis oídos no es ningún gesto de anomalía, si acaso, de desesperación. No es tan peligrosa mi conducta, ¿verdad? A veces desconcertante, lo reconozco, como el día que volando, volando, con impulso me dirigí hacia un estanque donde introduje la cabeza y el tórax. El frescor del agua me devolvió a mi realidad. Era de los días en que entero de cómo transcurre ésta y no me gusta, pero no puedo escapar de ella. Era necesario que disimulara mi azoramiento y es lo que quise hacer para acallar las risas de los presentes. Me limité a pegar unos cómicos saltitos que acrecentaron el regocijo de los espectadores. Me dirigí hacia uno de los árboles del parque para que se respetara mi intimidad. Mi disimulada retirada consiguió que las risas fueran disminuyendo. En el árbol abrazo mi desorientación y mi chaqueta mojada, a la cual enrollé todo lo que mi fuerza me permitía. Al retorcerla lo hacía con mi propia imposibilidad y los diversos acontecimientos que rodean mi vida: el milagro de la ciencia que no se produce, la mentira de un sanador, y la fe de uno que quiere ser sanado, con la pierna de cera que inútilmente prende de un hilo y de una ilusión, con la esperanza de algún pueblo que quiere respetar su origen, con la lluvia que no quiere caer cuando es llamada, con el sol cuando no me calienta pese a mi provocación, y con las figuras que los pájaros dibujan para mí. Con la furia que se estaba apoderando de mí, y con la protección de mi hermano. Con la ausencia de ella, y con nuestro sueño inacabado, con el hijo que no hemos tenido, y que en ciertos momentos lacera mi corazón. Con lo que pudo haber sido y no fue, y con lo que fue y pudo no haber sido. Una rabia desconocida se estaba apoderando de mis sentimientos y era necesario contrarrestarla de alguna manera, aunque no sabía cuál. Como una burla, el agua caía a mis pies y las gotas salpicaban mis zapatos. Estaba demostrando al mundo la certificación de mi locura. Hubiera sido suficiente con estirar mis brazos para que este hecho no se produjera, pero mis manos apretaban y apretaban, ya que es muy difícil que actúe con cordura. Ahora sí, me encontraba ante el mundo como demuestra mi intelecto, y éste, precisamente hoy creo que me ha liberado: me ha hecho volar y amarizar en un estanque, otro día me convierte en una máquina de tren que arrastra a varios niños del parque que quieran subirse en ella, y otros me hace pender de un cachirulo mientras los niños cantan y se ríen; otros, por fin, me sitúan en la justificación de unos hechos que atemperan miedos ajenos. Creo que dos lágrimas alumbran mis ojos, y siguiendo los dictados de mi insensatez, me recosté en el tronco del árbol para seguir abrazando a mi chaqueta y a mi soledad. Me sorprendió el estupor de una pareja de pájaros que me miraba desde una de las ramas; les asombraría encontrarse con un solitario cuya mirada despedía fuego, y unos brazos que estrujaban y estrujaban. Es posible que ellos sí que tengan posibilidades de descifrar pensamientos y adivinaran sin dificultad mi mudo ruego, y entenderían el estridente grito que proferí pidiéndoles sus alas para volar al más remoto confín del universo donde esconder mi locura y enterrar mi cólera. El pájaro es capaz de alejarse, de escapar al sentir el menor síntoma de peligro. Basta una simple ráfaga de viento que arrastre una hoja, o un sonido que le llegara desde el mismo cielo y que acerara el viento desde los más recónditos lugares. Les solicitaría que me dejaran el rítmico movimiento de sus cabezas diciendo siempre sí, sí, sí... y sí. Sosteniendo la mirada de los pájaros se me había disipado la cólera. Qué absurdo es el destino. Por un momento he pensado que podría equilibrarse mi balanza, pero la lucecita que nuevamente martillea mi cerebro me ha devuelto a la realidad, la misma que me enseña mis manos gastadas de perseguir una quimera volando, y a mi hermano y su entorno, planificando mi futuro: "Lo mejor es que lo internemos en un psiquiátrico", se dicen unos a otros, y se complacen su acierto. ¿Lo mejor, para quién?, yo quiero seguir corriendo detrás de un sombrero empujado por el viento, o fumando alguna de las colillas que abandonáis. Internándome descargo la conciencia de mi hermano... ¿y la de ella?, y cargo la mía, porque yo aún soy consciente del futuro que se está formando en torno a mí. Mis requerimientos no son atendidos, ni siquiera escuchados y mis desabridos balbuceos no trasladan ningún mensaje. Sólo a mí. Sigo pidiendo ayuda con gritos desgarrados que no encuentran respuesta, y los mismos gritos desbaratan mis intenciones. Todavía me queda el consuelo de recurrir a súplicas, pero levantando mi puño lanzo una amenaza dirigida al viento, que repetidamente grita mi queja y traslada mi alejamiento. Es preciso que no declaréis mi locura, es necesario que toméis conciencia de que mi estancia en esta dimensión sólo es pasajera. Pero el que ha mirado en mi interior ya ha declarado mi locura. Siento que soy sacado de mi casa y me entra un miedo terrible, un miedo que sobrepasa la frontera de lo imaginable. Mis piernas se niegan a trasladarme. Los gritos acuden a mi garganta, y sólo sirven para acelerar mi partida, para dejar conciencias conformadas, para dejar preguntas sin contestación y confusión en muchas mentes. Espero que se retrate ante mí el tiempo que se va alejando, y veo la sombra que un día se alejó de mi lado, y una voz me habla desde mi interior. Una voz que posiblemente fue mi guía y que pretendió introducirme en su vereda... pero yo rehusé y creo que aún es su voz la que me enturbia. Aprieto las manos en los oídos para no escucharla, pero ya debería saber que es un gesto inútil, ya que es un gesto que repito con mucha asiduidad. Se repite en mi interior una frase que escuché hace mucho tiempo: "No hay mayor ciego que el que no quiere ver" y yo... ¿quiero ver? La voz siguió llamándome y yo seguí haciendo oídos sordos a su llamada, no sé si fue una cobardía, entonces no quise averiguarlo y fue cuando empecé a alejarme y a encontrar calor en mi soledad. Ella intentó darme fuerzas, pero a mí me fue imposible seguir a su lado. Me lo impidió mi altanería o la ambición de otras personas de la que me hice partícipe. Luego intenté regresar con ella a reanudar nuestro recorrido, pero fue ella la que se negó. Fue el primer objeto de mi deseo, la primera cosa que ambicioné realmente pero que se fue. Ahí empecé a desatar mi fantasía. Ahora vivo enclaustrado en mi ayer, pero no puedo aferrarme a él para alejarme de aquí. Un extraño desasosiego se apodera de mí, e imitando la conducta de uno de los compañeros, levanto los brazos y grito. Grito expulsando la rabia que me corroe. Grito para que ella me escuche y me perdone. Grito invocando a los pájaros del cielo para que acudan a mi lado. Me encuentro rodeado de almas situadas en la misma dimensión que yo. Si al menos pudiera conseguir su misma simpleza, podría conseguir su mismo alejamiento, y el mismo esfuerzo que hacemos dando vueltas alrededor del patio enfriará nuestra cobardía, y la esperanza de llegar al final, será recíproca. ** Abelardo Barceló Amorós emiliamanuela@hotmail.com Escritor español. Delineante de profesión, es discapacitado físico y escribe relatos y novelas. Reside en Alicante (España). === Poesía repartida (extractos) René Dayre Abella =================== *** Palabras de todos los días A Isabel, desde lejos. Con las palabras de todos los días te escribiré un poema. No faltarán las palabras casa, pan, nube, arena o avecilla. ¿Cómo olvidar las palabras más usadas en todos los idiomas? ¿Amor, vida, muerte o abandono acompañadas siempre de adjetivos? Ajadas o zurcidas por el uso no perderán jamás su encanto al susurrarlas. Escucha, una vez más, mi acento al pronunciarlas: "casa, pan, nube, arena y avecilla". *** A Isabel, por si recuerda A propósito de una vieja foto. Un pedazo de playa. Una gaviota. Una joven pareja devorándose a besos. El guiño cómplice de una Olimpus que detuvo el tiempo en una foto. Luego un barco de papel. Una pelota. Y un boleto de ida a la nostalgia. sin regreso. *** La tristeza "Tu est inscritte dans les lignes du plafond" Paul Eluard. En un viejo sillón de mimbre -el favorito de Musulungo- está sentada la tristeza. Me deslumbra la belleza de su rostro. Sobre todo sus ojos, que escrutan atrevidos los rincones y acaban posándose fijamente en mí. Me conmueve también su sonrisa, nunca tan cerebral como la que Leonardo le pintara a La Gioconda, pero apenas esbozada. La tristeza es una frágil muñequita. Es tan frágil que cuando la toco se deshace tímida entre mis dedos. ** René Dayre Abella renedayre@sbcglobal.net Escritor cubano (Banes, 1945). Docente egresado del Instituto Pedagógico "Manuel Ascunce Domenech", en Topes de Collantes, Cuba. En su país se desempeñó como educador de adultos enseñando los cursos secundarios de superación obrera y campesina. Formado además como técnico de nivel medio en la rama de la industria azucarera, trabajó como químico analista en varios centrales azucareros. Reside en Estados Unidos desde 1980. === Las cenizas del recuerdo Camilo Pequeño Silva ==================== La jornada se diluía en la residencia bajo un pálido y crepuscular cielo beige. En la lejanía, las mates montañas de caqui perfilaban sus precisas y escarpadas siluetas, matizadas por el nebuloso contraste de la tarde otoñal. Con un ligero movimiento de su mirada, pudo el señor Tomás observar el urbano valle de edificios y casas que custodiaban la frontera alquitranada de la autopista. Contempló el incesante discurrir del tráfico rodado a través del gran ventanal, sentado en el sillón del comedor. Sonrió, enarcando sus cejas con pueril entusiasmo al descubrir el paso de aquella ambulancia a lo largo del cinturón automovilístico, observando el destello multicolor del vehículo, casi adivinando el distante sonido de su sirena. -¡Ya están aquí los míos! -pronosticó el señor Tomás, escuchando todavía la sirena del automóvil. Pudo contemplar la escena una vez más. Amenazado por las rugientes llamas y el polvoroso humo que le gritaban del interior del edificio no tuvo miedo, no dudó, no vaciló, sabedor del riesgo que su misión suponía. Tras el hallazgo de su caído compañero decidió continuar, obstinado, con el firme objetivo de salir victorioso. Lo mejor, sin duda, sería el resultado: aquel joven y bello rostro pueril que, sin saberlo, ya siempre volvería a contemplar, lleno de gratitud, de complicidad, de eterna esperanza de que a pesar de todo, valió la pena haber pasado por allí. -¡Ya están aquí! -gritó el viejo, entre las pasmadas miradas del salón-. ¡Ya vienen por ahí los míos! -¡Óndia, tú! ¡Sempre el mateix! -saltó malhumorado Eugeni-. ¡Doncs a veure si t'emporten d'una puta vegada... ¡Boig! ¡Malparit! Encolerizado, tardó poco el señor Tomás en hacer el arduo esfuerzo de levantarse de su sillón y dirigirse con violencia hacia el viejo Eugeni, que trataba de defenderse con su recio bastón. Al entrar en el comedor, avisada por las voces, la enfermera se dirigió hacia los dos contendientes de la pelea, tratando de desenmarañar sus manos, brazos y uñas del ovillo de furia en que se hallaban. -¡Tomasín! ¡Haga usté er favó! -gritó la joven enfermera, tratando de desenredar las flacas extremidades de los dos ancianos-. Anda, tómese la pastillita, maho... -ordenó una vez reducido, abriéndole la boca con una mano, mientras que con la otra le introducía la pastilla. Tras un pesado despertar pudo observar aquella extraña y ligera ráfaga de luz que irrumpía en la densa oscuridad de la habitación, comprobando así la apertura de los grilletes de su prisión. Se dirigió, a tientas, hacia la rendija de la entreabierta puerta, notando la cálida y deslumbrante claridad tras la salida de su reclusión. Después de atravesar el deshabitado salón, decidió bajar por las escaleras hasta el patio exterior, con la dual y grata sensación de sentirse rejuvenecido y liberado. La residencia, pudo comprobar con deleite, aparecía yerma ante sus ojos, excepción hecha de su propia persona. Se dirigió hacia el portón de salida con la firme intención de fugarse de aquella reciente casa deshabitada. Cuando hubo traspasado aquella firme barrera a la libertad retomó por sorpresa una renovada e inocente sonrisa infantil. -¡Por fin están aquí! -exclamó, casi entre abruptas carcajadas-. ¡Ya han vuelto los míos! Con decisión dirigió su mano hacia la manilla de la portezuela del vehículo, y con una recurrente agilidad subió al asiento del conductor. Pisó con firmeza el pedal del acelerador e hizo girar la llave de arranque. Rugió el motor de la ambulancia, que el señor Tomás condujo hacia el valle de la empinada calle, haciendo sonar la sirena y gritando: -¡Ya vuelvo con los míos! Cuando hubo acompañado y acomodado al señor Tomás en la cama de su habitación, la enfermera dio una última reprimenda al viejo: -Y haga usté er favó de no vorvé a pegá a sus compañero, xalao... -¡Mala puta! -espetó el anciano, después de escupir al ojo de la enfermera la pastilla que había mantenido amagada bajo su lengua. Enseguida, la enfermera comenzó a gritar pidiendo el auxilio del resto del personal de la residencia, que una vez en la pieza, trató de librar el cuello de la enfermera de las manos del anciano, el cual todavía demostraba poseer una vigorosa fuerza física. No obstante, las dos enfermeras y los dos enfermeros que acudieron en auxilio de su compañera lograron reducir, no sin cierta violencia, el descontrolado furor del anciano. Tras esto, hizo aparición en la estancia la directora del establecimiento geriátrico que, deliberada e incompasiblemente, dio señas a sus empleados de encerrar a cal y canto al insurrecto hasta nueva orden. Más tarde se dirigió hacia el salón donde se encontraban los ancianos y, con rostro amenazante y colérico, sentenció: -¡Y como me entere de que alguien la vuelve a armar, le encerramos en el cuarto oscuro durante tres días! -y, observando orgullosa los atemorizados y sumisos semblantes de los ancianos, sacó un cigarrillo y lo encendió, dirigiendo la exhalación del humo a la cara del viejo Eugeni, que apremiante suplicó: -Si us plau, senyora... ¿Qué em podria donar una cigarreta? -¡Silencio, imbécil! Condujo la ambulancia hacia el edificio del internado. Bajó del vehículo en las inmediaciones de aquella avenida situada a las afueras de la ciudad, dispuesto a sofocar a destiempo la pretérita catástrofe. Le sorprendió descubrir que el edificio estaba intacto, huero de cualquier señal de auxilio. Vio abrirse el portón de la entrada principal y, a continuación, vislumbró las primeras figuras humanas desde que saliera de la residencia. Eran unas cuantas, entre las que se destacaban unas siluetas de mayor estatura. Al aproximarse, pudo observar la candidez de aquellas niñas que con agradecida sonrisa se dirigieron hacia él para abrazarle. Tras éstas, la figura de una mujer cuarentona que se dirigía hacia él le confundió. Frente a frente, la mujer esbozó la más bella de sus sonrisas, mostrándole a través de ella su eterno agradecimiento. Adivinando la perplejidad y la confusión del viejo, la mujer hizo un leve y resignado encogimiento de hombros: -Nada pudo sofocar el cáncer. Por descontado, la directora del establecimiento negó rotundamente (con la sumisa y cómplice defensa de sus empleados) haber tenido alguna responsabilidad en la decisión individual y particular de la joven enfermera de haber recluido al viejo en la habitación, y había creído dar por rescatado al mismo tras la evacuación del edificio. Asimismo, conjeturó la posible causa del incendio relatando al juez de guardia la fea costumbre (prohibida para todos los residentes y empleados del establecimiento) del viejo Eugeni de fumar a hurtadillas en su habitación cada vez que la enfermera salía tras acostarle. Mientras se abrazaban efusivamente, el viejo secó con sus dedos las lágrimas que se deslizaban por el rostro de la mujer, que en retrospectiva identificó con el de aquella niña cobijada en su memoria. Una gran sonrisa volvió a dibujarse en el rostro de la mujer mientras conducía al viejo hacia la alta figura que aguardaba delante de la puerta. Se reconocieron al instante, e intercambiaron un breve y silencioso guiño de compañerismo. -Tú también la salvaste, Ernesto. Resignadamente, pero con la alegría del reencuentro, contestó: -Nos volvemos a ver, Tomás... Subió la joven enfermera en el coche policial, envuelta en lágrimas. Le comunicaron que debería aclarar los hechos en comisaría. Los heridos leves, en su mayoría por intoxicación, fueron trasladados en ambulancia hacia el hospital de la ciudad, mientras que los empleados, ilesos todos, regresaron en sus propios automóviles a sus respectivos hogares. Una vez que los bomberos dieron por sofocado el incendio de la primera planta, comenzaron a recoger las mangueras y regresar a sus vehículos. Uno de aquellos observó cómo trasladaban el cadáver del anciano hasta el coche fúnebre, mientras escuchaba preguntar al juez: -¿Nombre y apellidos? -Tomás Irujo González -respondió el policía. -¿Edad? -Ochenta y dos años. -¿Lugar de nacimiento? -Logroño, La Rioja. Uno de los compañeros del joven bombero dio voz de aviso desde la cabina del coche. -¡Venga, Carlos, que nos vamos! -Voy. Confuso, recordando una vieja y triste anécdota de regreso a la central, decidió preguntar al conductor: -Papá. ¿Recuerdas cómo se llamaba aquel compañero del abuelo Ernesto? Sorprendido, evocando el triste recuerdo, inquirió: -¿El que entró en el edificio con él? -Sí. -Ya lo creo... Él fue quien pudo rescatar a la niña... Don Tomás Irujo González, el mejor amigo del abuelo... Después de su retiro no hemos vuelto a saber de él -hizo un movimiento del volante para dirigirse a la entrada de la autopista y, reaccionando, pidió una explicación-. ¿Por qué lo preguntas? El joven bombero vaciló, conteniendo una expresiva interjección: -No..., por nada... -contestó. Tras esto, el joven interrogó de nuevo a su padre-. ¿Por qué te hiciste bombero? El vehículo rojo hizo entrada en la autopista con rumbo a la central, mientras que en la vía de sentido contrario cruzó fugazmente una ambulancia que hacía sonar su sirena; el joven bombero creyó distinguir bajo la estridente sirena una voz que gritaba desde la cabina: -¡Ya vuelvo con los míos! ** Camilo Pequeño Silva franz_126@hotmail.com Escritor y docente español (Badalona, Barcelona, 1973). Profesor de inglés de enseñanza secundaria obligatoria y de bachillerato. Ocasionalmente se desempeñó como corrector para algunas editoriales como Zeta Multimedia. Textos suyos aparecen en Atramentum (http://www.atramentum.com) y Grupo Búho (http://www.grupobuho.com), entre otras publicaciones digitales. El relato "El génesis obrero" fue seleccionado en el Primer Microconcurso de Microcuentos de la página web Escritores de Chile (http://www.escritores.cl). === El poeta en el hotel Juan Ensuncho Bárcena ======================= (Nota del editor: en 2004 vio la luz el libro El poeta en el hotel, del poeta colombiano Juan Ensuncho Bárcena. Definido por su autor como una "colección de conjuros", este poemario de cien páginas está dividido en tres movimientos: "La flor de las aguas", "Vivir es fumarse" y "Para pintar en las paredes". El libro fue presentado en la tradicional taberna La Cueva, de Barranquilla, establecimiento que exalta la tertulia y la bohemia y en el que antaño se dieron cita nombres de la talla de Cepeda Samudio, Obregón y García Márquez. Las ilustraciones, que se ofrecen en hojas desprendibles para que el lector que así lo desee pueda disponer de ellas fuera del poemario, son obra de la venezolana Rosanna Faría. El libro puede ser solicitado a ediplumompox@yahoo.com). *** Trinidad A Mirta Ramos Tardes hay Que nos recuerdan Lo que fuimos Noches hay Que nos regresan Lo que somos También auroras Que dibujan el camino De las taruyas en flor *** Mi metafísica "El patio es el declive por el cual se derrama el cielo en la casa". Jorge Luis Borges. A mi bella madre. Cuando era niño Me sentía parte de los astros Que observaba En el patio de mis abuelos Tras las hojas de un árbol gigante Se escondían las luces Que me impulsaban a escribir Me llevó algún tiempo Comprender Que crecer es una forma De acercarme a las estrellas Hacer parte de la gran noche Que cubre al mundo *** Aspiro a ser viento En el último ahora Estaré conmigo Las pocas nubes Ni se percatarán del asunto Una triste fogata Enviará mi cuerpo desnudo A las esferas perdidas del humo Las cenizas que habité Se irán con la brisa Justo antes de la noche *** Resistencia Carate Se mueve gracias al Sol Que lo sostiene Sitio de navegación Y encanto Pueblo de atarrayas Canales Que conducen a otros tiempos *** Remolino A Juanita Contreras La gaita chuana Gira y gira Fluye hacia arriba Al escucharla El tiempo parece salir Escapar lenta mente Del caparazón De una hicotea *** Invitación Amigo Ven conmigo A buscar caracoles En la orilla del caño Vamos Antes de que el carrao Aparezca Y se los coma Ven amiga Entremos a la espiral Visitemos el alma Del caracol Que está más allá De la dura concha Vamos Antes de que la noche Caiga sobre nosotros Ven Amada Sigamos las huellas del agua Hasta llegar al centro Del caracol Donde escucharemos las voces Del tiempo sin fin Vamos Antes de que el caño Borre nuestros pasos Ven conmigo Al ombligo del mundo Caminemos descalzos Por el barro Busquemos caracoles En la orilla del caño *** Camino Aquí voy Sin querer queriendo Rumbo a mi propio nacimiento Estoy siendo Lo que el pasado Y su mar de laberintos Teje En las áridas cumbres Del mañana Hoy Mi corazón respira *** Futuro Sólo me mantiene con vida Lo que nunca llegaré a ser *** Himno A Ruven Para ser Hay que estar loco A los demás Les espera una vida Cuerda Atada al cuello *** Promesa Te atreverás a decir Que estoy reloco Está bien Para ti Jamás seré Un recuerdo *** Sin respuesta ¿Cuántas veces He de volverme loco Y olvidar lo que soy En aras de ser? *** Actualidad Está in Hablar de diferencia Con razón Tanta indiferencia *** Robótica Quienes no viven Para Ser Lo hacen parecer Y luego Perecen *** Tradutore traditore Los poetas oficiales Son perfectos Traductores De la realidad Y la belleza *** El poeta en el hotel A Katho El poeta en el hotel Está solo A la intemperie Desamparado Es de noche ya Y sus huesos piden compañía El poeta en el hotel Piensa en su llegada a la ciudad Hace varias horas Se recuerda abriendo Las ventanas de la habitación Lo primero que ve Es la casa en que Zepeda Mataba lagartos en el patio Luego observa el río Su silencioso paso de siglos Frente a la urbe contaminada Repara entonces en su cama doble Y sueña con su amada Si estuviera aquí -se dice Disfrutando como yo De este momento De este paso De esta lectura El poeta en el hotel Se baña, se seca Se viste, se peina Y sale a enfrentarse con la vida Pasa el tiempo veloz Como una improbable flecha Que termina clavada en el corazón Como el amor Como la muerte El poeta en el hotel Está solo Aunque dos bellas mujeres Lo han traído hasta aquí El poeta en el hotel Se entrega al silencio de la noche El poeta en el hotel Despierta y se sacude Los sueños de última hora Se baña, se seca Se viste, se peina Sale de su habitación En la espera del ascensor Mira hacia la esquina En la que meses atrás Se sentaba a fumar A ver pasar el tiempo Ahora no hay nadie en el lugar El poeta en el hotel Observa su vida Desayuna, se consiente Prepara su viaje de regreso A su hotel de cada día A los brazos de su amada A los pasos sobre el asfalto El poeta en el hotel Es rey por un día Es oración y templo ** Juan Ensuncho Bárcena juanensuncho@yahoo.com Poeta y periodista colombiano (San Marcos del Caribe, 1975). Reside en Cartagena. En 2004 publicó el poemario El poeta en el hotel. Estudió comunicación social entre Barranquilla y Cartagena. Comenzó su carrera a los 14 años con una serie de reportajes televisivos sobre la región de La Mojana (Sucre). Ha realizado cortometrajes, documentales y video clips desde 1999. === Tres cuentos Noelia Rodríguez ==================================== *** Contando estrellas Las estrellas se reflejaban en las brillantes pupilas de las muñecas de la pequeña Roversi. Desde la ventana, a los pies de la abuela, la niña se dedicaba a ver la noche, a representar animadas reuniones en las que ella era la única que hablaba y respondía a sus imaginarias preguntas, pues tanto las muñecas en su plástica quietud, como la abuela, inmóvil en el letargo de su enfermedad, no podían más que estar presentes. Hacía tiempo que la abuela se había quedado sin hablar y sin oír; con la mirada perdida en la nada. Desde entonces, la niña se dedicaba a quererla como quería a sus hijas de juguete y a su madre, Marta. Todas las noches Marta colocaba la silla de la anciana frente a la ventana de la casa para que la brisa nocturna la refrescara, mientras ella se dedicaba hacer algún oficio retrazado, de esos que nunca faltaban en el pequeño hogar que mantenía. Marta solía hundir sus pensamientos en las deudas pendientes, en las medicinas que se le tenían que comprar a la anciana enferma, en su propio cansancio diario, y apenas atendía al resto de la casa. Sólo las palabras de Roversi la sacaban de pronto de su concentración: "Mamá, antes de que la abuela se pusiera mal, me dijo que si alguien contaba todas las estrellas del cielo se moría enseguida". Marta se inquietaba ante comentarios como esos, pero sin querer perder el hilo de sus labores e ideas, le respondía sin mucho interés: "A lo mejor sí, pero yo creo que nadie puede contar todas las estrellas". De todas formas, Roversi se la pasaba regañando a sus muñecas, que según ella, se quedaban viendo el cielo contando las estrellas, y apenas su madre volvía al silencio de sus oficios, se dirigía a la anciana en busca de apoyo, y refunfuñando le repetía con tono angustiado: "Mire, abuela, estas niñas no me quieren hacer caso, después se mueren y no va ser culpa mía...". Esa mañana, Marta en vez de ir a trabajar como de costumbre, se fue al hospital con la abuela que había pasado mala noche, así se lo explicó a Roversi mientras la llevaba a la casa de la vecina que siempre la cuidaba. La niña pasó la mañana preocupada, no dejaba de ver a sus muñecas, a las que también veía enfermas. En la noche sonó el teléfono, la vecina le dijo que era su madre, avisando que permanecería en el hospital; como la niña insistía en hablar con Marta, la vecina le cedió el teléfono: "Mamá", le dijo con la voz baja de un secreto, procurando que sus muñecas no la escucharan, "no vamos a sentar más ni a mi abuela ni a las muñecas en la ventana. Yo creo que ellas andan contando estrellas y a lo mejor anoche las contaron casi todas...". *** Volteando la almohada Marina dio un grito de sobresalto y de inmediato abrió los ojos. Su suegra, una señora llena de años y de fuerzas, le recomendó desde la sala que volteara la almohada, y así lograría un sueño tranquilo. Marina miró el reloj en la pared, pasaba la media noche, entonces detalló la cama, estaba sola con las sábanas, y mientras se recostaba para dormir nuevamente, le contestó a su suegra con desdén: "Qué voy a estar volteando almohadas... Mire la hora que es y su hijo Fabián no ha llegado... parece que hoy piensa dejarme durmiendo sola". La anciana entró a la habitación y mirando a la muchacha en la cama le preguntó: "Marina, ¿qué estabas soñando? ¿O es que aún estás dormida?". Marina, sin abrir los ojos, antes de dormirse por completo, casi uniendo sus palabras al letargo del sueño, susurró el nombre de Fabián. La suegra se quedó mirándola con desconcierto y, moviendo la cabeza con preocupación, salió a la sala repitiéndose: "La almohada se la voy a tener que voltear yo, para que no siga alucinando cosas. Si Fabián tiene como seis años que nos abandonó". *** La estrella del cuarto Había tantas estrellas que el pequeño Alfredo recordó de inmediato a su abuela. Sentía un poco de nostalgia, pero estaba lleno de valor y serenidad, apenas comenzaba a entender que allí todo era diferente, incluso el dolor de dejar a las personas amadas era distinto, por algo será que el cielo es el cielo. Alfredo se sentó a observar las estrellas, entonces volvió a recordar a la abuela, tan buena, pese a que por su carácter iracundo y huraño, pocos la querían en el pueblo. Sin embargo, era la única mujer que le arrullaba en las noches y le contaba historias con héroes muy parecidos a él. Quizá era estricta, pero había hecho de la corta vida del niño algo entre mágico y especial. En las noches solía llevarlo al patio a mirar las estrellas, se quedaba viéndolas como atontada: "Ver las estrellas es la única forma de unirse con las personas queridas que han muerto, porque están muy cerca de ellas; si las ves, sabes que tus muertos las pueden estar viendo también...". Alfredo al principio entendía poco de aquella explicación, pero con los años aprendió a creer que en las noches, su madre y su abuelo, seguramente se unían a él por medio de los pequeños cuerpos de luz que inundaban el cielo. Cuando Alfredo enfermó y debió quedarse en cama, la abuela pintó una gran estrella en una de las paredes de la habitación del niño, era la mejor manera de que no extrañara sus nocturnales salidas al patio. Dos años pasaron, y el pequeño empeoraba en salud, incluso había momentos en que el pueblo entero pensó que moriría sin remedio. Sólo que algo que decían milagroso lo devolvía a la vida. La curandera que lo atendía a diario había dicho a la abuela que nada se podía hacer por la salud del niño. "Es más", explicó con tono solemne, "Alfredo está vivo y sufriendo sólo porque se empeña en aferrarse a la vida, quizá no quiere apartarse de ti...". Aquella tarde la abuela entró a la habitación del niño; Alfredo respiraba con dificultad, pero sólo ver a la abuela sonrió, la señora guardó silencio y le dijo lo más calmada que pudo: "Tú me has acompañado tanto, a lo mejor Dios lo que quiere es que ahora acompañes a otras personas del cielo...". Luego rezó con el pequeño y le dijo que si tenía miedo de cualquier cosa sólo debía mirar la estrella de la pared y tendría valor. Esa noche Alfredo llegó al cielo. Mientras estaba sentado, deseaba poder decirle a la abuela que desde su llegada no había dejado de mirar las estrellas, porque sabía que ella también las estaba observando para unirse a él. Además, hubiera querido decirle que no se asustara; si no veía la gran estrella de la pared de la habitación, es que en su último momento en la tierra, en busca de valor y compañía, había decidido traérsela al cielo. ** Noelia Rodríguez noe_pico@hotmail.com Escritora venezolana. Reside en Guatire, Miranda. Licenciada en artes por la Universidad Central de Venezuela y estudia la licenciatura en educación por la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez. Es profesora de castellano de tercera etapa de Educación Básica. Relatos suyos han aparecido en el diario El Nacional y reseñas en un medio corporativo de la Compañía Anónima de Administración y Fomento Eléctrico (Cadafe). Obtuvo una mención honorífica en el Concurso de Cuentos de Terror del 62º Aniversario del diario Últimas Noticias por "El señor Leopoldo (2003) y es una de las ganadoras del Certamen Mayor de las Artes y las Letras del Conac, Ministerio de Cultura y la Casa Andrés Bello (2004). Produjo entre 1994 y 1995 un periódico comunitario en Guatire. |||||||||||||||||||||||||||||| EL BUZÓN ||||||||||||||||||||||||||||| === Buscando a Nelson Álvarez Licona ====================================== 13 de marzo de 2005 Hola: Fui compañero de Nelson Álvarez Licona en España y estoy intentando localizarlo. Escribí a una dirección de contacto que aparece en vuestra página, pero no existe ya. ¿Tenéis otra dirección más actualizada? Lo agradecería mucho. Aníbal Vivaceta de la Fuente azulbel@vtr.net ||||||||||||||||||||||||||| POST SCRIPTUM ||||||||||||||||||||||||||| "El compromiso del escritor debe ser con la verdad, ya sea una verdad insinuada o una verdad con mantillas. Generalmente los escritores tendemos a hablar por señas. Un escritor tiene que cumplir con los mismos compromisos que cualquier otra persona, lo único es que debe tener la conciencia un poco alerta". Francisco Ayala, durante la celebración de su 99º cumpleaños y presentación de su más reciente libro, La invención del Quijote, el 16 de marzo de 2005. === Cómo publicar en Letralia, Tierra de Letras =========================== Antes de enviarnos algún texto para publicar en Letralia, le agradecemos leer nuestras condiciones de publicación. Usted puede verlas en el Web en http://www.letralia.com/tierradeletras/publicar.htm. Si lo prefiere, puede recibirlas por correo electrónico escribiendo un mensaje a info@letralia.com, con la palabra "Condiciones" en el subject, o simplemente dando un doble click de ratón en el enlace siguiente: mailto:info@letralia.com?subject=Condiciones. ########################################################################### El alojamiento de nuestra página web en http://www.letralia.com es cortesía de Abracaadabra Network (http://www.abracaadabra.net) Letralia, Tierra de Letras, es una producción de JGJ Binaria (http://www.letralia.com/binaria) y circula para el mundo de habla hispana desde Cagua, Venezuela ########################################################################### Atentos: nuestra próxima edición circula el lunes 11 de abril de 2005