Poemas
Ana María Debali
Selva
Resbala el agua
por la ladera de la montaña
cae a un pozo profundo, cristalino y frío
donde puedo mirarme y ver allí reflejados
todos los sueños míos...
Las orquídeas se amarran a los árboles
sutiles, vanidosas
y su hermosura destaca en el follaje
como el color del pico del tucán
y su plumaje,
negro con rojos, amarillos y rosas...
Los troncos de los árboles
inmensos, se estiran hacia el cielo
y cruzan entre ellas
los reflejos del sol
que se asoman a verlos.
Murmullo de selva
romántica, imponente y bella
donde cantan los pájaros
se mecen las flores en las ramas
y su hermosura pasea por mi alma.
Caribe
Eslabones de copos de algodón
forman las nubes
sobre las aguas azules y verdes
del Caribe
Reflejos de plata va irradiando
el sol sobre sus aguas
y se enfrían las arenas tibias
con la espuma
que arriman las olas
a la playa.
Allá en el horizonte
el azul es profundo.
Y transparente, cristalina y color esmeralda
es el agua de la costa
que deja ver los corales y las algas.
Veteado está hoy el mar
de azules y de verdes
de blancos de las olas
que juegan a brincar los malecones
meneando los peñeros amarrados
y golpeando las rocas...
Que no me delate
Que no me delate el viento
cuando pase por tu lado
cuando te diga al oído
que todavía te amo...
Que el torrente de mi lluvia
moje tu cuerpo y el mío,
pero que nunca te diga
que todavía no te olvido...
Y que el cielo se oscurezca
y que la luna se esconda
pero que deje encendida,
para mí, sólo una estrella...
Eso será suficiente
para que te sienta mío,
y te buscaré en el cielo
en la noche y en el río...