Nota del editor
En agosto del año pasado fue presentado, con palabras de la poeta Edda Armas, el poemario Daño oculto, que publicado por el prestigioso Oscar Todtmann Editores es el tercer título de la venezolana Georgina Ramírez, propulsora de la organización La Parada Poética. “Desmontadora de oscuridades recónditas del alma, Georgina Ramírez elige purificar la intención de su escritura abordando sujetos que padecen, pues no quiere ‘domesticar la rabia’ sino hurgar núcleos de dolor, aflicción y heridas esenciales”, dijo Armas de este libro en la presentación.
Mantis
Se abre la pierna para fracturar el mundo
Y la boca
que en vano intenta desviarse
se enreda
Un caudal en ráfaga
hace estragos
los olores arañan
la lengua devora todo resto
cae rendida ante el follaje
perece
Hay presas que merecen ser mordidas
El último alfabeto
Te aprendí
en todos los idiomas
hasta el peso exacto de tu cuerpo
tu mirada
…………tus caminos
Estabas
entre mis manos
y no pude percibirte
sostuve mi puño
para no perderte
sólo la nada
me pertenece
Intemperie
Él le regala su último adiós
La despide con la mirada envejecida
como quien ha visto tanto amanecer a su lado
que conoce todas las noches de su cuerpo
Ella le sujeta el alma
la anuda con palabras que ya no dicen
que son sólo errancia
Promete otra noche
una última noche estragada que no sepa de mañanas
que estalle en el temblor de las carnes
Hay recuerdos que no saben despedirse
Oráculo
Tengo tanta infancia blindada
me veo caer
y me aferro
¿Dónde los rostros que te reflejan
extraviados en lágrimas
que entran por mi ventana
y se revelan
en las letras
de un poema inconcluso?
En cada esquina de esta casa
está tu sombra
salpicada de noche
amaneciendo
Padre
no apagues la luz.
En el semáforo
Ellos te miran
esconden sus miedos
…………lavados al sol
la armadura de cristal
separa su hambre
…………de tu duda
Inevitable la luz verde
Credo
No basta una plegaria
divagar en la tiniebla te ha extraviado
he nadado en la locura
y en tu nombre
madre
hoy me confieso
De pronto tus alas desconocieron el vuelo
y estalla en la ventana el mañana
la luz se hace miedo
…………..te pierdo
No supe de esta oscuridad que eras
y deshago los peldaños que me llevan a tu infierno
ya no hay camino en ti
Se diluyen los días que te nombran
Nunca has sabido levar anclas
………….quizá por eso el naufragio
la deriva en los ojos
Plegaria
Dónde los deditos de tus manos
niño triste
tarareando una canción
racimos púrpura
los gestos de tus brazos
La noche
engulle la miseria que desgarra tu día
Tañes tu sonrisa
a la tierra
que te arrulla
amamanta tu insomnio
Duerme niño
en tu cama de cemento
refúgiate del frío
que sirvan para algo
los periódicos de mi país
Puntos de sutura
Amor sí
lo era
Dos cuerpos callados
ya no atentos al roce
De ese bocado primigenio
sólo una promesa queda
la taza de café sobre la mesa
que se enfría lejos de tus labios
en desconcierto
por vez primera
desde tu partida
dejo caer la gota que te nombra
- Poemas de Georgina Ramírez - domingo 17 de abril de 2016
- Extractos de Daño oculto, de Georgina Ramírez - miércoles 30 de marzo de 2016