Un adicto a comer sueños, una manzana que comete un suicidio frustrado, un solitario creador de mundos, una mujer que muere varias veces consecutivas, un hombre que encuentra erotismo en las ecuaciones, un ser que sólo existe en los abismos submarinos, un escritor bloqueado que sólo puede escribir epitafios. ¿Dónde si no en el terreno de la ficción pueden conseguirse semejantes personajes?
Son estas algunas de las historias con las que el escritor español Daniel Bernal Suárez (Santa Cruz de Tenerife, 1984) ha compuesto su muy nutrido Manual de crucificciones, un compendio de brevedades en las que el absurdo, lo extraño, la irrealidad y el humor se conjugan para brindar al lector una experiencia lúdica a lo largo de 172 páginas.
Manual de crucificciones
Daniel Bernal Suárez
Microcuentos
Ediciones Idea
Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias (España), 2019
ISBN: 978-84-17764-38-8
172 páginas
Contrariamente a lo que suele creerse, no es empresa fácil condensar en apenas un manojo de líneas una historia redonda y que, además, deje al lector con el grato sabor de haber leído algo con sustancia: pocos de los relatos que conforman Manual de crucificciones sobrepasan la extensión de una cuartilla. Mucho menos lo es congregar tantos en un solo volumen —estamos hablando de 79 textos— y que cada uno sea una visita a una instancia particular de esa realidad otra que fluye por la mente del autor.
Del cuento breve como una de las bellas artes
De madrugada, cuando nadie repara ya en sus alborotos, las latas de cerveza matan a los niños. Los estrangulan con sus garras metálicas, rajando la tierna piel de los infantes. Sorben la sangre que mana con sus minúsculas bocas. Se ceban con los menores de cinco años. Buscan al rey de los abstemios. Una estrella y un plan horroroso las guían. Por eso, huye, huye de la proximidad de esos bares, pide auxilio, alerta a las autoridades, escóndete. Ya sientes rechinar la apertura de aluminio.
El anterior es el cuento “Infanticidio”, una de las historias de este Manual de crucificciones que hoy presentamos a los ojos del lector de Letralia. Daniel Bernal Suárez logra, con un estilo muy depurado —un resultado, aventuramos, de su oficio como corrector y editor—, establecer en unas pocas líneas un pequeño pero sólido universo de lo insólito que echa mano de sus propias reglas para forjar sus artefactos narrativos, que no otra cosa son los microrrelatos que se encuentran en sus páginas.
Manual de crucificciones es una declaración de intenciones respecto a la manera como Daniel Bernal Suárez aborda la literatura fantástica como una ruptura en la inercia de lo cotidiano.
Adicto confeso al café, el autor tinerfeño demuestra en este libro su capacidad para dotar al lenguaje de una esencia personal que va más allá de un manejo eficiente de la palabra. Así, los cuentos que conforman esta colección se pasean por los registros más diversos siempre en la búsqueda de ese golpe de efecto que atrape al lector: está, sí, el clásico final sorpresa, pero lo acompañan la disquisición semántica y la metaliteratura, la humanización y la cosificación, la reelaboración del mito, la fantasía onírica, la constatación de lo terrible.
Publicado en 2019 por Ediciones Idea, Manual de crucificciones ubica a Daniel Bernal Suárez como un autor singular en el arte del cuento breve, lo que no es poca cosa si se piensa en los gigantes de la brevedad que han hecho cauce a través de la narrativa en la lengua de Cervantes. El libro es, además, una declaración de intenciones respecto a su manera de abordar la literatura fantástica como una ruptura en la inercia de lo cotidiano, un punto de inflexión que no pretende proporcionarle al lector respuestas, sino obligarle a hacerse preguntas.
Mapa de un manual
Experimentado autor que ha dictado talleres literarios en varios espacios, Daniel Bernal Suárez agrupó en siete secciones los cuentos de Manual de crucificciones, configurando de esta forma una suerte de mapa para llevar al lector a través de las diversas sendas que ofrece el libro.
Abre la colección el segmento “Fantasmas, sueños y espejos”, con cuentos protagonizados por los elementos ya anunciados en el título como vehículos para explorar las dudas en torno a la realidad y sus manifestaciones aparentes. Le siguen “Vivencias oblicuas”, donde la realidad se tuerce hacia lo inaudito; “Mitoilógicas”, en el que el autor reelabora en clave intertextual algunos mitos, y “Una de las Bellas Artes”, cuyas historias tienen como tema común el crimen.
En los segmentos siguientes, “Rituales de apareamiento” y “De la condición humana”, están reunidos varios relatos sobre lo que nos define como especie: en aquél el sexo y el erotismo, desde una perspectiva lúdica y convertidos en formas de expresión del absurdo; en éste, arquetipos de lo humano transformados, gracias al buen hacer del autor, en pequeñas joyas poéticas.
La sección final, titulada como el volumen, “Manual de crucificciones”, contiene una decena de relatos en los que la literatura es protagonista, bien en la forma de homenajes a autores que han marcado a Daniel Bernal Suárez o a través de subterfugios metaficcionales que van desde un Objeto Verbal No Identificado hasta un émulo de Borges, pasando por un personaje que aborrece su naturaleza ficcional:
Si al menos aquellos que me acompañan despertaran a la Verdad Suprema del Arte, a este insoportable Fingimiento: el mundo entero es simulacro. Pero cada uno calla y acarrea a cuestas su pesar. Heraldos de leyes inalterables somos, repiten apáticos, sin esperanza alguna. ¿Podré algún día levantar la cabeza de la hoja y dar la sorpresa?
Manual de crucificciones es una decidida apuesta de su autor por lo singular, por lo extraño, por la literatura como juego y expresión de inteligencia, y sin duda será una lectura que no dejará a nadie indiferente.
Manual de crucificciones, de Daniel Bernal Suárez, es una lectura que desde la Tierra de Letras recomendamos sin dudarlo.
Un autor con voz propia
Manual de crucificciones es apenas una muestra del trabajo de Daniel Bernal Suárez, y si en sus cuentos es innegable la presencia de un lenguaje altamente poético, es porque el libro que hoy nos ocupa se suma a una trayectoria que incluye otros cuatro títulos, todos poemarios: Escolio con fuselaje estival (2011), Corporeidad (2012), Odiana (2014) y El tiempo de los lémures (2014).
Con una carrera también como crítico literario, gestor cultural y editor —el autor dirige la revista La Salamandra Ebria—, ha ganado los premios de poesía Ciudad de Tacoronte (2008), Luis Feria (2011) y Pedro García Cabrera (2013). En 2019 obtuvo además el premio de poesía del concurso Nuevas Escrituras Canarias por Meditaciones del pez austral.
Textos del autor han sido publicados en las antologías Identikit: muestra de poesía española reciente y Poesía canaria actual, así como en una veintena de medios y revistas especializadas de España e Hispanoamérica. En Letralia figura desde 2009 una selección de poemas de su libro inédito Los tallos oculares.
Asimismo, fue presidente de la Sección de Literatura y Teatro del Ateneo de La Laguna en el bienio 2017-2018 y ha ejercido labores de producción en distintos festivales culturales de Canarias. Sobre esto y más se puede leer en su web, danielbernalsuarez.com, en la que están disponibles muestras de su trabajo literario.
Un estilo bien definido, la capacidad para hacer del lenguaje una herramienta a la vez lúdica y de compromiso con las inquietudes intelectuales del hombre, y una dosis generosa de humor e ironía, hacen de Manual de crucificciones una lectura que desde la Tierra de Letras recomendamos sin dudarlo.
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