Reseña de “Una novela criminal”, de Jorge Volpi, por Mauro Pérez Bravo

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Una novela criminal
Jorge Volpi
Novela
Premio Alfaguara de Novela 2018
Alfaguara
México, 2018
ISBN: 978-8420432274
504 páginas

En las últimas décadas en México, la procuración y administración de justicia han sido foco de atención a nivel internacional. Uno de los casos más conocidos y mediáticamente más populares, desde luego que es el de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera. El gobierno mexicano sufrió la crítica nacional e internacional debido a que El Chapo logró fugarse de prisiones federales de máxima seguridad en dos ocasiones. No obstante, existe otro caso que también logró cimbrar la institucionalidad, e incluso, las relaciones diplomáticas de México: la detención de la ciudadana francesa Florence Marie Louise Cassez Crépin, así como la de su pareja sentimental, el ciudadano mexicano Israel Vallarta.

Florence e Israel fueron acusados por el Gobierno Federal de México de liderar en la Ciudad de México un grupo delictivo dedicado al secuestro, “Los Zodiaco”. Este es el tema que el escritor mexicano Jorge Volpi desarrolla en su último libro, Una novela criminal.

Por momentos pareciera una crónica; luego, una entrevista; en ocasiones es la imaginación prolífica del autor, pero todo el entramado de Una novela criminal confluye en una idea: la detención de Florence Cassez en condiciones irregulares.

Una novela criminal es un poderoso thriller que, por momentos, recuerda párrafos de novelas policiacas emblemáticas como A sangre fría, de Truman Capote, o El halcón maltés, de Dashiell Hammett.

Un gran sector de la sociedad mexicana en su momento tuvo muy claro que Florence Cassez e Israel Vallarta debían ser procesados y permanecer en prisión por haber cometido el delito de secuestro. México es un país que durante años ha sufrido y padecido de una violencia y de la comisión de delitos al amparo y aquiescencia de las autoridades, dejando tras de sí un camino pavimentado de impunidad y negligencia, por lo cual las autoridades mexicanas no podían permitirse el lujo de que unos “secuestradores” salieran de prisión por “irregularidades” en la detención.

Una novela criminal vino a cimbrar las certezas (al menos las de quien escribe esta reseña) sobre la culpabilidad o inocencia de Florence Cassez y de Israel Vallarta.

Escrita con la inteligencia y fluidez que caracterizan las novelas de Jorge Volpi, Una novela criminal es un poderoso thriller que, por momentos, recuerda párrafos de novelas policiacas emblemáticas como A sangre fría, de Truman Capote, o El halcón maltés, de Dashiell Hammett. La historia narrada por Jorge Volpi es emblemática porque puede ser (y de hecho lo es) el caso de muchos mexicanos, procesados por el aparato de procuración de justicia, en el cual casi nadie confía. A diario, muchos mexicanos y extranjeros son detenidos por la policía sin conocer los motivos, sin saber a dónde acudir, quedando en un abismo de incertidumbre.

Es una historia construida eficazmente, producto de la ficción, porque toda novela, por más histórica y documentada que esté, siempre será una ficción, una expulsión de la mente del escritor, en donde por momentos pueden confundirse la verdad con la imaginación, la realidad con las suposiciones, el corazón con la razón.

En toda novela hay protagonistas y antagonistas; ya sabemos quiénes son los primeros, ¿quién podría ser el antagonista de unos presuntos criminales como Florence Cassez e Israel Vallarta? El entonces secretario de Seguridad Pública Federal, durante el gobierno del presidente Vicente Fox, el ingeniero Genero García Luna, es un personaje de la política mexicana con cuestionamientos serios en su actuar como líder de la seguridad pública mexicana. Desde su posición como funcionario federal, él defendió ante medios de comunicación la detención de Florence Cassez y de Israel Vallarta. No sabemos si el ingeniero García Luna estaba enteramente convencido de la culpabilidad de Florence y de Israel, pero sí estaba convencido de que la detención fue realizada en los términos legales correspondientes.

Un momento culmen que Volpi pone en la primera parte de su novela es la liberación “en vivo” de las víctimas secuestradas por el grupo delictivo de “Los Zodiaco”. En los principales noticiarios matutinos de México, el 9 de diciembre de 2005, millones de mexicanos presenciaron, a manera de espectáculo y crónica policiaca, la liberación de las que serían, aparentemente, las últimas víctimas de la banda “Los Zodiaco”.

Jorge Volpi reúne tantos elementos como le son posibles. Comienza con certezas y termina con dudas.

Con una prosa seductora, Jorge Volpi recrea con magistral cadencia los hechos que acontecieron esa mañana, cuando personal de la Agencia Federal de Investigaciones y reporteros acudieron al lugar exacto en donde se encontraban las presuntas víctimas de secuestro: Ezequiel Yadir Elizalde Flores, Cristina Ríos Valladares y su hijo de diez años. Violando toda presunción de inocencia, y las garantías individuales de las personas involucradas, los reporteros, los medios de comunicación, se convirtieron en jueces, condenando a las y a los involucrados, sentenciándolos mucho antes de que comenzara el juicio.

Una novela criminal es un conglomerado bien estructurado de testimonios, entrevistas, notas periodísticas y televisivas, y mucha inteligencia del autor, que pretende describir las circunstancias de tiempo y lugar que giraron en torno de la detención de Florence Cassez y de Israel Vallarta. Hubo muchos actores involucrados, desde empresarios cercanos al poder hasta políticos mexicanos cercanos a los poderosos empresarios, medios de comunicaciones, funcionarios públicos de primer nivel. Todos, en algún momento, nos involucramos con la detención de Florence. Había elementos para su detención, pero también para su liberación; unos pedían que se procesara debidamente, otros apelaban a su libertad inmediata. México se confrontó con Francia, los presidentes de ambos países se sentían incómodos uno frente a otro por el caso de Florence.

Después de esos años, algunos estuvimos convencidos de la culpabilidad de Florence; otros, al contrario, sabíamos que merecía la libertad, todo con base en certezas y suspicacias. El mérito de Una novela criminal es hacer temblar esas creencias, para un lado o para el otro, sin justificar nada, y sin enjuiciar a nadie. Jorge Volpi reúne tantos elementos como le son posibles. Comienza con certezas y termina con dudas: características propias de una excelente investigación y de una narrativa que ha hecho de Jorge Volpi uno de los referentes de la literatura mexicana.