Cuántos valores humanos hay como estos escondidos en la realidad venezolana, que tienen algo que contar sobre los avatares por los que ha transitado nuestro país. Me emociona saber que personas como esta hermosa Señora, dama de abolengo y filiación proveniente de familias con historias políticas, culturales y científicas, a su edad; tenga y pueda contarnos de su vida y de lo que ha vivido, todavía, en su edad madura de conservación y salud sin igual tanto por su lucidez mental como por su estado de ánimo. Si has tenido una buena y bella infancia como una sana juventud, tu longevidad es el costo de esa juventud y “La felicidad tiene la virtud de suprimir la vejez” (Kafka). Larga vida para esta bella dama.

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