Publica tu libro con Letralia y FBLibros Saltar al contenido

En torno a la praxis médica del adiós

lunes 21 de mayo de 2018
¡Comparte esto en tus redes sociales!

En torno a la praxis médica del adiós, por Dora Andara

Exilios y otros desarraigos. 22 años de LetraliaExilios y otros desarraigos. 22 años de Letralia
Este texto forma parte de la antología publicada por Letralia el 20 de mayo de 2018 con motivo de arribar a sus 22 años.
Lee el libro completo aquí

A Luvi
¿Quién nos ha vuelto de este modo para que
todo lo que hagamos esté en aquella postura
de uno que se marcha?

Rilke

Un exilio entre otros exilios. Otro momento de lo humano, otros nombres, otro matiz que aún no alcanza el cuerpo de la letra, un cuerpo al que no ha llegado su propia voz.

 

I

Un cuerpo sujeto a la praxis de otros. El del paciente que se deja, la ilia de José Solanes.

 

Una ausencia de batas desechables, la camilla desnuda, un informe escrito a mano… clara escenografía de un espacio en mudanza, al que ya no se pertenece.

 

II

Él es mis piernas, vive en cada uno de mis pasos, casi como mis padres. Nunca supe cuándo dio el definitivo, cuándo atravesó el largo pasillo con el igualmente largo nombre de cromointerferencia de color aditivo. Hasta el mejor cirujano puede dejar un corazón sin suturas.

 

III

Allí está, recibiéndome con una fiesta en su sonrisa y esos ojos tan limpios.

“Ahora trata de subir lentamente la pierna. ¿Esto duele?”.

Con ella me daba el poco occidental lujo de hablar desde las articulaciones, desde los huesos. Mis mensajes jamás fueron texto borrado sin respuesta, raramente hablé con la contestadora.

*

Una ausencia de batas desechables, la camilla desnuda, un informe escrito a mano… clara escenografía de un espacio en mudanza, al que ya no se pertenece. Un presente que, sin querer advertirlo, me colocaba en el pasado. Un adiós fuera del abrazo y un mensaje de texto que no borro: “Me voy el viernes”.

Lo agradezco. Pero sí, eso duele.

 

IV

Veinte años de conversas sobre arte, filosofía, poesía. Veinte años de facturas, prescripciones, llamadas, récipes, informes.

Veinte años que ahora simplifica una voz malhumorada: “El doctor se fue… ya le busco su historia, llévesela”. Diez páginas, una despedida que no fue. Veinte años de cuerpo ofrendado. El cuerpo fuera de la historia, la historia del cuerpo.

 

Mi acto de fe en quien quedó en su lugar se convirtió en el camino al cadalso.

 

V

No practicaba la medicina tradicional china, mas en sus manos mis piernas recuperaban su antigua dicha animal: Asia desplegaba sus milenios.

Yēd, yï, sām, sé, ng, lug… todavía me sorprendo contando en cantonés mientras cumplo con la tarea de rutina. No hizo de su partida una agenda secreta, intercambiamos nuevas sobre nuestras vidas en la distancia, le pregunto, me orienta, nos encontramos en la red. Eso hace bien pero mis rodillas acusan el golpe: en el desierto ningún ejercicio virtual podrá rehabilitarme de su partida.

 

VI

Cuando el primero se fue, tocó recorrer calles, páginas, revisar agendas telefónicas, buscar sustituto. Acudí a la primera consulta con un derecho vestido de ruego: “Si se va, le agradezco me informe”. Sostuvimos una relación de segundas nupcias médicas. Un decenio en el que la vida parecía vida querida. Finalmente sobrevino la consternación: el adiós convertido en contestadora. El nuevo tratante abrirá otra historia.

 

VII

Mi acto de fe en quien quedó en su lugar se convirtió en el camino al cadalso. No sé hacer amigas de consulta; como no sea pagar a duras penas los honorarios, no tengo nada que ofrecer a cambio de un poco de cuidado. Pagué con cuerpo. Hoy busco con urgencia ampollas para la inflamación y una ética extraviada.

 

VIII

Son algunas de las penurias del otro exilio, el que deja el largo pasillo de la cromointerferencia aditiva, ahora convertida en sustractiva.

Dora Andara
Últimas entradas de Dora Andara (ver todo)

¡Comparte esto en tus redes sociales!
correcciondetextos.org: el mejor servicio de corrección de textos y corrección de estilo al mejor precio