Urbana. 27 años de Letralia
Este texto forma parte de la antología publicada por Letralia el 20 de mayo de 2023 en su 27º aniversario
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Urdimbre
La urbe despeinada engulló la angustia,
socavó las arterias de la desdicha
y proclamó, con su horizonte extendido,
la pulcritud del mejor tiempo pasado.
Los gritos enjaulados en sus fauces
gota tras gota fueron anegando la nostalgia,
con valijas plenas de placeres reprimidos
y pecados para el perdón de las pasiones.
La remisión de lo intangible
transitó las calles con sus desafueros,
el apego fustigó a lo pernicioso,
engoló la piel de cemento
y las protuberancias del sudor citadino,
mientras una manada de almas buenas
acudía presta a las campiñas del norte yermo.
La sangre de las luces apiladas en esquinas
confundiose con los pasos compungidos
de quienes urdieron la génesis de sus antojos…
Hálito
Era la ciudad extraviada del otoño.
El verbo de los gestos habitaba la penumbra
en el cuántico reverso de la fortuna.
Pequeño antro del universo,
cúspide de conflictos itinerantes,
página primera de un alma desbocada,
saliva de frases esculpidas en lo etéreo,
oficio de caprichos testarudos
…plagados de mundos y planetas
sin órbitas compartidas,
donde las monedas ejercen su reino
confortadas en los solios de la apatía.
Sólo luces manoseadas aparentan sonrisas,
en la oscuridad de una noche plagiada
por los enigmas de la sindéresis,
…que van agazapados tras la duda
de un mañana sin un hálito de esperanza…
Culpas
Esta ciudad que hilvana melancolía
en pasos transeúntes,
parece asfaltada con las pestañas de la impiedad
…………cuando reptando entre risas etílicas,
le pide al día que ilumine el final
en cada noche de espanto.
Las miradas levitan en la atmósfera fría,
que va calando en los huesos de la intemperie.
Las carnes del cansancio juegan su mejor carta
…tras la puerta de un dormitorio,
atosigado por la incertidumbre del mañana.
Las luces conquistan el neón
en pieles curtidas de esfuerzo y baratijas,
buscando asiento en primera clase
de un consumismo que depreda vidas,
sin que notemos que, a nuestras espaldas,
se yerguen incólumes las propias culpas
…….saturadas de afán y conformismo…
Ego citadino
Lo común me esperó atento en una esquina.
Le acompañaban las cosas simples,
ordinarias,
….diarias,
……..sempiternas,
…mareadas ya de tanta cotidianidad,
y sumergidas en un cielo de contradicciones
…..entre normas y parámetros minusválidos.
Nadie más estuvo con nos,
….sólo la somnolienta ciudad derrochando
…..sus sonoros millones de habitantes,
…con la piel embebida de sólo yo y nadie más
en los días oxidados por la premura de siempre.
Desplegamos los rostros alucinados
………entre el monóxido y demás humos,
…..desde la gente y otros accidentes naturales,
…propios de la inexactitud del falible universo.
Confundidas desfilaron emperifolladas
disímiles circunstancias de instantes eternos,
……disfrazados de vida y regocijo
….con un tosco antifaz de frustraciones,
…mientras los suspiros del recuerdo
…….caminaban con lentitud acompasada,
por la acera de la otra orilla.
Miramos las miradas
…que auscultaban nuestra apariencia,
y sólo descubrimos en ellas
…..la indiferencia que las describe
….como la certeza de lo improbable,
…sin importar para nada
…….el material con que están hechos
…………..los ladrillos del pensamiento…
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