Un ciego estaba sentado con un grupo de personas. El grupo vio algo gracioso y rió. El ciego también rió. El grupo le preguntó: “¿Qué viste para reírte?”.
El ciego dijo: “Ustedes se rieron, ¡yo también tenía que reír para no equivocarme!”.
De Xiao Zan1
- Elogio de la risa. Libro escrito por Zhao Nanxing (1550-1627).