La almeja se asoleaba con sus valvas abiertas; la garza extendió su pico para comer su carne. La almeja cerró sus valvas y atrapó el pico de la garza.
La garza dijo: “Si no llueve hoy o mañana, ¡habrá una almeja muerta!”.
La almeja le dijo a la garza: “Si hoy o mañana no sacas tu pico, ¡habrá una garza muerta!”.
Ninguna de las dos accedía a desprenderse. Un pescador entonces las capturó.
De Zhan Guo Ce