|
Libros en escenario natural.
|
|
La inauguración de la XI Feria Internacional del Libro de Caracas, FilCaracas 2004, se realizó el
pasado 14 de mayo y estuvo a cargo del ministro de Educación, Cultura y Deportes, Aristóbulo Istúriz,
junto a otras autoridades. El evento —que, por segundo año consecutivo, se realizó en el Parque de Los
Caobos, un fresco pulmón vegetal en pleno centro de la capital venezolana— se extendió hasta este
domingo 23, cuando fue clausurado entre tambores, "candeleros" indígenas y números musicales.
Este año el encuentro editorial tuvo como invitados de honor a los pueblos indígenas de Latinoamérica,
y se anunció que la 12ª edición rendirá similar homenaje a los pueblos afroamericanos.
Lourdes Fierro, presidenta del Centro Nacional del
Libro (Cenal), dio a conocer algunas cifras preliminares de la FilCaracas 2004: el costo del evento fue
de 520 millones de bolívares; la asistencia de público se estima en unas 400 mil personas, igual que la
feria de 2003, aunque los visitantes compraron más libros. El público que predominó estuvo compuesto por
docentes, abogados, médicos y otros profesionales, estudiantes y personal secretarial.
El nivel de ingresos promedio de los compradores se situó entre 250 mil y 1 millón de bolívares. El
crecimiento de la Feria fue de 30% con respecto a la edición anterior; en este año participaron 128
expositores —51 más que el año pasado— que se ubicaron en 115 stands; los precios de los libros más
vendidos oscilaron entre 2.000 y 25.000 bolívares, y las ventas al mayor realizadas por editoriales
extranjeras superaron los 100 millones de bolívares.
En las rondas de negocios se cerraron cuarenta acuerdos con la participación de 33 agentes del sector
editorial: 19 venezolanos, 10 indígenas venezolanos y extranjeros y 12 agentes visitantes, y el monto de
las negociaciones supera los 200 millones de bolívares; los participantes de Guatemala y México, por
ejemplo, representaron a 19 y 23 editoriales de sus respectivos países.
El Pabellón Infantil atendió a unos 12.000 niños en nueve días, realizó 132 talleres, ofreció 44
espectáculos y propició 22 encuentros de niños con autores.
Fueron repartidos 180 millones de bolívares en bonos-libro, sin contar con los cesta-libro que asignó
el Consejo Nacional de la Cultura (Conac) para los
trabajadores de sus entes tutelados, canjeables en Monte Ávila y la Red de Librerías Kuai-Mare.
Añadió Fierro que se superaron ampliamente las expectativas de la feria, que "se perfila como la
ideal para pequeños y medianos editores que confrontan dificultades en otras ferias donde las grandes
editoriales multinacionales captan la mayoría de los negocios".
Por primera vez una feria internacional del libro abrió sus puertas a los pueblos indígenas de América
como invitados de honor. La representación editorial y cultural de sus representantes incluyó
participantes de México, Guatemala, Perú, Ecuador, Bolivia, Colombia y Venezuela, además de la red de
editores del Caribe (Capnet), Argentina, Cuba y Estados Unidos.
Durante el evento se hizo pública la Declaración de los Pueblos Indígenas de América, cuyos
signatarios exigen ser incluidos como beneficiarios de la Política Integral del Estado para el Libro y la
Lectura como autores, editores y distribuidores del libro.
La oferta para FilCaracas 2005 incluye desde la posibilidad de extenderla a dos semanas (tres fines de
semana), hasta un pabellón especial para las editoriales alternativas; el Portal del Libro Venezolano con
participación de todo el sector; el catálogo bilingüe que cuenta con apoyo de Bancoex. Anunció también
que está casi listo el proyecto de recuperación del Parque de Los Caobos que adelantan Petróleos de
Venezuela, el Conac y la Alcaldía de Libertador, en el que se contempla la inversión de 3.000 millardos de
bolívares según lo han anunciado autoridades de la mencionada alcaldía.